UD LOGROÑÉS

Los temblores del otro hijo de Francesc Arnau en un bar al ver a su hermano de portero: "Fue como si mi padre le ayudase desde el cielo"

Marc Arnau sí que es guardameta y juega en Tercera RFEF con el Mollerussa.

Pol Arnau fue el héroe en la eliminatoria de Copa. /EFE
Pol Arnau fue el héroe en la eliminatoria de Copa. EFE
Marc Mosull

Marc Mosull

Pol Arnau escribió anoche una de las historias más bonitas de la Copa del Rey. El joven lateral, que juega en la UD Logroñés de Segunda RFEF, acabó siendo el héroe de una eliminatoria contra un conjunto de Champions League como el Girona. Y lo fue... ¡bajo palos! Como su padre ya fallecido Francesc Arnau. Sin ser portero, Pol sostuvo a su equipo en los 15 minutos que estuvo con un menos sobre el césped y detuvo el penalti decisivo a Abel Ruiz para clasificar a los riojanos.

"Tengo el móvil bombardeado, no quiero saber como lo tiene mi hermano", dice a Relevo Marc Arnau, el otro hijo del exguardameta del FC Barcelona. Lo más curioso del caso, que todavía le añade más color a la historia, es que Marc sí que es portero y juega en el Mollerussa, un equipo de la provincia de Lleida que compite en Tercera RFEF.

"Yo viajo en coche con el entrenador de mi equipo, Moha, y estábamos volviendo del entrenamiento siguiendo el partido por la radio. Y cuando llegamos donde vive él, escuchó que tiene que salir el portero y que no había cambios. Y le dije, 'verás tú que se pone mi hermano'. Cuando anunciaron que se metía él, fuimos corriendo a un bar de al lado a ver lo que quedaba. Era el 112 o un poco antes", relata el futbolista del Mollerussa, club al que llegó este verano procedente del Badalona.

Por si faltaba algún elemento en este relato, Moha, el técnico del Mollerussa, es el exfutbolista marroquí Mohammed El Yaagoubi, que jugó entre otros equipos en Espanyol, Girona, Osasuna y el filial del Barça, donde coincidió con Francesc Arnau en la temporada 1997-98. "Sí, sí, Moha fue compañero de mi padre en el Barça B", confirma su hijo, el que es portero de verdad.

“Se me caían las lágrimas”

Volviendo a la cronología de los hechos, Marc y Moha se detuvieron en un bar para ver los últimos minutos del UD Logroñés-Girona, con su hermano Pol en la portería de los riojanos: "Me temblaban las piernas. Me pedí un Nestea y se me caía del vaso. Estaba temblando muchísimo y cuando vi que el Girona llegaba al área lo pasaba muy mal. Cuando llegaron a penaltis sabía que pararon uno. Ya antes, dije 'verás tú como se para un penalti'. Madre mía… cuando lo vi que lo paraba, me emocioné mucho. Se me caían las lágrimas. Fue un momento único", narra con sentimiento el guardameta del Mollerussa.

Marc, que hizo todo lo que pudo para ir al partido a Las Gaunas pero no pudo, todavía está asimilando lo sucedido. "No he dormido nada", comenta. Tampoco su hermano. Ya ha podido hablar con él, que, claro "también está en una nube". Ni él mismo se esperaba una actuación así, pues "Pol no había hecho nunca de portero, ni tan siquiera jugando en casa; nunca, nunca". "Se ve que le preguntaron en una entrevista y dijo que se fijaba mucho en mí", añade Marc.

“Fue como si mi padre le ayudase desde el cielo”

"Es que parecía portero. La técnica no era de un jugador que no se ha puesto unos guantes nunca. Y el blocaje que hizo en un chute de fuera durante el partido… increíble. Fue como si mi padre le ayudase desde el cielo", cuenta un Marc Arnau que decidió ser guardameta "porque se le daba mejor que jugar" y que es consciente que "tener un referente como su padre en casa le ayudó".

Por cierto, no solo Francesc Arnau y sus dos hijos se dedican al fútbol, también lo hizo la mujer del exguardameta del Barça y del Málaga, una María José Camacho, que como su marido, jugó en el primer equipo femenino azulgrana y boquerón. Ayer, estuvo presente en la gesta en el estadio de Las Gaunas de Pol Arnau, cuya historia podría tener un capítulo más si a la UD Logroñés le toca el FC Barcelona en el sorteo de la próxima ronda de Copa.