Fernando Alonso revive su peor pesadilla y coquetea con cifras de su época más oscura
Sus puntos de este año con Aston Martin se acercan a los de sus años en McLaren-Honda.
"El motor va bien, mucho más lento que antes". "Aunque pusiéramos un cohete, seríamos undécimos". "Esto es un motor de segunda". "No quiero ahorrar combustible, ya tengo muchos problemas". "Piloto esto y... parecemos amateurs". Las radios de Fernando Alonso en su época de McLaren-Honda pasaron a la historia de la Fórmula 1.
Aunque cada poco se recuerden de forma cómica y se utilicen como memes, la realidad es que el asturiano vivió en aquellos años antes de retirarse su etapa más oscura. Terminó tan cansado en 2018, que decidió dar un paso al costado para tomarse un descanso de dos años. Aquellos mensajes en medio de las carreras mostraban su hartazgo semana sí semana también.
"No más radio durante el resto de la carrera", llegó a confesar mientras pilotaba aquel coche que le dejaba tirado cada dos por tres. Hasta en diez ocasiones en 2017. Cuesta comprender que aquella etapa tan aciaga pueda parecerse mínimamente a una que empezó tan bien como su actual periplo en Aston Martin. Pero las cifras hablan.
#McLarenDrivers2015 confirmed: Fernando Alonso & Jenson Button, the new era of McLaren-Honda: http://t.co/SKxQ2qOcgx pic.twitter.com/dKUp9hfPvu
— McLaren (@McLarenF1) December 11, 2014
Sus 62 puntos vestido de verde en 2024 distan poco de los 53 que llevaba en McLaren-Honda en las mismas citas en 2016. Las sensaciones, eso sí, son muy diferentes. Aquel monoplaza gris se rompía cada poco, mientras que el Aston Martin empezó siendo un cohete, el segundo coche de la parrilla cuando lo estrenó el año pasado, y su rendimiento solo ha ido hacia abajo. Desplome total. Sus rivales lo han adelantado por la derecha.
Alonso ha exprimido este año el coche. En muchas ocasiones, lo ha situado en una posición irreal muy por encima de sus prestaciones. No obstante, los puntos de este año siguen cerca de los de otras temporadas en aquel oscuro viaje junto a Jenson Button. Once tristes puntos cosechó el bicampeón en 2015, 17 en 2017 y 50 en 2018, según datos facilitados por F1BigData a Relevo. En esta última, por cierto, no terminó ocho carreras.
Dos épocas muy diferentes
La caída de Aston Martin ha sido tan grande que este año han llegado a ser el segundo equipo más lento de la parrilla en ritmo de carrera. Arrancaron el curso como el cuarto y, desde entonces, cada pieza nueva les ha quitado rendimiento. La posición habitual de Lance Stroll ha sido el termómetro de dónde estaba el coche: campando por las últimas posiciones.
En ambas épocas, poco comparables excepto a través de los fríos puntos, dista mucho la forma en la que el asturiano llegó a los equipos. A Aston Martin llegó con perfil bajo y sin hacer mucho ruido, mientras que a McLaren-Honda lo hizo con grandes esperanzas de encontrarse un coche que peleara por todo. El chasco fue tremendo por aquel entonces.
Este año, la decepción también ha sido gigante aunque su tono por radio dista mucho del de aquellos años. No se altera ni alza la voz. No ha habido una mala palabra ni una protesta cuando antes estaba a la orden del día. Serán los años.