VILLARREAL - FC BARCELONA

El desconocido y asimétrico sistema con el que Marcelino amenaza al Barça y en el que Danjuma no veía su hueco

El técnico asturiano, ligado siempre a un 1-4-4-2 que no es tan así, explica en Relevo el peculiar dibujo del Villarreal (1-3-2-4-1).

Danjuma, con la camiseta del Villarreal antes de ser cedido al Girona. /GETTY
Danjuma, con la camiseta del Villarreal antes de ser cedido al Girona. GETTY
Alfredo Matilla
Nacho Sanchis

Alfredo Matilla y Nacho Sanchis

La asignación tan manida del sistema 1-4-4-2 a Marcelino ha pasado a mejor vida. Casi tanto como la W-M de los años en blanco y negro. El técnico asturiano así lo reconoció esta semana en la reciente entrevista que ha concedido a Relevo en la Ciudad Deportiva José Manuel Llaneza de Vila-real. A colación de una pregunta sobre la salida de Danjuma, el asturiano se explayó, sin importarle mostrar sus cartas públicamente: "Para él prevalecía la idea de jugar mucho. Con nosotros, por nuestra estructura en el juego, en la mayoría de las ocasiones jugamos con un delantero. Y dos, digamos, mediapuntas…". Algo desconocido hasta ahora en su libreto.

Hasta la fecha, Marcelino siempre venía jugando de la misma manera y mantenía el mismo bloque en defensa y en ataque. Ni 1-4-2-3-1 de moda ni gaitas. Así logró ascender con el Recreativo y casi lo mete en Europa. Así, catapultó al Racing a la UEFA. De esta manera subió con el Zaragoza del infierno de Segunda. Y voló con el Valencia o el Athetic y se la pegó con el Sevilla. Dos centrales contundentes, laterales que no subieran a la vez, dos mediocentros complementarios y con estilos muy distintos y balas tanto en los extremos como en la delantera, con un ariete para fijar a los centrales y otro que ataque las espaldas. Lo que funciona nunca hay que tocarlo. Sin embargo, aquella idea de juego ha ido evolucionando.

Rascando más aún en esa nueva forma de jugar, Marcelino dio más detalles en la charla: "Sí, no hay dos delanteros centro. Además, la profundidad por un lado, [el derecho normalmente], nos la da un extremo. Y por otro el lado [el izquierdo] un lateral. Y no vamos muchas veces al 1-4-3-3. Es como si alternáramos dos estructuras. Con la que defendemos y con la que luego atacamos. En defensa sería el 1-4-4-2 y en ataque, pues un 1-3-2-4-1". Y se pone a dibujarlo, metafóricamente, en la mesa con la pasión que suelen tener sólo los entrenadores, además de Enrique Ortego, Albert Blaya, Javier Sillés y cuatro locos más de la táctica.

Por este motivo Flick y su Barça están más que avisados de cara al domingo (18:30). Ver vídeos del Submarino de hace unos años sirve de poco. Si acaso, los de esta temporada. Por eso Danjuma vio que no tenía hueco para ser titular indiscutible como pretendía. "Si hiciéramos en ataque un 1-4-3-3, pues entonces él tendría una doble vertiente donde jugar o una doble opción, pero no era así", reconoce Marcelino. Aunque él nunca, según su versión, le empujó a una salida: "Yo hablo de mí: no tenía ningún interés. Y el club, tampoco. No se buscó una salida. Danjuma tuvo aquí una experiencia anterior. Y las experiencias anteriores son las que son, pero yo no estaba presente. De Danjuma no tengo ninguna queja. Ninguna. Todo lo contrario".

Posible once del Villarreal contra el Barcelona. RELEVO
Posible once del Villarreal contra el Barcelona. RELEVO

Pese a que se ha dicho y escrito que hubo roces entre ellos, a raíz de una conferencia de prensa de Marcelino, el entrenador del Villarreal lo desmiente: "Desde el primer día mostró una predisposición al trabajo extraordinaria. Siempre tuvimos un diálogo sincero y cercano. Pero él entendía que este año era muy importante para él. Y yo le dije 'mira, yo no puedo garantizarte que vas a ser titular siempre; pero sí lo que te voy a pedir es que si eres titular, tienes que comportarte igual que si no lo eres tanto a nivel de trabajo como a nivel de relaciones humanas'. Estuvimos hablando. Porque él vino a hablar conmigo. Además, súper majo. Y yo le dije que le iba a respetar. Que quería que se quedara. Que iba a respetar su decisión. Absolutamente. Y que no le podía prometer jugar 90 minutos. Dado que él consideraba que esta temporada, después de dos experiencias no muy buenas, era muy importante para él, salió. Eso fue lo que ocurrió".

Aclaraciones

Es más, pese a que Marcelino contó con Danjuma en varios de los primeros partido de Liga pero no le pudo garantizar ser fijo, acabaron como amigos: "Ha existido una cercanía que yo le agradezco. Y la despedida fue súper cordial. Sus palabras fueron de muy buen recuerdo. El problema es que hubo una rueda de prensa previa que se entendió como que era una respuesta a él. Y me expresé mal. Di un mensaje general. Tenemos que ser lo suficientemente analíticos para recordar que con los cinco cambios todo ha cambiado mucho", reconoce el asturiano.

Con ese nuevo sistema, Marcelino quiere que el Villarreal tenga mucha gente por dentro, para dominar los partidos, sin renunciar a la velocidad por fuera, como siempre ha sido un sello distintivo en sus equipos. Con esta idea será más sencillo, a priori, pelearle el balón al Barça, tan tendente a crear superioridades en medio campo. Atendiendo a esta explicación del técnico, el Submarino podría salir con este plan este domingo en La Cerámica (18:30): Conde; Femenía, Albiol, Logan Costa; Parejo, Gueye; Yéremy o Comesaña, Ayoze, Baena, Cardona; y Barry. Con esta base, el Villarreal es cuarto (11 puntos), empatado con el segundo y a cuatro puntos del líder, con tres victorias y dos empates y sin conocer aún la derrota. Marcelino no suele cambiar de planes por el rival. Veremos si el Barça lo hace por él.