COPA DE CAMPEONES | BETIS - REAL MADRID

Arzu, el ideólogo del Betis que amenaza el triplete de Arbeloa: "Sólo pido que seamos reconocibles"

El exfutbolista marcó el primer gol del club en la Copa de Europa... y este sábado puede clasificar al Juvenil para su primera Champions. "Sería bonito, ¿eh?".

Arzu, entrenador del Real Betis juvenil. /REAL BETIS
Arzu, entrenador del Real Betis juvenil. REAL BETIS
Manuel Amor

Manuel Amor

En una llamada de esas que cambian vidas, Arzu (Dos Hermanas, 42 años) recibió en marzo de 2012 un telefonazo de su excompañero Capi para proponerle un nuevo reto: pasarse a los banquillos en la cantera del Betis. Acababa de retirarse en Tailandia y no pensaba en cambiar de rumbo tan pronto, pero asumió el desafío y su crecimiento como entrenador, paso a paso, está siendo imparable desde entonces. Después de casi una década como segundo, este curso ha asumido el mando del Juvenil A y ya ha hecho historia: ganó la Liga y ha alcanzado por primera vez la final de la Copa de Campeones. El Real Madrid de Álvaro Arbeloa, que busca el triplete, será este sábado (13:00, #Vamos) su último obstáculo hacia la gloria.

Como futbolista, el excentrocampista (270 partidos con el Betis) marcó el primer gol de los verdiblancos en la Copa de Europa. Fue en la 05/06, en un partido contra el Liverpool en el Benito Villamarín. Ahora, como técnico, puede clasificar a su club para su primera Champions juvenil en caso de doblegar a los blancos. Sería una manera perfecta de cerrar el círculo...

¿Cómo están los nervios a menos de 24 horas de la final?

Bien. Afortunadamente, hemos notado que al equipo no le ha pesado la presión de la competición. Hemos sido los mismos que en la Liga. Me ha sorprendido mucho la forma de llevar esto. Los jugadores, al fin y al cabo, son conscientes de la difusión que ha montado hasta el propio club aquí en Madrid. A veces les cuesta inhibirse de estas cosas, pero lo llevan con naturalidad y con ganas de competir. Transmiten que son una piña y valores de unidad. Ahí está nuestra fuerza.

¿Cómo se prepara un partido de este calibre? ¿Han tenido tiempo para analizar al Real Madrid?

Desde la última jornada de Liga apenas hemos podido parar. Los dos partidos contra el Valencia, el del Athletic, ahora la final... Son encuentros prácticamente cada tres días. La preparación del cuerpo técnico siempre se hace corriendo (risas). Recogemos información de cada equipo, pero somos un staff que filtra muchísimo y que descarga de información a los futbolistas. La seleccionamos minuciosamente. En el plano físico, todo está trabajado ya. Ahora te mantienes con la carga de partidos y los entrenamientos dejan de ser tan importantes en ese sentido. Queremos consolidar correcciones, fortalecer aspectos donde somos débiles y realizar ajustes con respecto al rival. En este corto espacio de tiempo nos hemos enfrentado a equipos muy diferentes. Trabajamos mucho lo táctico y, sobre todo, la motivación y la fortaleza mental.

¿Qué es lo que más le gusta del equipo de Arbeloa?

El talento individual. Sin ninguna duda. En cada parte del campo son top. Tienen buenos defensas, buenos centrocampistas y buenos delanteros. Va a ser un partido dificilísimo. En la cantera del Madrid sobra el talento. Manejan bien el balón y en el aspecto defensivo son muy agresivos. Intentaremos cometer los mínimos errores posibles, mantenernos en una zona del campo donde nos sintamos cómodos e intentar imponernos en los duelos. Se lo comentamos a los jugadores: es el último esfuerzo de la temporada, los últimos 90 minutos. Lo daremos todo... hasta donde lleguemos.

Vayamos al principio: ¿cuándo nace la pasión de Arzu por entrenar?

El año que me retiro. Colgué las botas en marzo de 2012, en Tailandia, y recibí la llamada de Capi. En ese momento el director de cantera era Pedro Buenaventura. Se enteraron de que me retiraba, querían que viniese para aquí y nos citamos en una reunión. Yo, en ese momento, no tenía ninguno de los niveles de entrenador sacado. Alterné el estar con la base con formarme. Desde 2014 hasta hoy he estado en la cantera del Betis ininterrumpidamente. Como no tenía prisa, he empezado desde abajo. Estuve dos años en alevín, pasé al Cadete B, dos años en el Juvenil A, tres en el Betis Deportivo... Y siempre como segundo entrenador. Este es mi primer año como primero. He crecido progresivamente y estoy muy orgulloso de ello. Siempre lo hablo con mis amigos futbolistas: no por haber sido jugador profesional se está plenamente preparado para llevar a un equipo y gestionar un grupo. Hay que dominar muchísimas cosas. Me ha venido bien hacerlo así. Creo que es la mejor opción si uno no ha estado formado. Son pasos pequeños, pero firmes.

