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El Athletic, contra su maldición de tropezar en las 'finales' por Europa

Los rojiblancos reciben al Betis con la ambición de asaltar la sexta plaza y dejar atrás tropiezos habituales en los últimos años cuando rozaban los puestos europeos.

Los jugadores del Athletic celebran el último empate ante el Mallorca./EFE
Los jugadores del Athletic celebran el último empate ante el Mallorca. EFE
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

El Athletic y sus aficionados se han acostumbrado en los últimos años a recibir golpes cuando más duelen. Cuando toda la parroquia rojiblanca se vuelve a ilusionar y roza el objetivo, llega el mazazo. Le ha pasado en cinco finales de Copa desde 2008 y una de Europa League, pero también en LaLiga cuando rozaban los puestos europeos y tenían todo en su mano para conseguirlo. Esta noche vuelven a San Mamés con la posibilidad de asaltar la sexta plaza ganando al Betis.

Toda una "final" en la que quieren dejar atrás ese mal de altura que les ha acompañado en los últimos años. Este mismo curso también han vivido situaciones similares. La más importante, la caída en semifinales de Copa ante Osasuna. Pero también en LaLiga. Incluso jugadores como De Marcos o Iñaki Williams se han referido a ello en algunos tropiezos, como ante el Girona o el Getafe. En las dos últimas jornadas se ha repetido cuando, tras las derrotas de Villarreal o Betis, los rojiblancos dependían de sí mismos para meterse en puestos europeos. Pero fallaron.

El Athletic cayó la semana pasada ante el Sevilla, aunque siendo muy superior, y empató el lunes ante el Mallorca en un partido para olvidar que recordó esos viejos fantasmas. Esta irregularidad hace que la última vez que los bilbaínos ocupasen puestos europeos fuese en la jornada 15, en el mes de diciembre. Desde entonces han luchado por volver a este lugar privilegiado que se marcaron públicamente como objetivo a comienzo de temporada y en el que confían por el efecto Valverde.

Valverde, sin embargo, prefirió despejar balones fuera en ese sentido y dijo que no contempla ese problema. Incluso, consideró que el hecho de que "el Athletic esté cada año peleando por estas posiciones es un éxito". "Lo importante es que al término de las 38 jornadas estemos en esos puestos", concluyó, sin querer valorar si estas situaciones repetitivas pueden generar dudas en el vestuario.

Aunque el técnico prefiera pasar de puntillas, la realidad es que ha sido una constante en las últimas temporadas. El punto de inflexión, más allá de las finales coperas, podría ser lo sucedido en la temporada 2018-19, cuando los rojiblancos visitaron el Sánchez Pizjuán en la última jornada. Llegaron en séptima posición, con 53 puntos y tres por encima del Espanyol. Solo necesitaban un empate ante un Sevilla que no tenía nada en juego, pero los entonces entrenados por Garitano cayeron por 2-0 y finalizaron el curso en octava posición, fuera de Europa.

Aduriz e Ibai se lamentan tras caer en el Sánchez Pizjuán, junto a Garitano. Athletic Club
Aduriz e Ibai se lamentan tras caer en el Sánchez Pizjuán, junto a Garitano. Athletic Club

Desde entonces, todos los intentos por asaltar Europa han sido en vano. Y, además, son ya cinco temporadas sin jugar en Europa. En el curso 2019-20 ocuparon posiciones europeas en la primera vuelta, pero en la segunda comenzaron los problemas. Sobre todo lo sucedido en las últimas jornadas. El Athletic llegó a la jornada 34 con dos puntos menos que la Real Sociedad, que empató ante el Levante. Sin embargo, los bilbaínos cayeron ante el Madrid y quedaron a tres puntos de su eterno rival.

Una jornada después, los donostiarras perdieron ante el Granada y el Athletic volvió a caer en casa ante el Sevilla. Aun así, en la jornada 37 aún tenían opciones europeas, a solo tres puntos, pero el Leganés asaltó San Mamés y le dejó matemáticamente fuera de cualquier lucha continental. El golpe fue duro y unos meses después terminó con el despido de Gaizka Garitano y el fichaje de Marcelino como nuevo técnico.

Simón, expulsado en un decisivo Athletic-Leganés de la temporada 2019-20. Athletic Club
Simón, expulsado en un decisivo Athletic-Leganés de la temporada 2019-20. Athletic Club

En el primer curso del técnico asturiano los mazazos llegaron en la Copa, perdiendo dos finales en 15 días en el mes de abril, que dejaron al grupo muy tocado y ni siquiera pudieron pelear en las últimas jornadas por los puestos altos. Sí lo hizo el año pasado, rondando estas posiciones durante toda la campaña pero encontrándose de nuevo con estos tropiezos en los días clave. Y desde muy pronto.

Ya en la jornada 24 perdieron en Mallorca pudiendo asaltar la séptima posición y en la 29 no fueron capaces de pasar del empate ante el Getafe, cuando podían reengancharse a la lucha tras un tropiezo del Villarreal. Dos partidos después, visitaron al submarino amarillo pudiendo superarle en la tabla pero volvieron a empatar y, lo que es peor, unos días después cayeron ante el Celta en San Mamés teniéndolo de nuevo en su mano.

Aunque parezca mentira tuvieron una opción más en la jornada 34, separados por un punto del Villarreal, pero no pasaron del 0-0 ante el Valencia en Bilbao. Desde allí fueron a contracorriente y llegaron con opciones a la última jornada, pero cayeron en su visita al Sevilla y tampoco le acompañaron los resultados. Un constante choque contra la pared europea. Hoy, sin embargo, tienen la opción de romper esta dinámica de los últimos años y asaltar puestos europeos cuando solo falten 5 jornadas. San Mamés esta vez no puede fallar.

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