Lo que se cuece en el Barça: el rompecabezas de Ansu Fati, la cláusula trampa de Araujo y Jonathan Tah a la espera
El futuro del canterano y la cláusula liberatoria del central uruguayo centran el interés en el equipo azulgrana.

Justo antes de empezar a escribir, la rutina adquirida desde hace décadas, nos obliga a realizar una última llamada que, sinceramente, suele ser rutinaria. Casi nunca aporta nada nuevo pero de vez en cuando, como hoy, hace variar el contenido esencial del texto. Una frase, "cuidado, que hoy puede cambiar todo con Ansu", nos obliga a referirnos al rompecabezas de Fati. Hasta ahora lo que sabíamos del delantero es que Hansi Flick, quien prefería que saliese en busca de minutos, aceptaba quedarse con el jugador porque el chaval no quería salir del Barcelona en el mercado invernal. Teníamos constancia también de que el club, con el imponente salario de Ansu, no encontraba comprador que asumiera semejante carga salarial y, finalmente, conocíamos también la postura de Deco respecto a las políticas de cesiones: el Barça, sin más fair play que ese que le ha permitido invertir en renovar a Araujo, Pedri, Gavi y hacerlo también con Iñigo Martínez, no quiere asumir parte de los salarios que se abonan a los cedidos. Las cosas, no todas, han cambiado, pero sí lo bastante como para que de aquí al 3 de febrero, cierre del mercado, pueda haber novedad con Ansu. Veamos.
Flick se mantiene en su postura. Si se va bien, si se queda, también. No hay ofertas razonables para traspasar a Fati. En cambio, Jorge Mendes, el agente plenipotenciario, se está moviendo por todas partes para encontrarle un destino al jugador sabiendo que un futbolista en las circunstancias de la que fue gran promesa blaugrana necesita acumular minutos tanto como el aire que respira. Está apretando al Barcelona para que ceda en sus exigencias. Concretamente en la de no pagar parte del sueldo al club de destino. Deco resiste, pero sin la intransigencia de hace unos días. En cuanto a Ansu, por lo menos hasta hace un rato, todo seguía igual. No quiere irse, pero desde el club se sospecha que las presiones de Jorge Mendes por tierra, mar y aire igual acaban convenciéndole. En ese caso, ¿cuál sería su destino? Fuentes del club dicen desconocer con quién está hablando el agente. Niegan contactos con el Ajax, aunque no niegan que puedan existir sin ellos saberlos, y no se mueven ni un centímetro de su posición con respecto al Sevilla, con quien existen pésimas relaciones por el 'caso Negreira' y a quien no quieren hacerle un favor ni aunque se lo pidan de rodillas.
La cláusula de Araujo
A partir de aquí, todo es cuestión de horas y todo está en manos de Mendes. La puerta de Ansu, que ya se había cerrado, está entreabierta y uno no se siente capaz de decir cómo terminará el capítulo final de este folletín. Lo que sí sabemos es que Matteo Moretto y Lorena González, tenían razón cuando explicaron en Relevo que la cláusula de Araujo, recién renovado, era de 65 millones en junio del 25 y subiría a 85 en la ventana invernal del mismo año. Aquí nos habían dicho otra cosa que, al final, resulta que es la parte que no le contaron a los compañeros. Y es que el apartado contractual que se refiere a la cláusula liberatoria del uruguayo tiene trampa. Son efectivamente, las cifras que decían Matteo y Lorena, pero quedan excluidos de esa opción todos los grandes clubes de Europa que son competencia directa del Barça. Los portaviones (Madrid, City, PSG, Bayern…) tendrían que pagar esos 300/400 que nos contaron a nosotros. Esto, traducido, significa que Ronald Araujo está en el mercado a un precio asequible para muchos clubes de Europa, pero inaccesible para los que, además de dinero, tienes opciones de discutirle la Champions al Barcelona.

Así las cosas, no cabe duda de que en verano habrá quien se acerque al Camp Nou con el dinero suficiente para llevarse a uruguayo y puede que el Barcelona, con el alemán Jonathan Tah en el equipo, acepte (o no) la oferta. La última palabra será del futbolista que deberá elegir entre la gloria de jugar en el Barcelona y la fortuna de ir a un equipo de segundo nivel, como lo es hoy la Juve que que ya ofreció 30 millones por él y tendrá que reforzarse para volver a estar, como ya ha estado durante décadas, entre los grandes de Europa. Estos próximos meses, en función del rendimiento de Ronald, serán claves para su futuro. A él, cuando marcó el segundo gol en Chanpions contra el Atalanta, le vimos hacer gestos inequívocos de que su intención era quedarse aquí, en el Barcelona pero al final todo dependerá de la bola que le dé Hansi Flick en todas las competiciones y, sobre todo, en los grandes partidos. En los que todos quieren jugar. Y así, en función de su importante, de su pro en el equipo, se irá fraguando la decisión de Araujo. Hoy es quedarse. Mañana, ya lo veremos.
Frenkie de Jong, en la órbita árabe para seguir los pasos de Unai Hernández
Lo que ha sido un visto y no visto es lo de Unai Hernández (20), mediapunta del Barça B que ya es jugador del Al-Ittihad. Tres años más dos opcionales, sueldo que le soluciona la vida a él y a su familia y figura que refleja el cambio de estrategia de Arabia que ya no sólo ha convertido su fútbol, dicho con todos los respetos, en un cementerio de elefante sino que apuesta por la juventud. Ya lo hizo en la Liga española llevándose a Gabri Veiga, pretendido por todos los grandes de Europa, pero que prefirió marcharse de Vigo a Arabia a cambio de un salario sideral y unas condiciones contractuales que en un par de años, con apenas 25, le pueden dejar forrado y libre, con una edad ideal, para volver a Europa. Una apuesta muy parecida a la de Unai que tuvo las primeras noticias del Al-Ittihad la segunda quincena de diciembre. Fue entonces cuando Ramon Planes, director deportivo que antes lo había sido del Barça y le conocía perfectamente, vino a España para visitar a su madre en Lleida y aprovechar el viaje para reunirse en Barcelona con Unai y sus padres. Y todo fue muy rápido. Se le hizo ver que con Pedri, Gavi, Fermín y Dani Olmo en el primer equipo sus opciones inmediatas iban a seguir siendo mínimas y decidió marcharse para seguir creciendo. Con un estilo de fútbol similar al de Álex Baena, que acaba de rechazar una propuesta para irse al Al Alhi con 18 millones de salario anual, Unai será compañero de Benzema y tendrá partidos para confirmar su apuesta personal. Y puede que con el tiempo se encuentre allí con algún conocido de la Ciutat Esportiva. El propio Al Ittiad tiene interés desde hace tiempo por Frenkie de Kong. Y dinero para llevárselo. El problema es el holandés. Hay dudas de que quiera irse a Jeddah pero también hay tiempo para convencerle. Ya llegará el verano