FC BARCELONA
La charanga que actuó en Montjuïc se defiende diciendo que el Barça no les pagó
El club invitó a 'Pujats de To' a actuar durante el partido contra el Leganés donde antes estaba la grada de animación.
La grada de animación apenas se cerró durante un partido. Los miembros de varios de los grupos que formaban se reunieron antes del encuentro contra Las Palmas para protestar por su situación. Aquella tarde, algunos penyistas ocuparon su zona. Contra el Leganés, el Barcelona sorprendió con una novedad: además de los penyistas, en la zona inferior se ubicó la charanga Pujats de To. Fueron invitados por el club y lo hicieron de manera gratuita.
Desde que la grada de animación no puede entrar al estadio, el ambiente en el Lluís Companys es mucho más frío. Lo fue especialmente el pasado domingo. Con el punto de inocencia del que no conoce en profundidad la situación pero con total franqueza, Marcus Sorg aseguró haber notado su ausencia durante el duelo contra el 'Lega'. "En partidos como el de hoy, donde todo está apretado, el equipo necesita apoyo. Si no están, no estamos contentos", dijo el asistente de Hansi Flick.
La charanga que contrató el Barcelona se ubicó donde anteriormente estaban los tambores y el speaker de la grada de animación. En algunas ocasiones, cuando trataron de iniciar cánticos se llevaron algunos pitos."Únicamente se interpretaron los cánticos del club", defendió la charanga en un comunicado en Instagram, después de haberse llevado muchas críticas en redes sociales. La grada, con mucho kilometraje en la animación, 'acostumbró' a los aficionados a un cierto guion de las canciones. Hay temas que son para un momento del partido, y temas para otro. Es raro, por ejemplo, que 'Un dia de partit' suene en el primer tiempo.
La charanga se dedicó a tocar temas de forma aleatoria, lo que creó una sensación de anacronismo. Del mismo fondo salieron gritos contra Laporta, recurrentes desde este fondo desde hace algún tiempo. Los miembros de la grada no pueden ocupar su zona, pero algunos de ellos, al ser abonados, pueden seguir acudiendo al estadio. No les ha sido vetada la entrada a nivel particular.
El Barça reclama a los grupos unos 21.000 euros por los "catorce expedientes disciplinarios por comportamientos contrarios a la normativa vigente en la zona de animación" abiertos durante la temporada pasada. La grada se queja de que son multas de la temporada pasada de las que no se puede demostrar su autoría. Además, insisten en que el club se niega a sentarse a hablar con ellos. O pagan o se mantendrá el cierre.