Una triste fotografía final de Lamine Yamal tras un partido de época descubre su verdadera mentalidad: "No sorprende nada"
El delantero catalán recibió a regañadientes la camiseta conmemorativa de los 100 partidos con el primer equipo.

Lamine Yamal fue protagonista antes, durante y después del partido. Un disparo en el calentamiento hizo saltar todas las alarmas. Unas molestias le mandaron antes de tiempo al vestuario y al barcelonismo se le encogió el corazón. Unos minutos más tarde, saltó al campo a reinar. "Tras el 0-2 Lamine ha dicho: quietos todos. Ha levantado al equipo", comentó Jordi Cruyff, clave en su promoción al primer equipo, al final del partido, en Movistar.
Inzaghi incidió en la previa que no le había preparado ningún plan específico, pero una vez empezó el partido evidenció que iba de farol. Le plantó bien cerca a Di Marco, siempre apoyado por Mkhitaryan en las ayudas y un Bastoni vigilante por detrás. Nada pudieron hacer en el 1-2, una obra de arte que quedará para el recuerdo. "Lamine es un gran jugador. Siempre entra, busca el interior y regatear, buscamos defenderlo lo mejor posible, marcó un gol bonito. Estaremos preparados en la vuelta", señaló Sommer.
Aunque no todas fue hacia dentro, buscando la diagonal. La siguiente acción tras el gol Di Marco pensó que repetiría la jugada, pero congeló la jugada y el lateral picó. Se fue al suelo, Lamine lo dejó caer y el disparo se estrelló en el larguero. "Este chico es increíble", publicó en aquel mismo momento Haaland en Snapchat. Lejos de lamentarse por el roce de Sommer que acabó en el larguero, Lamine se giró a la grada y la espoleó. "No sorprende nada, estaba motivado y se le ha visto, es decisivo", dijo Ferran Torres.
"Es un fenómeno que nace cada 50 años. No he visto a un jugador como Lamine Yamal en los últimos ocho o nueve años. Teníamos que poner a tres jugadores sobre él", remarcó Inzaghi, rendido al de Rocafonda. "Es espectacular. Estoy muy contento por él, se lo merece", añadió Pau Cubarsí, compañero de generación y de La Masia durante tantos años. "Es de las mejores actuaciones personales que le recuerdo a un jugador", expuso Gerard López en Movistar.
"Lamine ha demostrado hoy su personalidad. Nos ha abierto hoy el camino. Estoy muy contento con él", subrayó Hansi Flick. Al acabar el partido, Lamine se fue lamentándose. Poco le importó que el MVP acabara en manos de Dumfries, tampoco que le entregara Ter Stegen una camiseta conmemorativa de los 100 partidos disputados con el primer equipo. No había nada que pudiera quitarle la sensación agridulce del final. "Todos sabemos lo bueno que es Lamine. Sería mucho mejor salir con una camiseta de 100 partidos y ganando", comentó Raphinha.