El Barça celebra la vuelta de Araujo antes de Arabia, pero tuerce el gesto con su ambigüedad: "Ya veremos..."

Viajó ayer el FC Barcelona a Jeddah para disputar la Supercopa de España en Arabia Saudí con Joan Laporta, Dani Olmo y Pau Víctor, ambos sin licencia, y capitaneado por Ronald Araújo, uno de los líderes del vestuario azulgrana, desposeído de él durante muchos meses a causa de la grave lesión que sufrió el central uruguayo en el tendón isquiotibial del muslo derecho durante los cuartos de final de la Copa América. Y es que una de las mejores noticias de este turbulento inicio de año en clave azulgrana es la reaparición del defensor charrúa, que en Barbastro volvió a jugar tras 181 días en el dique seco. De hecho, hacía 240 que no lucía la elástica azulgrana. Lo celebró el club con un artículo en su web y una publicación en redes con "Cómo te echábamos de menos".

Entre medias, pasó por el quirófano y trabajó durante meses en su larga recuperación. Recibió el alta el pasado lunes 9 de diciembre, justo antes del partido de Champions League ante el Borussia Dortmund y 26 días después, en el duelo copero del pasado fin de semana, se volvió a calzar las botas en un encuentro oficial. Lo hizo como titular, con el brazalete en el brazo, ofreciendo un rendimiento más que notable y haciendo pareja en el eje de la zaga con Iñigo Martínez y con Pau Cubarsí, que sustituyó al vasco a la hora de partido. En su regreso, Araújo asistió a Eric García en el 0-1 azulgrana en su debut del curso en el torneo del KO.

A día de hoy, en vistas de la semifinal de Supercopa de España ante el Athletic Club y de una hipotética final ante Mallorca o Real Madrid que podría suponer el primer título oficial de la era Hansi Flick en Can Barça, ambos, Iñigo Martínez y Pau Cubarsí, parten por delante de un Ronald Araújo, que no tiene que "demostrar nada a nadie", tal y como él mismo manifestó en la modesta zona mixta del campo del Barbastro.

En el día de su reaparición, el charrúa atendió a los medios de comunicación, que, como a Flick, le cuestionaron sobre el sainete con la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor. "Estamos preocupados, claro, y esperamos que todo esto pueda resolverse cuanto antes. Los jugadores están chocados y como capitán intentas darles apoyo y tranquilizarlos", dijo Araújo, que termina contrato con el FC Barcelona en 2026, lo cual significa que dentro de un año sería libre para negociar con cualquier club si el Barça no le renueva durante 2025.

De hecho, la lógica hace pensar que en los próximos meses el FC Barcelona debe renovarle o venderle, si no quiere ver como se marcha gratis uno de los futbolistas con más cartel de su plantilla. De momento, no hay nada en firme, solo conversaciones iniciáticas. "Estamos hablando con el club sobre mi renovación, pero estoy centrado en en volver a jugar y en sumar minutos", así lo confirmó el propio Ronald Araújo, que lanzó un enigmático mensaje cuando le insistieron en su continuidad en Can Barça: "¿Si seguiré cien por cien en el Barça? Estamos hablando con el club".

El discurso poco esclarecedor de Araújo dista del que tenía hace justo un año, cuando en la previa de las semifinales de la Supercopa de España 2024 respondió a los incesantes rumores que le vinculaban con el Bayern de Múnich. "Son siempre rumores. En verano se habló del United, siempre lo demuestro centrado aquí. En todos los mercados se habla, estoy centrado, contento, estoy enfocado en eso, en dar lo máximo. Quiero hacer eso siempre", manifestó entonces el zaguero sudamericano.

"Ahora debo centrarme en coger ritmo, hacía mucho que no jugaba. No tengo que demostrar nada a nadie, creo que mi nivel lo conocen todos. Habrá que pelear por el puesto", añadió en Barbastroel central charrúa, que no es categórico sobre su renovación y cuya reaparición aligerará la carga de minutos de Iñigo Martínez y Pau Cubarsí, dos de los puntales de Hansi Flick en sus primeros meses como entrenador del FC Barcelona.

Ahora que el futuro de Araújo y su posible renovación entra en escena, el entrenador alemán, que hasta Barbastro no pudo disfrutar de las prestaciones del defensor uruguayo, le echó un capote en sala de prensa y dejó a las claras que su trascendencia en el equipo va mucho más allá del césped: "Es un verdadero líder y un capitán también en el vestuario. Es bueno tenerlo".