Arzu y la llamada de Capi. RELEVO

¿Qué hubiera pasado si no hubiera recibido esa llamada de Capi?

Pues... me hubiera tomado un tiempo para pensar y para organizar mi vida. De estar vinculado al fútbol, tenía claro que quería estarlo sobre el césped. Es algo que me apasiona. Y ha sido todo un acierto. Me siento supercontento de haber tomado esta decisión. El día a día es muy parecido a lo que hacía antes.

¿Cómo se definiría como técnico?

Soy mucho del dominio del balón, siempre con la idea de mejorar la técnica y de enriquecer al futbolista. La pelota se mueve y nos movemos todos. Hay un plan de salida, pero debemos detectar dónde hacerle daño al rival. Por eso es importante tener información del contrario: no es lo mismo que te presionen con dos delanteros que con uno, con cuatro o tres centrocampistas... Dentro de unos principios básicos de desconcertar e intentar engañar al rival, me gusta que mis equipos tengan la pelota, encuentren buenos perfiles, hagan presión tras pérdida y sepan diferenciar si apretar arriba o esperar en bloque medio a un equipo que domine. Me encanta sacar la pelota jugada desde atrás, correr pocos riesgos, saber dónde se puede hacer un regate... Hemos ido muy poquito a poco y, al final, hemos construido un equipo con bases sólidas y que lo ha hecho muy bien. Los jugadores, simplificando el lenguaje, lo han entendido.

¿Qué entrenadores le han influido más?

El primero, por lo adelantado que estaba a la época, Víctor Fernández. Aprendí mucho a nivel de metodología. En las sesiones hacía tareas muy distintas y entrenaba siempre con el balón. Me quedo con él, pero también con la exigencia de Serra Ferrer, un técnico que ha sabido exprimir al máximo a sus equipos. Y en el extranjero tuve la suerte de estar con Sven-Göran Eriksson; de él cogí su veteranía, su saber estar y la velocidad del juego que tanto le gustaba. Era muy bueno en la progresión, en sobrepasar líneas. Fuera de ello, todos hemos vivido la mejor etapa del Barcelona, ya no sólo con Guardiola, sino con Rijkaard, y de la Selección española, tanto con Luis Aragonés como con Del Bosque. Coges cosas de cada uno y organizas tus propias ideas.

¿Qué es lo mejor y lo peor de ser entrenador de base?

Lo peor... a mí me cuesta mucho dejar a jugadores fuera. Ahora mismo, por ejemplo, no estamos todos. No eludo mi responsabilidad. Estamos en una etapa de alto rendimiento, compitiendo con canteras muy potentes, tenemos una plantilla muy amplia y no podemos inscribir a todos. Eso lo llevo mal. Lo mejor es ver crecer en un año a los niños. Cómo llegan, cómo mejoran y seguir su progresión.

Usted creció en la cantera del Betis en la década de los 90. ¿Cuál es el mayor cambio que percibe entre los chicos de aquellos tiempos y los de ahora?

Claro que han cambiado, pero es lógico. Van con la sociedad. Los años 90 no se viven como los de ahora. Estar conectados a través de un móvil era impensable en nuestra época. Este viernes he leído una entrevista de Relevo con Tevenet en la que hablaba de que antiguamente le costaba trabajo ver partidos suyos. ¡Es que es verdad! Antes, con el vídeo, resultaba imposible. Yo no tengo partidos míos de pequeño. Los hábitos cambian. Ahora hay mucha información: están pegados a un móvil y ven muchísimas cosas, quieren copiar otras...

¿Cuál es la mayor aspiración de Arzu? ¿Quiere seguir vinculado al fútbol formativo o le gustaría ir un paso más allá?

Claro que me gustaría avanzar. Estoy muy contento de haberme formado en mi casa y de estar en el Real Betis, pero uno quiere crecer. Eso sí, no tengo prisa. Igual que no la tuve prisas en formarme y en dar pasitos pequeños. Me considero una persona preparada para llevar la gestión de una plantilla, pero no quiero saltarme escalones.

Arzu, sobre su futuro más inmediato. RELEVO

Usted es de la generación de Joaquín y me han dicho que siguen viéndose a menudo...

