Aston Martin protege a Lance Stroll mientras desaparece del mapa a la sombra de Fernando Alonso
El piloto canadiense ha sumado casi cuatro veces menos puntos que el español con un equipo que aspira a ser subcampeón.
En Aston Martin se vive en una dicotomía continua. Por un lado, Fernando Alonso no deja de hacer sonreír a cada miembro del equipo, con siete podios en las 13 carreras disputadas hasta la fecha. El gran trabajo de la escudería desde el pasado verano ha caído como anillo al dedo del bicampeón del mundo español. Pero, ¿y su compañero de equipo? Lance Stroll, de 24 años, parece estara años luz del asturiano en cuanto a rendimiento y, sobre todo, en cuanto a resultados. Y eso es algo que un equipo que quiere luchar por el subcampeonato de Fórmula 1 no se puede permitir.
El joven piloto canadiense, hijo del dueño del equipo, Lawrence Stroll, ha sufrido desde el arranque de la temporada, tras las lesiones en ambas muñecas en un accidente en mountain bike en la pretemporada. No obstante, tiró de épica para lograr un sexto puesto entre dolores en la primera cita del año, en Baréin, mientras Alonso se subía al último escalón del podio. Menos de 16 segundos de diferencia tras 57 vueltas de sangre, sudor y lágrimas.
Pero, desde entonces, Stroll solo ha conseguido superar al asturiano, curiosamente, en el GP de España, donde Alonso decidió no atacarle en las vueltas finales por el sexto puesto. Ambos entraron en meta separados por tan solo ocho décimas. En clasificación. el canadiense ha batido al español en dos ocasiones: en el Circuit de Barcelona-Catalunya (0,513 segundos) y en Austria (0,018 segundos).
Los datos no engañan. El análisis que realizó Relevo antes del parón veraniego habla por sí solo. Alonso fue el piloto de la parrilla que más diferencia por kilómetro sacó a su compañero de equipo en las primeras 12 carreras del año: 0,114 segundos, lo que equivale a unas seis décimas por vuelta en un circuito como Monza, por ejemplo. Ni siquiera Verstappen, dueño y señor de esta F1 2023, supera por tanto a Sergio Pérez (0,089 segundos por km).
El canadiense parece haber entrado en un bucle del que no consigue salir. Su lesión no fue sencilla de recuperar y los dolores han continuado durante meses. El propio Alonso reconoció a principio de temporada que el año pasado había estado compitiendo con varios huesos rotos tras su accidente en Australia, pese al intenso dolor y calificó de "héroe" a su compañero en Baréin.
La situación de Stroll en el equipo, que tras 13 carreras ha sumado 3,5 veces menos puntos que Alonso (168 vs 47; 3º vs 9º en el Mundial; 78,2% de los puntos del equipo vs 21,8%), ha llevado a rumores de todo tipo, entre los que sorprendió por su inverosimilitud el de que en 2024 dejaría la F1 para dedicarse al tenis. "Bueno, tendría que mejorar mi revés un poco, porque no creo que esté muy al nivel aún. Me gusta pensar que soy muy bueno, pero no sé si estoy listo para enfrentarme a Djokovic y a Alcaraz", bromeó al respecto el fin de semana pasado en Zandvoort. "Fue algo bastante raro. No sé de dónde salió, pero fue muy creativo. Nunca he pensado en realidad sobre perseguir una carrera en el tenis, sinceramente".
Stroll subrayó el pasado sábado que aún sigue pensando en competir y que no ha pensado en un plan B por si algún día deja la F1. "Un día todos nos despertaremos y tomaremos esa decisión. Creo que cada uno de los pilotos de la parrilla se verá en esa tesitura. Pero ahora mismo solo estoy pesando en la carrera de mañana y, por supuesto, quiero seguir compitiendo. Eso es lo que me encanta hacer", añadió.
Un piloto «dedicado» que busca soluciones
Stroll parece haber asumido que Alonso vive en un estado de gracia único y que poco puede hacer ante ello. No obstante, desde el equipo aseguran que el canadiense sigue implicado al 100% en el trabajo diario de la escudería, que dedica muchas horas al simulador de Silverstone y que no deja de mover cielo y tierra para encontrar esas décimas que le faltan. No hay que olvidar que Stroll plantó cara a Vettel en ocasiones en 2021 y 2022 (aunque también cayó batido al final de temporada), y a Pérez en 2019 y 2020 (logrando el primer podio de Racing Point bajo esa denominación en Monza 2020). Aunque en ambos casos, siempre quedó por detrás de sus compañeros en el Mundial.
Por su parte, Mike Krack, jefe del equipo, quiso salir al paso de los rumores antes del GP de Italia, en Monza. El directivo de Aston Martin aseguró: "Estamos en Monza, es la época de los rumores en el mercado de pilotos y está un poco aburrido por el momento. Creo que ese debate no existe en el equipo. Estaremos bien el año que viene con los dos pilotos".
En Aston Martin, además, destacan el papel de Stroll dentro del equipo y aseguran que está entregado para mejorar y seguir sumando puntos clave para la batalla en la que está metido el equipo. "Creo que hemos visto en las últimas semanas a un piloto muy dedicado, que intenta analizar cada pequeño detalle sobre dónde puede mejorar, que conduce muchísimo tiempo en el simulador. Así que creo que no hay nada que vaya en esa dirección [la de la falta de compromiso]", añadió.
Krack, además, justificó algunos resultados de Stroll por las estrategias de carrera -puso el ejemplo de Zandvoort- y por los problemas de fiabilidad que, como le ocurrió a Alonso en 2022 frente a Esteban Ocon, han castigado más al AMR23 del hijo del jefe.
"No hay una diferencia marcada en rendimiento, hay una diferencia marcada en puntos. Y luego es importante separar entre los dos. Como equipo estamos analizando la temporada, desde ambos puntos de vista de ambos pilotos. Creo que como equipo necesitamos un trabajo mucho, mucho mejor en ese lado del garaje, en estrategia de carrera, pero también en cuanto a problemas de fiabilidad, que siempre han castigado a ese coche. Así que es algo que necesitamos hacer mucho, mucho mejor", aseguró.
"Tenemos que revisar la estrategia que adoptamos en Zandvoort. Creo que Lance tuvo un buen fin de semana hasta ese momento. Pero, como equipo, tenemos que asumir la responsabilidad de una llamada que arruinó su carrera a fin de cuentas. Tenemos que mejorar en esas situaciones. Eso no le ayuda, sin duda. No creo que haya ninguna característica en particular que le diferencie de Fernando".
"En general, entre los pilotos hay cierta diferencia que diría que no es normal, sino circunstancial. A veces tienes un poco de tráfico, a veces tienes algún problema en una curva. Pero generalmente creo que ambos están en torno a tres décimas [de diferencia]".
La diferencia circunstancial son 121 puntos en 13 carreras, a 9 puntos por fin de semana. Y eso, en una F1 donde las diferencias entre el segundo coche y el quinto se miden en décimas, es lo que te hace ser subcampeón en constructores o pelear por no caer del top 3.