EL AFTERWORK DE LOS VIERNES

Jordi Basté, el amigo de Guardiola que lidera las ondas en Cataluña: "Nunca imaginé lo de Flick, es como lo de Ronaldinho, yo pensaba que no sería para tanto"

El locutor de Rac1 empezó narrando carreras de galgos y terminó siendo una de las personalidades más reconocibles de toda Cataluña.

Jordi Basté, en una foto de archivo./
Jordi Basté, en una foto de archivo.
Lu Martin

Lu Martin

Es hipocondriaco, bastante feo, calvorota, muy alto, tiene TDA, inteligente como pocos, y tiene un despacho que es un desastre. Por ese desorden será por lo que siempre ha tenido la teoría de que el que es desordenado siempre acaba encontrando lo que busca. Es posible que nadie en Catalunya, o en el Estado español, trabaje tanto, ni mejor que Jordi Basté y está por saberse que se mete, más allá de buenas dosis de cafeína. Seguramente nunca buscó ser quien es, pero resulta que a día de hoy, a partir de las 06.00, cuando saluda las ondas de RAC1 "Bon dia Catalunya" casi un millón de personas se enganchan a la emisora.

Da igual si entrevista al alcalde Tarragona para hablar del problema de las palomas en la ciudad –y de la movida con el Nastic y un árbitro descubierto por catalanofobia- o si por su micrófono pasan David Trueba o Pedro Almodóvar, el Presidente del Estado Español o el de Catalunya en el Exilio, si trata de problemas mentales o es el único capaz de llenar una vez al año el Palau de la Música para hacer, como sucederá la semana que viene, una gala ridícula, en la que su equipo, su equipazo, el de la radio más escuchada de Catalunya, con permiso de la Cadena SER, saldrá a cantar, vergüencita ajena, ante sus oyentes, que harán cola de la madrugada para verles y comer turrones de gustos dudosos. Lo suyo desde los 16 años no tiene explicación, o sí: habla de curro y amor a la radio. Al Basté se le reconoce por sus amigos, por la buena selección de su equipo, porque le gusta comer bien, porque sabe de baloncesto, de música, de cine, de series de televisión, porque no viste muy bien, porque tiene dos hijas listas y guapísimas –sospecho que no son suyas, de la Sabata son, eso seguro- y porque además, es del lobby de Pep Guardiola.

¿Por qué es usted periodista?

Porque en mi casa se escuchaba la radio desde que tengo uso de razón y con 14 años entré en Radio Juventud para trabajar en un programa infantil. Empecé haciendo cuentos infantiles y presentaba discos tipo "ahora escucharemos el cuento de Blancanieves y los 8 los enanitos" y tal. De 9 a 11 de la mañana. Hasta que Agustín Rodríguez, padre, me dijo 'Oye empieza a hacer ya entrevistas con gente y tal". Con 16 años empecé a hacer entrevistas. Creo que las primeras entrevistas que hice fueron a jugadores de baloncesto, que eran Neus Bertran y Rosa Castillo. Y María Planas, que era la entrenadora, que es la mujer de Eduardo Portela. La siguiente entrevista importante que hice, y me sentí importante aquel día, porque trascendió, fue a Nicolau Casaus, que era vicepresidente del Barça. Luego después de Casaus a Alfonso Cabeza, o Jorge de Alessandro. Los nombres que recuerdo ahora y a los 16 años. Sí que es verdad que me cogió Juan Manuel Surroca, Juanito Surroca, que era jefe de deportes de Radio Juventud en aquella época, y me dijo, 'Venga, va, métete con nosotros aquí a un programa'. Era para hacer fines de semana. Y recuerdo que me cabré con mi padre, porque era los sábados de 10 a 1 de la noche y mi padre me dijo que ni loco volvía a la 1 de la noche con 16 años.

¿Y qué pasó?

Que le dije a mi padre que esa era mi vida, que la radio era mi vida. Y vio que sí, que la radio era y es mi vida. Total, que un domingo por la mañana me enviaron a transmitir, porque iba patrocinada, una carrera de galgos en el canódromo meridiana. Una muy bonita carrera de galgos. Pero lo mejor fue el día que llego a la redacción y me dice 'Vete a al Hospitalet-Bosco de La Coruña, de baloncesto, en Hospitalet', porque quien ganara, subía. La presidenta era una presidenta mujer, que se llamaba Papita, Papita Marsellés. Que murió seguro, porque estábamos hablando... Era un sábado por la tarde y llego yo, monto el equipo, porque antes se montaba, cada uno se llevaba el equipo y lo montaba, ponía sus auriculares, y me dicen, 'Oye, el partido es tan importante que en lugar de conexiones lo vas a dar entero'. Y yo dije, no, no lo puedo hacer, no soy capaz

¿Y lo hizo?

¡Collons si lo hice!

¿Usted jugaba al básket?