Somos amigos, como nuestras hijas y nuestras mujeres. Solemos quedar con asiduidad y hacer lo que hacen los colegas. Tenemos una relación muy bonita. En esa época coincidimos muchos canteranos en el primer equipo y vivimos una etapa en la que el Betis se nutrió de jugadores de cantera. Hemos gozado de la suerte de compartir momentos preciosos en el club de nuestras vidas.

¿Os ha mandado algún mensaje?

¡Eso es sorpresa! Pero claro que tenemos algo preparado.

¿Cuál es el WhatsApp más especial que ha recibido en las últimas horas?

Siempre me llenan los mensajes de mi mujer y de mi padre. Mi mujer, que no entiende mucho de fútbol, se ilusiona. A ella y a mis hijos no les gusta tanto como a mí, pero estoy viendo que disfrutan y se alegran. Después, evidentemente, siempre llegan muchos de amigos, excompañeros, familiares... y eso también supone una alegría. Todo el mundo está muy pendiente. La difusión que se le está dando a esta Copa es fundamental. Los aficionados del Betis están disfrutando con el equipo. Todos los mensajes de cariño llegan aquí y los acogemos con ilusión. Te llenan de ánimo y de responsabilidad.

Quiero preguntarle por algunos de sus mejores jugadores. Assane Diao está ilusionando al beticismo.

Destaca en algo que, en estas edades, suele faltar: tiene un potencial físico enorme, una zancada brutal, conducción... Se desplaza muy bien y es vistoso, pero tiene que ir despacito. Este año ha vivido mucho. Empezó con nosotros y en la segunda vuelta ha estado con el Betis Deportivo. Lo está asimilando todo bastante bien. Es un chaval que maneja unos valores muy buenos, es muy educado. Me alegro de que esté viviendo todo esto, pero después hay que ser muy constante. No vale sólo con demostrarlo un año. Veremos cómo responde a lo que se le viene, sobre todo la próxima temporada, pero tiene buena pinta.

En usted sus chicos tienen un maestro perfecto para enseñarles a gestionar todo lo que hay alrededor del fútbol.

Sí. Intento darle normalidad a lo que hablamos, y siempre con ejemplos que ellos vean cercanos. Para ser futbolista no sólo hay que jugar muy bien al balón; tienes que pensar como futbolista las 24 horas. Deben cuidarse en lo preventivo, en la nutrición, en la recuperación... Hay muchos aspectos que deben dominar, y a a todos hay que darles importancia. La alimentación es muy importante. Tienen que estar en su peso. Están en cantera, pero intentamos apretarles. Cuando den el salto al mundo profesional, a lo mejor se encuentran entrenadores que, cuando te hagan las mediciones y te vean gordito, no te ponen. Todo cuenta para ser jugador profesional. Hay aspectos que suman... o que restan.

Arzu, sobre los factores a dominar para ser futbolista. RELEVO

Pablo Busto y Pablo García también brillaron en la semifinal ante el Athletic.

A Busto no le hemos tenido demasiado este año. Ha estado en muchísimas convocatorias con el filial. Es un jugador con el que hay tener cuidado: son muy buenos y los queremos meter en equipos superiores, pero después no acumulan los minutos necesarios para su formación. Hay que saber medir ese tipo de cosas. Le ha pasado eso en determinados momentos. Primero ha participado, después no tanto... Ahora nos está ayudando bastante y acumulando minutos. Es un chico muy aplicado y con una progresión enorme. A ver qué pasa el año que viene con él. Con Pablo García y Rodrigo, los juveniles de primer año, quiero tener más cuidado. Han sido muy importantes para nosotros y tienen un potencial grande, pero también muchas cosas que limar. Son demasiado jóvenes. Hay que insistir y trabajar con ellos. Tienen más inmadurez, cometen más errores en otros ámbitos y tienen que ir aprendiendo. Están viviendo cosas increíbles y todas esas vivencias se las están llevando ya. La Copa de Campeones, la Copa del Rey... Son chicos que tienen un gen competitivo grande y son ambiciosos. Eso nos gusta mucho.

Usted marcó el primer gol del Betis en la Champions y ahora puede conducir al Juvenil a estrenarse en la Youth League. ¿Qué se siente?

Es bonito, ¿eh? Pero no estoy tan pendiente de lo individual, sino del equipo. Me alegraría muchísimo por mis jugadores, más por ellos que por mí. Tenemos un grupo humano magnífico. El resultado de la final no empañará esta temporada. Lo comentamos a menudo: nos enfrentamos al Real Madrid y podemos perder. Sólo les pido que seamos lo más reconocibles posible, a lo que hemos sido durante toda la campaña y a las cosas buenas que nos han traído hasta aquí.