GIRONA - VILLARREAL

El anecdotario de Raúl Ruiz oculta un playoff a Segunda entre Girona y Villarreal con un gol de campo a campo del portero 'Bollycao': "Salió en 'El Día Después'"

El exjugador riojano acaba de publicar 'Las temporadas de mi vida', su primer libro.

Once del Girona, en la 91-92, con Raúl Ruiz y 'Bolly'. /Ajuntament de Girona / CRDI
Once del Girona, en la 91-92, con Raúl Ruiz y 'Bolly'. Ajuntament de Girona / CRDI
Marc Mosull

Marc Mosull

Antes de que Raúl Ruiz (Logroño, 1964) se convirtiera en uno de los rostros más conocidos de Canal +, fue futbolista y tuvo una dilatada trayectoria en los campos profesionales y semiprofesionales del balompié nacional. Logroñés, Palencia, Gandía, Benidorm, Lugo y Numancia figuran en el extenso currículum del lateral riojano, quien también vistió la camiseta de un Girona que poco tiene que ver con el actual.

Raúl Ruiz aterrizó en Montilivi en 1991 y jugó dos temporadas de rojiblanco, en Segunda B: "Fue una época muy dura, había muchas deudas. Yo llegué en verano y en diciembre ya no nos pagaban; el presidente, que se llamaba Mascort, tenía galerías de arte e incluso llegamos a subastar litografías y cuadros para poder cobrar. También nos encerramos en el estadio por los impagos".

Pese a ello, llevando varios meses sin cobrar, el Girona estuvo a punto de ascender al fútbol profesional: "Teníamos un equipazo y jugábamos de cine, casi siempre con tres delanteros, y en la 1991-91, mi primera temporada, nos clasificamos para el play-off de ascenso a Segunda A, que era una liguilla contra Salamanca, Villarreal y Linense".

Un Villarreal-Girona en Segunda B

"Recuerdo que cuando fuimos al Madrigal antiguo, el campo del Villarreal, el técnico Xavi Agustí insinuó que como estábamos sin cobrar nos podíamos dejar perder... Y saltó Quique Yagüe, que estaba lesionado, y cogió la muleta que llevaba para apuntar a Agustí y le dijo 'míster, si esto fuera un rifle le pegaba un tiro en la cabeza'. Nos quedamos parados y respondió el entrenador riéndose 'solo era para saber si alguno se había vendido'", rememora con una carcajada el de Logroño.

Lo que sí iba en serio es que cuando dio la alineación, Agustí cambió a todos los futbolistas de posición: "Yo que jugaba por la derecha, me puso en la izquierda. A Mercader, que jugaba en el centro del campo, lo puso de libre. Bueno, una cosa rarísima". Todavía fue más insólito el primer gol del encuentro. Su autor fue el portero Josep Maria Soldevila, conocido en el vestuario como 'Bollycao' o 'Bolly' "porque protagonizó un anuncio de Bollycao".

El caso es que 'Bolly', quien falleció en la pandemia a causa de un cáncer, marcó de portería a portería en una de las primeras acciones del encuentro: "Buah. Fue un golazo. Es que el balón botó directamente dentro. Fue brutal. Fíjate como de espectacular fue ese gol que salió en 'El Día Después'. El inglés [Michael Robinson, mentor e íntimo amigo de Raúl Ruiz] lo metió en su programa. Terminamos ganando 2-4 en el Madrigal y nos quedamos a las puertas del ascenso porque en el último partido, en El Helmántico de Salamanca, dependíamos de nosotros mismos, pero fuimos en cuadro y perdimos por 2-1 con un gol del padre de Juan Mata. Y subió el Villarreal".

De su paso por Cataluña, Raúl se acuerda especialmente del entrenador Xavi Agustí: "Era del fútbol de antes. Era vivo, espabilado… pero rozaba la trampa. Él fue entrenador del Banyoles y me decía que cuando quería suspender el partido pedía que se abrieran las compuertas del lago del municipio para que se inundara el campo. También recuerdo que en los últimos encuentros de Liga, estando apercibido, yo jugaba con la ficha número 12, pero llevaba el dorsal 11 para que no me sancionaran si me enseñaban una amarilla. Y si nos pillaba el árbitro… decía que se había equivocado", desvela el riojano, cuyo primer reportaje para El Día Después tras colgar las botas fue sobre la picardía de Agustí.

3.720 quinielas para cubrir el alquiler

"Lo que me dolía más era no poder pagar el alquiler a mi casero, y al final de mi primera temporada estuve a punto de rescindir mi contrato… pero llegué a un acuerdo con un directivo a través del cual me dejaba vivir en uno de sus pisos a cambio de que le rellenara unas cuantas quinielas. Era un estudioso y se ve que hizo sus primeros 40 millones de pesetas con las quinielas", cuenta el exjugador gironí.

No eran ni una ni dos ni cien quinielas. Eran 3.720 a la semana: "De cuatro columnas, y con triples y dobles, no como ahora. Tardaba un montón de horas en hacerlo y me terminaban doliendo los ojos de tanto fijar la mirada. Cuando iba a tomar algo con los compañeros, me las llevaba y las iba rellenando. También me ayudaba mi novia, Maite". Y así fue como Raúl Ruiz se 'financió' el alquiler y cumplió los dos años de contrato que tenía firmados con el Girona.

Raúl Ruiz con la camiseta del Girona.  Ajuntament de Girona / CRDI
Raúl Ruiz con la camiseta del Girona. Ajuntament de Girona / CRDI

'Las temporadas de mi vida'

De Xavi Agustí, los impagos, las quinielas y del play-off en Villarreal, y de otras muchas vivencias en Girona, Palencia, Gandía... y del resto de clubes en los que jugó, escribió Raúl Ruiz en su primer libro, recientemente publicado y que lleva por título 'Las temporadas de mi vida'. En él echa la vista atrás y rememora sus experiencias futbolísticas desde que empezó a pegar patadas a un balón, en el barrio de Yagüe de Logroño, hasta su retirada en el Numancia de Soria, en 1996.

"Cuento cómo me ficha el Logroñés por un saco de balones o que un año dejé de jugar a fútbol porque un gallego que vino al barrio me propuso hacer teatro, de flautista en la obra El retablo del Flautista de Hamelin. Ganamos varios certámenes y me dieron una beca para estudiar arte dramático, pero preferí volver al fútbol. Lo curioso del caso es que ese gallego era Celso Bugallo, que entonces era un actor anónimo, pero que años después ganó el Goya a mejor actor secundario en 'Mar adentro'", evoca Raúl Ruiz sobre uno de los capítulos de su vida y de su obra.

"Tras mi historia en el Numancia, el libro termina con una foto de Michael Robinson conmigo en un sidecar y su frase después de la eliminatoria contra el Barça, cuando dijo 'Quiero fichar a este pavo'. Ahí acabó mi carrera en los campos y empezó en la televisión… y esa es la que contaré, si procede, en un segundo libro", concluye el exjugador y reportero Raúl Ruiz, que en 'La jugada de mi vida' realiza un acertado retrato del fútbol modesto de antaño y un anecdotario de su extensa carrera por el barro nacional, en el que jugaban Girona y Villarreal mucho antes de alcanzar los focos de la Champions League.