Qué pasa con los equipos de la Champions League clasificados entre la 9ª y 24ª posición
El nuevo formato de la Champions League también presenta novedades en la fase de eliminatorias.
Poco a poco, los aficionados al deporte rey van asimilando el nuevo formato de la Champions League. La competición de clubes más importante del mundo dio un cambio radical para la temporada 2024/25, que ha necesitado de un periodo de adaptación entre los seguidores. De hecho, es probable que todavía pasen unos años hasta que las dinámicas del torneo se interioricen por completo. Sobre todo en su fase inicial, en la que la abolición del esquema tradicional por grupos aumenta las variables y, por lo tanto, hace más complicado capturar una panorámica de la competición.
Especialmente en los puestos que no corresponden a la cabeza estricta de la tabla. En la nueva Champions League, los equipos que finalizan la primera fase entre el 1º y el 8º puesto de la clasificación general acceden directamente a los octavos de final. Sobre el papel, el objetivo de todos los grandes del viejo continente. Además, es importante tener en cuenta que aquellos que figuran entre los puestos 25 y 36 terminan en ese momento su participación en el torneo. Sin embargo, todavía queda una zona gris de consecuencias por descubrir: ¿qué ocurre con aquellos equipos que terminan del 9º al 24º?
Qué pasa con los equipos de la Champions League clasificados entre la 9ª y 24ª
Resumiendo mucho: los equipos que finalizan la fase de liga de la Champions entre las posiciones 9ª y 24ª, ambas inclusive, se clasifican para disputar una ronda eliminatoria previa a los octavos de final. Se trata de dos partidos extra que funcionan a modo de repesca o de play-in. El premio es la clasificación a octavos de final, donde les esperan aquellos conjuntos que finalizaron del 1º al 8º, claro.
Sin embargo, no es todo tan sencillo como cabría esperar. La ronda de dieciseisavos de final de la nueva Champions League se configura por medio de un sorteo. Pero no se trata de una lotería libre, ni mucho menos. Más bien todo lo contrario. Se trata de un sorteo condicionado, que pretende conjugar al mismo tiempo el azar con el poner en valor la clasificación conseguida por cada equipo en la fase previa.
Cómo es el sorteo de repesca de la Champions
Según explica la UEFA en el artículo 19.2 del reglamento de la nueva Champions League, al término de la fase de liga, los equipos que finalizan entre el 9º y el 24ª se emparejan según su posición (9 y 10, 11 y 12, 13 y 14, 15 y 16…). Los equipos que han finalizado del 9º al 16º son cabezas de serie, por lo que contarán con el factor cancha a favor, mientras que el resto (del 17º al 24º) jugarán el partido de vuelta fuera de casa.
Así, lo que se sortea en realidad es a qué lado del cuadro va cada equipo. Es decir, de la pareja formada entre el 9º y el 10º, uno irá al lado izquierdo del cuadro y el otro al lado derecho. Lo mismo con la pareja formada por 11º y 12º y así consecutivamente.
De esta manera, los emparejamientos están predefinidos. Sin embargo, hay cierto margen para el azar. Es decir, el 9º y el 10º se enfrentarán siempre ante el 23º o el 24º, aunque el rival concreto queda determinado por el lado del cuadro al que va destinado cada miembro de la pareja. Lo mismo sucede con el 11º y el 12º, que se medirán siempre a 21º o 22º, según el lado del cuadro al que vaya cada uno. Así sucesivamente.
Enfrentamientos de dieciseisavos de final
- 9º y 10º contra 23º o 24º
- 11º y 12º contra 21º o 22º
- 13º y 14º contra 19º o 20º
- 15º y 16º contra 17º o 18º
El sorteo está previsto para el 31 de enero, una vez termine la fase de liga. Además, se trata de la primera piedra para edificar el camino hacia la Orejona. Una vez finalice esta ronda previa, la Champions League tiene previsto un nuevo sorteo en el que se determinará el cuadro completo de la competición. En este segundo sorteo el proceso se repite, con los equipos previamente clasificados para octavos de final repartiéndose por pares a un lado y otro del cuadro.