Las anomalías del Madrid femenino convierten al equipo en una 'rara avis' dentro del club
La falta de implicación de Florentino Pérez, un Santiago Bernabéu inédito o el conformismo, entre los argumentos.

Para explicar —sin caer en el populismo— por qué el Madrid femenino es una rara avis dentro de la idiosincrasia del club blanco hace falta mucho contexto. Como ocurre casi siempre, la última derrota ante el Barça (las blaugranas golearon a las blancas por 5-0 en la final de la Supercopa) volvió a agitar el avispero.
Acostumbrados a los triunfos o a reinar en Europa, al seguidor tipo del Madrid y a voces más reconocidas, como Paco González o Juanma Castaño, les cuesta entender al Madrid femenino. "El Real Madrid no se puede permitir tener una sección tan perdedora", atizó el último de ellos en el Tertulión de la Cadena Cope.
Lo cierto es que desde su creación, el 1 de julio de 2020, el hito más importante en la historia del conjunto femenino es el subcampeonato de la Copa de la Reina de 2023. En un partido que las colchoneras empataron en el 95' y ganaron en la tanda de penaltis. En la Champions, han alcanzado los cuartos de final en dos ocasiones (2022 y 2025). En el campeonato liguero, se han afianzado en la segunda posición, pero lejos del Barcelona. En la Supercopa su mejor participación fue la del domingo pasado (logrando el subcampeonato) y en la Copa de la Reina, la mencionada al inicio del párrafo.
La falta de implicación de Florentino, un Santiago Bernabéu inédito...
Quizá uno de los puntos más controvertidos es el que tiene que ver con Alberto Toril. Tras la destitución de David Aznar, el club blanco confío el futuro de su sección a un hombre de la casa. Ocurrió el 29 de noviembre de 2021. Pero, con el transcurso del tiempo, Toril se ha convertido en el foco de muchas las críticas.
Muchos se preguntan si, teniendo en cuenta los resultados y extrapolándolo al fútbol masculino, Toril hubiese aguantado tanto en el banquillo. Otros acusan al entrenador blanco de falta de autocrítica y de cierto conformismo. Un pensamiento que desemboca en otro: se necesita más atención del club blanco a su sección femenina.
La habitual ausencia de Florentino Pérez en el palco en los partidos importantes del Madrid —como en la última Supercopa— alimenta esa teoría. Por ejemplo, el presidente blanco suele dejarse ver en el palco del Movistar Arena, presenciando los partidos del Madrid de baloncesto.
Otro punto a tener en cuenta es que el Madrid es el único equipo de Liga F —y de los pocos punteros de Europa— que todavía no ha jugado en el estadio donde el primer equipo masculino disputa sus encuentros. A pesar de que, tal y como adelantó Relevo, se habían dado los primeros pasos para abrirlo, no tiene pinta de que vaya a ser en este curso.
Sin su Mbappé y con el 'problema' del Barça
En el aspecto deportivo, y teniendo en cuenta la política de fichajes del club blanco, muchos echan en falta la incorporación de una gran estrella mundial. A lo Jude Belligham o Kylian Mbappé. Si bien es cierto que en sus inicios, una apuesta que sigue manteniendo, el Madrid se nutrió de algunas de las estrellas jóvenes nacionales más prometedoras, los aficionados echan el falta un fichaje de relumbrón.
En su día, las incorporaciones de Kosovare Asllani o Sofía Jakobsson o, este curso, el de Melanie Leupolz podrían encajar (sobre todo el de esta última) en ese perfil. Pero ya ha ocurrido que cuando el Madrid sale al mercado en busca de estrellas, se topa con su propia política salarial y algunas futbolistas se decantan por otros destinos. En la rueda de prensa previa a la final de la Supercopa, Alberto Toril elogió el camino del club con su sección femenina: "El camino es progresivo, el club lo hace francamente bien en ese sentido, progresa en el camino que considera, no por la repercusión".
Por último, el Barça. La realidad es que es uno de los mejores equipos del mundo y por suerte o por desgracia para el conjunto blanco, compite contra ellas. Si bien es cierto que la diferencia de trayectoria (y de plantilla) entre ambos clubes es significativa, también lo es el balance de resultados de los enfrentamientos entre ambos clubs.
El Madrid y el Barça se han visto las caras en 16 ocasiones y las blaugranas siempre han salido victoriosas. Además, las estadísticas son demoledoras: un total de 58 goles a favor para las culés, por seis para las blancas.