Asencio le viene bien a Tchouameni y se postula como el 'salvador' de… Rüdiger
El canterano merengue está convenciendo a todos en sus primeros partidos con el Real Madrid.
Raúl Asencio (2003) es la nueva sensación del Real Madrid. El canterano blanco, nacido en Las Palmas de Gran Canaria, se ha ganado en cuatro partidos el derecho a ser valorado como futbolista de la primera plantilla merengue. Su debut ante Osasuna fue ilusionante y su personalidad en Anfield, la confirmación. Hay central para Ancelotti.
La irrupción de Asencio ha sorprendido a muchos en Valdebebas. Hasta al propio jugador, que ni en sus mejores sueños contaba con figurar como uno más del primer equipo del Real Madrid. Joan Martínez y Jacobo Ramón estaban por delante de él en la rotación, y ahora todo ha cambiado para el canario.
En La Fábrica siempre han hablado del canario como un zaguero imponente. "Yo le recuerdo en juveniles y era un animal. Muy superior al resto", cuentan algunos compañeros que compartieron vestuario con él. Su progresión siguió hasta el Castilla, con el caso del vídeo sexual entre medias, sin perder nunca la confianza de Raúl.
Ahora se ha ganado la de Ancelotti, y ha supuesto un gran alivio para él. Con las lesiones de Alaba, Militao y Tchouameni, el italiano se quedó sin efectivos en el centro de su defensa, y Asencio le ha resuelto la papeleta, hasta el punto de convertirse ya en una alternativa real para sus alineaciones.
Por suerte, la enfermería blanca se va liberando y Ancelotti empieza a recuperar piezas. Tchouameni ya está listo para el trascendental duelo contra el Athletic de Bilbao, y tendrá minutos. Sobre el papel, el once titular del Real Madrid para las próximas citas incluiría a Rüdiger y Tchouameni como pareja de centrales, pero la baja de Camavinga podría extender el rol de Asencio y situar a Tchouameni en el centro del campo.
Asencio, buena noticia para todos
La consolidación de Asencio es una buena noticia para todas las partes. Amplía el abanico de opciones para el staff técnico y permitirá a Tchouameni jugar en el medio o en defensa, según sea más útil. Esto descargará de presión al francés, que vuelve de lesión y viene de unos meses complicados sobre el terreno de juego, despertando el runrún del Bernabéu. Pero sobre todo, Asencio se postula como la salvación de Rüdiger.
El jugador alemán no se ha perdido ni un partido este curso con el Real Madrid, tras una temporada pasada muy exigente, en la que lideró al equipo blanco por los títulos y también participó en la Eurocopa con Alemania. Rüdiger resiste sin lesiones y siendo clave para los blancos, pero necesita descansar. En el club temen por su estado físico, y la aparición de Asencio le permitirá tomar aire en algunas fechas de un calendario tan apretado.