Javi Guerra recoge el guante que le lanzaron Rubén Baraja y Miguel Corona

Cuando 'La Quinta del Pipo' irrumpió el nombre que más focos acaparó fue el de Javi Guerra. Entre que su talento ya se conocía de las inferiores, que se trata de un jugador vistoso y los golazos icónicos que marcó ante Real Valladolid y Atlético de Madrid, su nombre estuvo en boca de todos. Sin embargo, esa euforia se transformó posteriormente en una excesiva exigencia que provocó que, por momentos, se viera superado, fuera suplente de Hugo Guillamón, que mentalmente acusara las críticas (se borró su cuenta de Instagram), y que su rendimiento bajara.

Tras un verano accidentado con su salida al Atlético de Madrid que no se cerró, el club que hasta ese momento se había volcado con él públicamente cambió el discurso. Rubén Baraja pasó de decir el año pasado que era "culpa mía" que Guerra no sacara su mejor rendimiento, a decir hace un par de semanas que Guerra "debe ser más constante y exigirse mucho más". A la vez, el director deportivo, Miguel Corona señalaba públicamente que el club "había mantenido en verano a su columna vertebral" y que si Guerra hubiera salido en verano "no era de los 4 jugadores de la columna vertebral, con más minutos del equipo".

Los dos mensajes, tanto del entrenador como del director deportivo, fueron claros y directos a su jugador: necesitaban más de él. Y Javi Guerra, tras un inicio en el que ha estado igual que el resto del equipo, en las últimas dos citas ha cogido el guante que le lanzaron sus 'jefes' y ha dado un paso adelante. Si ante el Atlético de Madrid fue de los pocos que buscaba generar fútbol, ante el Girona cuajó su mejor actuación en bastante tiempo.

Guerra mostró ese peligro cara a la portería rival que tanto se le echaba en falta (tuvo 3 remates, el que más del equipo y fue el jugador que más 'goles esperados' generó), llevó el cuero a área rival (realizó 3 centros buenos) y fue el jugador del partido que más regates con éxito acometió con dos desbordes de esta forma. A ese trabajo 'vistoso' ofensivo lo acompañó con 5 recuperaciones, la mayoría en la presión alta que Rubén Baraja planteó en campo rival y que acabaron en los dos goles que decantaron el encuentro.

El propio Rubén Baraja ha reconocido hoy que el valenciano ha dado ese pasito que hace solo dos semanas le pedía, pero le ha exigido más si cabe. Preguntado por si consideraba que Javi ha dado un paso adelante, El Pipo respondió: "Sí. Tiene unas cualidades brutales, tiene que llevarlas al rendimiento, tuvo un buen nivel hizo un buen partido, pero aun así tenemos que exigirle más. Yo se lo digo siempre, ha de pensar en mejorar. Que cuando haga un buen partido, piense que ese ya pasó y el siguiente ha de ser igual, no se vive de lo que hace el día anterior", espetó el entrenador.

Javi todavía puede dar más. Lo sabe Rubén Baraja, por eso así lo hizo, lo saben en la entidad valencianista, lo sabe el mundo del fútbol (por eso Girona y Atlético de Madrid vinieron a por él en verano), y lo sabe el propio jugador que pasó de ser fijo en la Sub-21 y 'sonar' para la absoluta, a quedarse fuera de los Juegos Olímpicos y por momentos perder el puesto en el equipo. Por eso ha dado un pasito más, ahora como bien dice Baraja "ha de ser constante" y mantenerlo.