FC BARCELONA 3 - INTER 3

Las muecas de Dani Olmo muestran un inconformismo que viaja de la Selección al Barça

Si De la Fuente no lo quiere juntar con Pedri -solo seis minutos-, para Flick es titularísimo, pero (casi) siempre el primer recambio.

Dani Olmo, junto a Pedri y Pau Cubarsí, el pasado miércoles, en el partido ante el Inter. /GETTY
Dani Olmo, junto a Pedri y Pau Cubarsí, el pasado miércoles, en el partido ante el Inter. GETTY
Alberto Martínez

Alberto Martínez

No hay escenario perfecto para Dani Olmo, un futbolista que reúne unas condiciones excepcionales que le llevaron, por jemplo, a ser escogido MVP ante Alemania en los cuartos de final de la Eurocopa y uno de los máximos goleadores del torneo con tres goles. Bien lo saben en Leipzig, donde brilló en la Bundesliga, y en el Barça, que lo ha disfrutado más bien a cuentagotas por esas molestias físicas que le han hecho perderse hasta 15 partidos. El futbolista, el único fichaje del pasado verano por 60 millons pagados a plazos, no ha podido tener la continuidad necesaria, a lo que se ha unido el caso de su inscripción que le ha hecho pasar malos momentos en enero, cuando estuvo una semana sin licencia. La mente y lo físico van de la mano.

Todo este caldo de cultivo salió a relucir en los dos últimos partidos. Dani Olmo es titularísimo para Hansi Flick, un especialista en la mediapunta, capaz de recibir en espacios reducidos y marcar la diferencia con sus controles o desmarques. Pocos ejecutan a la velocidad del de Terrassa. Pero es un jugador con fecha de caducidad. "Tiene que demostrar su calidad en cada partido, es lo que queremos. Como Pedri, que está a un nivel increíble ahora mismo y rinde en todos los partidos. Y es lo que queremos también de Dani", dijo Hansi Flick el 20 de abril tras la remontada ante el Celta en la que el internacional fue determinante.

A Olmo se le pide que sea Lamine Yamal en cada partido. Y el mediapunta se ha convertido en un especialista, un sacacorchos, y sus muecas en los cambios reflejan su inconformismo y disconformidad. Ocurrió en la final de la Copa del Rey, cuando el técnico alemán lo sacó a los 64 minutos de partido por Fermín López cuando el Real Madrid apretaba. Y ocurrió lo mismo este miércoles ante el Inter: a los 67 minutos dejó su puesto. El partido estaba abierto y Flick considero que el de Terrassa ya no era imprescindible.

Olmo llegó al Barça como fichaje estrella, tras una Eurocopa de diez, después de querer regresar a la que fue su casa en su su etapa de formación. Pero no ha podido alcanzar el nivel goleador y de rendimiento de los Lewandowski, Raphinha y Lamine Yamal, mientras que por detrás Fermín López ha ido sumando buenas actuaciones para, incluso, disfrutar de más minutos que Olmo en el cómputo global del curso.

Si Flick busca continuidad, De la Fuente destaca que tiene suerte

En la Selección, la situación del futbolista tampoco es la idílica. Luis de la Fuente tiene otra manera de ver el fútbol y considera que Pedri y Olmo no pueden jugar juntos porque a ambos los ve en la misma demarcación: por detrás del punta. Eso lo que ha provocado es que solo hayan jugado seis minutos juntos, cuando en el Barça es una constante porque Flick ha reconvertido al canario en un mediocentro más. "Es facilísimo, son buenísimos y juegan en su club y jugarán con nosotros. Juegan con Fabián, con Merino... Afortunadamente tenemos tan buenos jugadores y tantas opciones y posibilidades. Hay veces que te toca jugar con esa alineación. A alguno le gustaría una y a otro le gustaría otra. Es decir que tenemos la suerte de contar con ellos y saben que pueden jugar juntos, pero también insisto, pueden jugar con otros compañeros", dijo el seleccionador en noviembre.

En la eliminatoria de cuartos de final de la Nations League ante Holanda, Olmo fue suplente en la ida pero titular en la vuelta. Solo hay sitio para uno de los dos, aunque a nadie se le escapa el momento de Pedri, para la crítica el mejor centrocampista de Europa y posible aspirante al Balón de Oro, por delante de Olmo en este Barça aunque sean compatibles. En el futuro es difícil ver a Pedri suplente con España.

El mejor Barça es con Olmo, que por circunstancias no ha podido tener esa continuidad que ahora le está afectando en los partidos. Flick tiene claro que debe ser decisivo en una hora de juego, luego probará otras cosas; y él navega en dos estatus distintos pero idénticos: en la Selección compite con Pedri y en el Barça, contra la fecha de caducidad como etiqueta.