En el Bosco Horta, el Bosco, que era en mi colegio. Yo de medio campo para adelante era muy bueno. Muy bueno. De mano era cojonudo, las metía desde fuera, todas. Tenía muy buena muñeca.

Mira, como Santi Giménez, el del As.

¿Santi?

Sí, su colaborador, un genio del parquet.

No lo hubiera dicho nunca.

Pues sí, de la barra y el aro, pero siga...

O sea, yo le hubiera ganado un concurso a Pep Cargol, de tiros. Pero no defendía ni para atrás. Era alto y Juan Montes, me hacía jugar de pívot, yo quería jugar por fuera. Me gustaba mucho el baloncesto, pero ahora no, lo he abandonado totalmente.

Yo era de la época de Epi, Solozábal, Perico, Villacampa, Montero, Jofresa, Ansa, Xavi Crespo, Norris, Bueno, de pequeño Granilla, Welters... El primer recuerdo que tengo es con Nino Buscató. Luego una canasta de Joel Galván con Manel Comas de entrenador ganando la Copa Kara. La verdad es que el primero que me lleva al Palau es mi hermano a ver a Norman Carmichael y Bob Guyette. Luego ya iba con mis amigotes del cole. Y ya de periodista empecé a tratar con Nacho, Epi, De la Cruz... cuando empiezo en Catalunya Radio.

¿Llega a Catalunya Radio con Lluis Canut?

Sí, y con Santi Carreras. Me llamó Lluis Canut a casa y me dijo 'Oye, vente que quiero hablar contigo'. Paso un examen y ahí están Eduard Berraondo, Aisa, Jordi Iturria, Arcadi Alibés y Jaume Boix. Y por la tarde estaban Jaume, Pilar Calvo, Pere Escobar, Imma Pedemonte, Quique López Vilalta. Es cuando fichan a Puyal en el 84, creo recordar. Joder la primera gran transmisión que recuerdo de Catalunya Radio con Puyal es en la Copa de Europa en el 86 en Sevilla. Un speech espectacular en una habitación del hotel Los Lebreros después del partido, en programa especial. Un absoluto tratado filosófico sobre el Barça de la época que se me quedó marcado. Tan marcado como ver a Urruti beberse un whisky en el avión de vuelta. Para mí el whisky era motivo de celebración, de alegría y festividad, pero ahí estaba él, roto por la derrota, bebiendo, supongo que para olvidar. No sé. Aquel momento fue terrible. Lo primero que hice fue llamar a mi padre para explicarle lo que había visto.

Luego ha visto ganar alguna ¿no?

Sí, claro. Trabajando en el estudio casi todas. In situ, la de Pep de Roma, la de Wembley. También Wembley de aficionado, con Jordi Bosch y su padre, que en paz descanse. La última la viví en casa con unos amigos.

¿Y la del City en Estambul? ¿Esa se puede explicar?

Sí, hombre, sí, sí. Aquella fue muy triste. O sea, fue muy alegre, porque la esperábamos, los amigos de Pep la necesitábamos, claro, pero para mí fue muy triste a la vez porque se murió mi madre tres horas y media antes de que empezara el partido. Me llamó mi hermano. Yo estaba en Estambul y me dice 'No sabía si llamarte'. pero su hijo, que es mi sobrino, le dijo, 'Tienes que llamarlo no se vaya a enterar por otro'. Y me dijo: 'Es imposible, no puedes volver, te quedas a ver la final y ya vuelves cuando tengas previsto volver, no puedes hacer ya nada". Cuando marcó Rodri estaba con Pere Guardiola. Solo sé que cuando la caga Lukaku al final le dije: 'Esa mano la ha sacado mi madre'. Ahí me acordé de ella. Pere lo sabía, es de los pocos que sí, y Jaume Roures, porque estaban conmigo en el Gran Bazar cuando me llamó mi hermano. Pep se cabreó mucho conmigo porque no le dije nada ni después de la final.

¿Es verdad que Pep le llamaba cada noche durante los Juegos Olímpicos de Barcelona en el 92?

Sí, casi por superstición. Yo le contaba qué había visto en Barcelona y él me contaba qué había hecho con el equipo. Yo le tenía que llamar cuando acababa el programa de radio que hacía a las 12 de la noche sobre la jornada olímpica.

¿Usted que le conoce diría que mea colonia?

La gente tiene una imagen muy difusa de él, no tiene ni puñetera idea de cómo es Guardiola, de quién es. La gente habla por hablar de todo el mundo, yo creo que él es primero buena persona. Tremendamente buena persona.

Vale, pero usted es del lobby.

