BARCELONA - ATLÉTICO EN MIAMI

El Barça-Atlético en Miami depende del TAD: la RFEF ha pedido ayuda para autorizarlo sin arriesgarse a denuncias... y el tiempo se acaba

La Federación, para curarse en salud, ha pedido al CSD un informe jurídico. Estos lo han elevado al TAD, que tardará mínimo una semana.

Koke dialoga con Araujo durante un Atlético-Barcelona de la temporada pasada./GETTY
Koke dialoga con Araujo durante un Atlético-Barcelona de la temporada pasada. GETTY
Sergio Fernández

Sergio Fernández

Estamos a 4 de noviembre y el partido entre el Barcelona y el Atlético de Madrid que tanto LaLiga como Relevent quieren que se dispute en Miami el 21 de diciembre sigue estando en el aire. Faltan 47 días para la fecha señalada en el calendario para que se juegue este encuentro oficial de Liga, pero los tiempos empiezan a apretar y entre algunos de los organizadores ya está cundiendo el pesimismo.

La última hora del caso es que la Federación española de fútbol (RFEF), que tiene que autorizar el encuentro, ha pedido ayuda al Consejo Superior de Deportes (CSD) para ver si puede hacerlo. ¿Por qué? Pues porque está inmersa en un proceso electoral y, ahora mismo, no está claro si hay alguien con la autoridad necesaria para hacerlo.

No hay presidente (inhabilitado Pedro Rocha) y lo que gobierna ahora mismo la RFEF es una Comisión Gestora que apenas puede encargarse de las labores "del día a día": pagar facturas, nóminas. etc. De hecho, durante la anterior Comisión Gestora tras la salida de Luis Rubiales, que se tomasen decisiones relevantes como renovar al seleccionador, despedir a algunos alto cargos o firmar patrocinios importantes fue la causa de que tuvieran que enfrentarse a una denuncia y entrar en riesgo de inhabilitación. Nadie quiere volver a pasar por eso.

Por eso ahora quieren ir sobre seguro. La RFEF ha escrito al CSD no ya para saber si puede autorizar un partido oficial fuera de España, que esa no es la cuestión. La duda está en si puede hacerlo en la situación de Comisión Gestora en la que están inmersos. Si hubiera un presidente normal, lo podría haber autorizado y firmado sobre la marcha, porque en realidad no hay mucho problema para nadie con la disputa de este encuentro en Miami... Todos quieren, sobre todo el Barcelona, que necesita imperiosamente el ingreso que le va a suponer (unos 5 millones de euros).

El problema grave está en el tiempo. Con un presidente elegido, para un partido en febrero o marzo, no habría el más mínimo problema: el asunto es que quieren que sea ese encuentro en concreto (es el que ya tienen preparado) y no hay presidente en la RFEF.

Una semana más... como mínimo

El CSD va a elevar al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) esta consulta de la Federación. Como pronto, el jueves podrán afrontarlo, aunque sería muy poco habitual que lo solucionase tan pronto. La norma suele ser que nombren a un ponente de esta consulta, que la estudie y en la siguiente reunión se decida. Eso ya sería el próximo jueves y estaríamos a 14 de noviembre: a 36 días de la teórica celebración del encuentro. Muy complicado. La pelota está ahora mismo en su tejado y depende, mucho, de la rapidez con la que lo afronten.

No parece, en todo caso, un asunto demasiado difícil jurídicamente hablado: sólo tienen que decir si la Comisión Gestora puede o no autorizar ese partido. Si la respuesta es afirmativa, el permiso será casi inmediato. Si no... pues será el fin, por ahora, del partido de Miami, que por tercera vez se quedaría en el tintero. Con un presidente electo, la celebración de este encuentro que tanto interesa a LaLiga, Relevent y a los propios clubes será coser y cantar. El problema está en intentar sacar adelante este, que se ha convertido poco menos que en una contrarreloj.