El Betis le da la espalda a la Conference y Petkovic lo remata

El Betis no quiso la Conference League. Como tampoco peleó la Europa League. Todavía queda la vuelta en Zagreb el próximo jueves, pero los de Manuel Pellegrini se complicaron la eliminatoria ante el Dinamo en un paupérrimo partido, en un Benito Villamarín medio vacío. 25.091 espectadores, según las cifras oficiales, que asistieron a una noche dolorosa, que sirvió para evidenciar los problemas que ha tenido el Betis en Europa desde el inicio de la temporada.

Un primer tiempo muy pobre, con un solo disparo con peligro de Fekir, y un segundo tiempo que sólo encontró una reacción al final y casi a la desesperada, pero que se chocó contra el poste de Nevistic. Ni el triple cambio del entrenador chileno antes de la hora de partido reactivó a los heliopolitanos, que luego fueron castigados por Petkovic. El delantero, el mejor jugador del equipo croata, aprovechó el penalti cometido por Chadi Riad, y que el colegiado ucraniano señaló tras consultar el VAR.

Le queda al Betis una semana dura por delante -con el compromiso liguero del domingo ante el Alavés por medio- antes de viajar a Croacia para buscar la remontada. Sin Pezzella, que vio una amarilla que le impedirá jugar la vuelta y que también agrandará los problemas en la defensa. Esa planificación estival que ya castigó a los heliopolitanos en la Europa League ha vuelto a aparecer como un fantasma en la Conference a las primeras de cambio.

El Betis comenzó el partido perdiendo. La desoladora imagen de la grada para un partido europeo ya invitaba a la reflexión. La peor entrada de la temporada para el estreno en la Conference League. A pesar de las promociones lanzadas por el club verdiblancos en los últimos días, el Benito Villamarín no registró el ambiente habitual en día de partido, una cuestión que deberá ser tenida en cuenta por los dirigentes. No se ha acertado con el modelo de pago elegido para iniciar la aventura en la tercera competición europea, por lo que, aunque sea de manera interna, el club tendrá que asumir ese error. "Por llenar la caja, estadio vacío", se leyó en una pancarta que sacaron los aficionados, molestos con esa decisión ejecutada.

Tras la inesperada eliminación en la Europa League, donde ya se impusieron condiciones a los abonados, los dirigentes podrían haber tenido un detalle con el aficionado, a la vez que hubiera servido para lanzar un mensaje a los rivales. Reunir a más de 50.000 espectadores en el estadio no está al alcance de la mayor parte de sus rivales en la competición, con lo que se hubiera dejado claro que el Betis quiere la Conference. Pero lo que sucedió fue todo lo contrario.

No está siendo la mejor temporada del centrocampista portugués, al que las ausencias para la Conference League le daban una oportunidad para engancharse al equipo. Nada más lejos de la realidad. Hasta errando pases o controles sencillos, William Carvalho nunca ejerció como ese manijero que necesitaba el Betis para romper el entramado defensivo del Dinamo. Le ha faltado ritmo al luso desde comienzos de temporada -una lesión durante el verano le supuso un hándicap en su preparación-, pero tampoco en una noche que se prometía adecuada para sus características tiró de orgullo.

Antes de la hora de partido, Pellegrini lo envió al banquillo, con un triple cambio con el que también retiró a Abde y Rodri, otros dos jugadores que tampoco se reivindicaron con la camiseta de titular. "Nos faltó creatividad", indicó el propio Pellegrini, que tampoco la encontró con Assane Diao o Sorroche.

El delantero del Dinamo Zagreb demostró los motivos que lo convertían en la previa en el mejor jugador del equipo croata. Con su corpulencia desahogó a su equipo en la salida de pelota, una de las claves que sirvió para desactivar los tímidos intentos del Betis de presionar en campo contrario. Además, el delantero había sido protagonista en la previa, al tildar de "payaso" a Robert Jarni, lo que seguro que le sirvió de motivación para salir al Benito Villamarín y demostrar que su equipo venía a algo más que ser convidado de piedra. La rabia con la que celebró el gol de penalti así lo demostró.

Las bajas han castigado al Betis en Europa. Si algunas de ellas han sido por lesiones, como las importantes de Guido, Isco o Ayoze, otras han venido por una mala planificación que se viene arrastrando desde el verano. Sólo podían incluir los verdiblancos a tres caras nuevas para la Conference League y eso provocó que Pellegrini dejase fuera a dos fichajes como Pablo Fornals o Chimy Ávila, que seguro que le hubieran dado otro aire al equipo. El entrenador chileno decidió incluir, además de a Chadi Riad y Johhny Cardoso, a Bakambu. Pero el congoleño se ha incorporado apenas 24 horas antes del primer partido, tras disputar la Copa África, lo que también lo dejó fuera. Todo un caos que el equipo verdiblanco acabó pagando.

Poco se le puede reprochar al argentino en esta temporada, en la que ha sumado la mayor parte de los minutos y siempre ofreciendo un rendimiento notable. Pero esa protesta casi al final del partido lo privará de jugar el partido de vuelta en Zagreb, lo que dejará al Betis únicamente con Chadi Riad como central disponible. "Cometí un error en caliente", se lamentaba al final del partido Pezzella, que se perderá así un partido decisivo de la temporada. En una semana que había comenzado con la felicidad del anuncio de su renovación, el argentino acabó con mala cara y aceptando que no fue el partido que esperaban.