El día después de Jesús Navas, cerca del vestuario y el ciclismo de su ídolo Pogacar

Si complicado ha sido para Jesús Navas decir adiós, más aún será encajar el día después de todo. Con muchas más preguntas que respuestas, el palaciego encara, a partir de ahora, el momento más determinante de su vida, la cual ha estado cargada de miedos que retrasaron su llegada a la más élite del fútbol internacional. Nadie sabe realmente qué hará la mayor leyenda sevillista, ni qué cargo ocupará dentro del club, pero hay ciertas bases en la que se sostiene su futuro.

La primera, sin duda, es un vestuario que le reclama. Jesús Navas se ha convertido en estos primeros meses de competición en el alma de un equipo que pide a gritos experiencia. García Pimienta ha sido inteligente y rápido para, desde el primer día, saber darle su sitio a un futbolista como el palaciego. Él siempre te va a dar el máximo y si ve que eres bueno para su Sevilla, irá a muerte contigo. Mantener su figura cerca de la primera plantilla es una necesidad para la entidad hispalense, ya que es ese faro que guía a los suyos.

Prueba de ello fue el último derbi, o el partido que cerró su carrera en el Sánchez-Pizjuán ante el Celta de Vigo. Jesús Navas fue el principal argumento para sus compañeros en el rumbo hacia la victoria. Y ayer, además, todos pidieron su presencia en el vestuario. No se sabe si será en el staff técnico, en otro puesto... o haciendo lo que él quiera. Porque se lo ha ganado a pulso. Otras leyendas, como Pablo Blanco, también continúan en la disciplina del club nervionense desde hace bastante tiempo. Este tipo de figuras no las puede dejar escapar el Sevilla.

Y la otra base en la que se sostiene el futuro de Jesús Navas es el ciclismo. Sí. La bicicleta ha aliviado los últimos meses de carrera del palaciego, pues su cadera descansaba con el pedaleo. No sentía dolor y el sevillista, un auténtico loco del deporte, se comenzó a aficionar cada vez más a esta disciplina. No únicamente a practicarlo, sino también a verlo, convirtiéndose así Pogaçar en su ídolo, quien precisamente no quiso perderse su último día.

"Hoy quiero desearte un retiro épico. Felicidades por tu increíble carrera, y ahora espero que tengas más tiempo para hacer otras cosas que querías hacer antes y no tenías tiempo porque sé lo ocupado que estás siempre", le comentó en un vídeo donde personalidades del ciclismo como Enric Mas, Alberto Contador, Óscar Perreiro y Pedro Delgado se despedían de la leyenda. Navas, emocionado, contó que Pogaçar es su ídolo... justo antes de que su mujer Alejandra le diera una de las sorpresas más emotivas de la tarde.

Le regaló una bicicleta profesional, la cual Jesús Navas podrá utilizar en sus rutas por la Vía Verde, en numerosas ocasiones acompañado por su hermano Marcos. De hecho, además de este detalle, otro regalo relacionado con el mundo del ciclismo estaba reservado para la mayor leyenda del Sevilla: un maillot amarillo que finalmente no llegó a tiempo para la ceremonia. Un nuevo mundo que se le abre al palaciego: el ciclismo. Ahora tendrá tiempo de dedicarse más a este deporte que le ha encandilado... y que, conociendo su mentalidad, no se puede descartar nada en su carrera profesional.