Emanuel Navarrete: "Valdez se ha ganado el combate de revancha"
El mexicano, campeón mundial WBO del superpluma, se enfrenta a Óscar Valdez este sábado. El Vaquero defiende su corona tras tropezar en su intento de ser campeón en el ligero.
A pocos días de tener que cumplir con la báscula, Emanuel Navarrete (38-2-1, 32 KO) charla con Relevo sobre su combate de revancha ante Óscar Valdez (32-2, 24 KO). "Ya se hace duro, pero estoy bien y cerca del límite", reconoce el púgil. El Vaquero, de 29 años, expone este sábado, en Phoenix (Arizona, Estados Unidos) el Mundial WBO del superpluma. Ha sido campeón en tres divisiones y viene de perder, en mayo, en su primer intento en el peso ligero.
"No suelo darle muchas vueltas a las cosas. No soy de ese tipo de personas. Prefiero mirar al frente. Es muy pronto para ver si volveré a intentarlo, no hay que tomarlo a la ligera. Me gusta aceptar todas las oportunidades y esta vez lo hice sin pensar y hubo cosas que no estuvieron bien. Por tanto, ahora estoy centrado en la pelea ante Valdez y después ya habrá tiempo de pensar qué viene", afirma.
El Vaquero muestra un gran respeto hacia Valdez, a quien ya ganó en agosto de 2023 de manera holgada. "Es un luchador que se ha ganado el combate de revancha. Él ganó a Liam Wilson y lo hizo de mejor manera que yo. No es alguien a quien yo le haya dado la oportunidad. Él es un gran púgil, se lo ha ganado y no puedo rehuirle. Además, ahora él ya sabe qué le puedo ofrecer en el combate. No puedo confiarme", apunta el azteca.
Navarrete vivió ante Valdez uno de los días más grandes de su carrera, pero desde entonces suma un nulo y una derrota. No es un buen momento, pero afirma que "llega en un gran momento". Pese a ello, es consciente de que este sábado tendrá que ponerse el mono de trabajo. "Va a ser una guerra, estoy seguro. Seguro que haber boxeado 12 asaltos cambia las cosas, pero no tengo dudas de la intensidad", añade.
El Vaquero es un púgil sincero que siempre va al frente. En la vida tiene el mismo estilo. El próximo enero cumple 30 años. Es joven, pero la de Arizona será su pelea número 42 como profesional (debutó en 2012 tras más de un centenar de peleas amateur), sabe que el tiempo pasa, pero no lo ve como un problema. "Está claro que hay que tener mayor cuidado porque ya no me recupero de las cosas como cuando tenía 23 años, pero con cuidados todo se puede ir superando", concluye. Queda Navarrete para rato y para que su futuro tenga grandes encuentros la victoria este sábado es clave. Debe cerrar su mala racha en un combate de entidad.