Iván Martín, el bilbaíno tapado del Girona: "Puedes engañar a la gente, a la prensa, pero no a los compañeros en el día a día"

Su golazo en el descuento del partido que enfrentó al Girona y al Atlético de Madrid mantiene vivo el sueño gerundense de proclamarse campeón de liga. Por eso, además de un sinfín de motivos, Míchel se deshizo en elogios hacia Iván Martín tras el partido: "Era el gran desconocido del juego del equipo y de lo que aporta. Hay algo muy bonito que les he dicho siempre al vestuario, hay que ganarse a los compañeros de equipo, y a esos les tiene ganados. Puedes engañar a la gente, a la prensa, pero no a los compañeros en el día a día", destacaba el entrenador del Girona.

A nadie se le escapa que está siendo el curso de su vida. Iván Martínez nació en Bilbao por casualidad -entiéndase en el buen sentido de la expresión-. Su padre era Guardia Civil, nacido en Madrid, y su madre es burgalesa. Al primero de ellos le destinaron a Bilbao y es allí donde nace el que ya es uno de los centrocampistas revelación del curso. Iván, que ni siquiera llega a jugar en ningún club vizcaíno durante su infancia, se muda a Torre-Pacheco (Murcia) con sus padres -a su progenitor le destinan allí-.

Iván ingresa en la cantera del Villarreal, donde destacó. Sin embargo, al acercarse al profesionalismo, le ceden al Mirandés (en Segunda), equipo en el que también fue importante con José Alberto López Menéndez de entrenador. Al curso siguiente, da el paso a Primera con el Alavés. En el conjunto babazorro, apenas cuenta con minutos, tan sólo 156, repartidos en seis partidos. Su papel dentro del campo -se desempeñaba como extremo, lejos de la portería rival- tampoco ayudaba. Sin embargo, todas estas experiencias dibujaron al futbolista que, actualmente, brilla en el Girona.

Sin embargo, y a pesar de la irrupción del bilbaíno en LALIGA, el Athletic nunca ha mostrado un especial interés en él, tal y como ha podido saber Relevo. Si bien es cierto que le siguen, como a todos los jugadores vascos, desde el conjunto bilbaíno consideran que esa posición, la de centrocampista, está bien cubierta con Oihan Sancet, Unai Gómez o los futbolista de su prolífica cantera, como Peio Canales, uno de los últimos niños prodigio de Lezama.

En Girona, Iván parece haber encontrado la horma de su zapato y el fútbol que mejor se adapta a sus características. Además de la confianza ciega de Michel en él. Su tercer curso en el conjunto gerundense es el de su consolidación. "Entrena increíble, aporta vestuario, es capaz de hacer mejor a los demás, siempre te da una línea de pase, siempre te presiona, quiere el balón en los momentos difíciles... Eso sus compañeros lo saben. ¿Qué la gente no le valora? En el vestuario todos lo hacen. Creo que ahora la gente lo empieza a hacer, espero que no se le suba a la cabeza", bromeaba el técnico madrileño.

Iván Martín es el sexto jugador con más minutos en la plantilla gerundense: 1.392. Además, ha participado en todos los partidos menos en uno y suma 17 titularidades en 19 jornadas. Su gol ante el Atleti, en el minuto 90 y con el 3-3 en el marcador, confirma el sueño que está viviendo el bilbaíno y su irrupción en una de las mejores ligas del mundo.