Las inquietantes heridas de Guardiola encierran algo más: "Quiero lesionarme a mí mismo"
El técnico bromeó tras el partido por una serie de arañazos que se le pudieron ver en la nariz y el cuero cabelludo.
Lo de Guardiola no fue la frustración por convertir una victoria clara en un empate, aunque las circunstancias bien podrían haber invitado a autolesionarse. El técnico del Manchester City salió a la zona de prensa con una llamativa herida en la nariz y unos cuantos arañazos más en la cabeza.
"Sí, me lo hice con las uñas, me lo hice durante el partido. Quiero lesionarme a mí mismo", explicaba el término bromeando tras el encuentro. La imagen era muy llamativa, todavía más para un técnico que, con un micrófono delante, es calmado y tiene capacidad de llevar él la conversación.
Motivos no le faltan para estar confundido. El empate contra el Feyenoord es el último tropiezo en una racha terrible, quizá la peor de toda su carrera, que le ha llevado a contar sus últimos seis partidos con cinco derrotas y este empate, muy lejos de las prestaciones que se esperan de uno de los principales favoritos tanto para la Champions como para la Premier League.
"El partido estaba bien, con 3-0, jugábamos bien, después concedemos muchos goles porque en estos momentos no somos estables. Regalamos el primero y los demás y por eso es difícil", explicaba Guardiola en Amazon Prime después de un partido en el que iban 3-0 arriba y se dejaron empatar en los quince minutos finales.
"Hemos perdido muchos partidos últimamente, somos frágiles, necesitas una victoria, el partido era bueno para nuestra confianza, jugando a un gran nivel, pero algo pasa y estamos en problemas. No sé si es un problema mental. El primer gol no puede pasar, el segundo tampoco. Después de eso no sabemos qué pasa, estamos desesperados por ganar, por hacerlo bien, pero no".
El fin de semana toca el Liverpool, que es el líder y ahora mismo uno de los equipos en mejor forma de todo el continente. Mala medicina para curar las heridas.