Una carrera contra unos ladrones por 300.000 euros: la defensa de Carlos Sainz no acabó en el podio de Monza

El domingo de Carlos Sainz en el GP de Italia fue de todo menos tranquilo. El piloto español, que salía desde la pole position, completó una carrera a la defensiva. Primero con Max Verstappen, durante las primeras 14 vueltas; luego con Sergio Pérez y, finalmente, en los últimos cinco giros, con su compañero, Charles Leclerc. Aun así, el madrileño tiró de pundonor y manos para hacerse con su 16º podio en la Fórmula 1, el primero vestido de rojo Ferrari en la carrera de casa de la Scuderia. Pero su domingo no acabó ahí.

Alrededor de las 20.30h de la tarde, cuando volvía a su hotel (Hotel Armani), en el centro de Milán, a 800 metros del histórico Duomo, tres asaltantes se quisieron hacer un selfie con él y aprovecharon la oportunidad para quitarle de la muñeca izquierda un reloj. No uno cualquiera. Se trata de un Richard Mille edición Alexander Zverev, con un diseño casi plano que el español suele llevar en cada evento público y durante los fines de semana de carrera.

Sainz no lo dudó y se subió al coche de su mánager para salir detrás del individuo que le había arrebatado el reloj por la via Montenapoleone. Ya a pie, logró interceptarlo 850 metros más adelante, con la ayuda de varios transeúntes que pasaban por la céntrica calle via Pietro Verri, frente a una tienda de una marca de ropa de lujo. Los otros dos fueron bloqueados por su manager y su preparador físico algo más adelante, en calles diferentes, según adelantó la agencia italiana Agi y confirmó Relevo.

La policía italiana acudió al lugar de los hechos, detuvo a los asaltantes, que tenían edades entre los 18 y los 20 años, y los trasladó a comisaría. Afortunadamente, Sainz y sus acompañantes salieron ilesos de la situación y todo se quedó en una desagradable anécdota después de un domingo de celebración, según ha podido saber Relevo.

"Como muchos sabéis, ayer vivimos un desafortunado incidente en Milán. Lo más importante es que estamos todos bien y que esto queda solo como una anécdota desagradable. Gracias a todas las personas que nos ayudaron, a la policía de Milán por su rápida intervención y a todos por vuestros mensajes", comunicó el piloto este lunes en sus redes sociales.

El reloj es una edición especial de 38 mm dedicada al tenista alemán Zverev, solo pesa 32 gramos y cuenta con una carcasa de carbono. Su precio ronda los 300.000 euros.

No es la primera vez que uno de los pilotos titulares de Ferrari sufre un intento de robo. Ya le ocurrió a Charles Leclerc en abril de 2022, cuando cuatro individuos le asaltaron en Viareggio con la misma escusa de hacerse un retrato con el móvil y le robaron un reloj de similares características, decorado con la bandera de Mónaco, que nunca llegó a aparecer.