FC BARCELONA

El catalán y la Masia unieron a Take Kubo, Ansu Fati y Eric Garcia

Los tres jugaron juntos en el fútbol base del Barcelona y serán rivales este jueves en el España - Japón.

Ansu, Eric y Take, en el Alevín A del Barcelona./Instagram
Ansu, Eric y Take, en el Alevín A del Barcelona. Instagram
Albert Rogé

Albert Rogé

En el fútbol base del Barcelona conviven muchos sueños. Todos tienen el objetivo de debutar algún día en el primer equipo. Por el camino, coincides con entrenadores y compañeros que te hacen más amena esa espera. Aunque solo sea un año. O dos. No importa. Ese puede ser el inicio de una larga amistad. Y eso mismo sucedió entre Take Kubo, Eric Garcia y Ansu Fati.

El Barça se fijó muy pronto en Take Kubo. Óscar Hernández, su captador, explica a Relevo: "Lo vi en Japón e hice un informe que se tenía que fichar, esa era una de mis tareas dentro del club. Al cabo de unos años, por suerte, pudo venir ya que la familia vino a vivir a Barcelona".

Óscar, que es el actual ayudante de Mascherano en las inferiores de Argentina, fue una pieza clave en la adaptación de Take. "No conocían a nadie y les presté mi ayuda. Lo llevaba a casa en coche después de los entrenamientos. Alguna vez fuimos al Camp Nou para que viera los partidos del primer equipo y pudiera disfrutar e integrarse más rápido".

Take, con la camiseta del Barça. Twitter
Take, con la camiseta del Barça. Twitter

La madurez impropia de un niño

Otra de las claves de la buena adaptación de Take al Barça fue Eric Garcia. Capitán y líder de sus equipos, Eric hizo de hermano mayor del japonés, con el que fraguó una relación especial. Además, según explica Hernández, "la familia de Eric se portó muy bien con la de Take. En los desplazamientos, los padres de Eric eran los encargados de llevar a los padres y al hermano de Take para que no se perdieran ningún partido".

El actual jugador del primer equipo del Barça y de la selección española siempre ha sido muy bien valorado, tanto por sus compañeros como por sus entrenadores. Eric ha destacado por su personalidad y madurez, siendo el primero en ayudar, tanto dentro como fuera del terreno de juego.

Un idioma que une fronteras

Eric y Take ya venían de jugar juntos cuando ascendieron al Alevín A. A ese equipo, se sumó Ansu Fati, que venía procedente del Sevilla. Entrenado por Marc Serra y Dani Horcas, tenía jugadores como Nico González, Arnau Tenas o Adrià Bernabé, entre otros.

Ansu pasó a vivir en la Masia, donde coincidió con Take Kubo. Desde el primer momento, congeniaron. "Con Ansu es con el que hizo más amistad en la convivencia del día a día. Eric vivía en Martorell y solo entrenaba, mientras que Take y Ansu compartían tiempo libre al salir del colegio. Fue con los dos que más congenió", explica Óscar Hernández.

Dani Horcas, uno de sus entrenadores, explica que "todos alucinamos con lo rápido que aprendió catalán y castellano Take. Era una locura. Recuerdo que hacíamos bromas porque veíamos como Take y Ansu hablaban en catalán, era un show escucharlos. Eric también se sumaba a esas charlas. Ya se veía una relación que iba más allá de jugar juntos".

Take, Horcas y Ansu, en el Alevín A del Barça. Instagram
Take, Horcas y Ansu, en el Alevín A del Barça. Instagram

El triángulo perfecto

La sanción de la FIFA provocó que Take Kubo no pudiera jugar más de dos temporadas junto a Eric Garcia y Ansu. Tras mucho esperar, decidió marcharse a su país. Eric, con 16 años, decidió emprender la aventura en el Manchester City, mientras que Ansu se quedó en el Barça.

Con el paso de los años, todos se pudieron reencontrar otra vez. Era el círculo perfecto. Habían mantenido la relación y se veían cuando Take visitaba España. Sin embargo, el japonés no llegó a un acuerdo con el Barça y fichó por el Real Madrid. Eso no afectó a su relación, que sigue siendo muy estrecha.

Ansu y Take, en el Mallorca - Barça de la temporada pasada. LALIGA
Ansu y Take, en el Mallorca - Barça de la temporada pasada. LALIGA

En el España - Japón de este jueves, Ansu, Eric y Take se reencontrarán, una vez más, en los terrenos de juego. Ya lo han hecho en los partidos del Barça contra Mallorca y Real Sociedad, donde ha jugado cedido el japonés. Esta vez será con sus selecciones. Dos con España y uno con Japón. En el campo no hay amigos, pero fuera seguro que recordarán las muchas tardes que imaginaron un día vivir lo que están viviendo. Y juntos, que eso aún tiene más mérito.