Yo no formo parte de ningún lobby. ¿Me han metido en un lobby? Me da igual. Si quieren que sea de un lobby, pues vale, pero la verdad es que es uno de mis mejores amigos, aunque lo llamo muy pocas veces, bastante tiene. Sabe que si lo llamo y tengo un problema me va a ayudar y viceversa. Yo lo conocí cuando tenía él... Pues no sé, cuando debutó, yo lo conozco el día del debut contra el Cádiz, desde aquel día no hemos dejado de ser amigos. Nos hemos distanciado desde un punto de vista físico, porque él está en un mundo y yo en otro, por muchas cosas, pero nos enviamos mensajes. Nos llamamos, claro, pero la sensación que tengo es que hay mucha gente injusta con él. Hay mucha envidia, hay muchos celos, viene de una cultura que es la catalana, y del Barça, que esto en determinadas zonas no gusta, fastidia. Ha sido el tío que ha puesto Madrid patas arriba.

¿Y qué le está pasando?

Yo creo que le pasa más al equipo que a él.

¿Seguro?

Sí, es una cuestión de hambruna. Tú coges al equipo, jugador por jugador, y tienen la panxa plena. Lo han ganado todo. Eso genera mucho. Hay ciclos. Si miras las grandes ligas europeas, en todas, todos los equipos tienen momentos. Nadie gana siempre y el City viene de una racha espectacular. Los jugadores del City, que han encadenado cinco Premier, tienen 32, 33 años, una Champions, tres FA... hostia, eso pasa factura sí o sí... Hay un problema de cansancio. Yo creo que Pep ha demostrado un talento sobrenatural.

¿Te sorprendió su renovación?

Sí, hasta una semana antes de que lo anunciara, sí. Es demasiado generoso, cuando vi que Txiki se iba, vi que seguía.

¿Por qué cae tan mal a mucha gente en España?

Por su significado catalanismo. Por el marcado madridismo del Estado español, que es el madridismo. Porque Pep reventó al Madrid con un Barça inolvidable. Y porque además se significó en el 1 de octubre inequívocamente. Pero es injusto, porque cada uno puede pensar lo que le dé la gana. Porque Alberto San Juan piensa como piensa, si alguien es de derechas ¿Este tío es un imbécil, es un mal actor? No.

Seguramente si hubiera ganado menos caería mejor.

Hombre, por supuesto, porque tiene una cosa que es muy buena, que no es un queda bien.

Pero a usted le pasa información.

Serás idiota ¡Tú sabes mejor que nadie que no! A ti te pasa más que a mí, y tú lo conoces también, si me dice 'He fichado a Haaland' y lo digo, mañana me tritura, no me habla nunca más en la vida.

Pep dijo un día que si te levantas muy pronto, muy pronto, eres imparable. ¿Usted a qué hora se levanta?

Muy pronto, porque el programa empieza a las 6 pero antes hay que empezar a prepararlo, claro. Me voy a dormir pronto, me levanto a las 5.

Pero la gente piensa en el Basté...

Ah, claro, pero el programa del Basté son mucha gente, sin un equipo no eres nada.

Hablando de equipo, ¿qué le parece lo de Flick?

Me ha sorprendido mucho. Creo que la intuición de Laporta es sensacional. Yo no tengo la suficiente cultura futbolística como para evaluar, saber si era bueno o malo. Hombre, sabía quién era, que había sido el del 8-2 de la Champions, pero vamos, imaginarme esto no, ni el 80% del barcelonismo lo hubiera imaginado. Lo de Flick es como lo de Ronaldinho, todo el mundo me hablaba bien, pero yo pensaba 'No será para tanto'. En el fondo también creo que mucha culpa es de los jugadores y eso también lo dice siempre Pep.

¿Lo cualo?

Que hay que mirar antes en casa. Casadó es el ejemplo perfecto. Llevan 20 años buscando sustituto a Busquets y resulta que aparece Casadó y tema resuelto. Me tiene maravillado. Porque Flick está muy bien, pero creo que al final, como siempre, la solución la ha dado La Masia. Los buenos en Segunda son buenos, pero en Primera son buenísimos seguro, de lo que se trata es de apostar por ellos y Flick lo ha hecho.

Hablando de apostar, ¿qué le parece la apuesta del Nastic por acusar a un árbitro de catalanofobia?

A ver, la catalonobia existe. Lo que no me creo es que se compren partidos y eso no lo ha dicho nadie, así que por partes. Me aparece legítimo que con una grabación el Nastic denuncie una actitud personal que no afecta la compra de un partido por parte de un club, porque no me creo que en el 2024 nadie compre un partido pero... A título personal, que alguien tenga una actitud como la de un personaje que ha sido grabado y dice lo que dice... Eso está ahí y yo no debo decir nada. Eso es así. Pero no me imagino al alcalde de Malaga, ni al presidente... ¡vamos que no! Que esto es más serio.

¿Y lo del cantante ese multado por los decibelios en el Bernabéu? ¿Eso es club de estado?

Eso es que Florentino se lleva muy bien con las instituciones.

Y usted ¿con quién se iría de viaje mañana?

Con mis hijas.