Los Bucks se meten en la final de la Copa NBA al ritmo de Giannis Antetokounmpo

Milwaukee Bucks jugará la final de la Copa NBA. El equipo de Giannis Antetokounmpo superó a los Atlanta Hawks en la primera semifinal disputada en Las Vegas por 110-102 con el griego siendo la estrella. Y el martes, a falta de saber el rival, los Bucks buscarán el primer título de la franquicia desde el anillo de 2021; y el primero para Doc Rivers desde 2008.

La gente tardó en llegar al pabellón, poco animados y con la iluminación haciendo un mal trabajo, pero el T-Mobile Arena presentaba un lleno hasta la bandera, con más de 17,000 espectadores. La primera semifinal de la Copa NBA bien valía la pena con la oportunidad de ver a uno de los mejores jugadores del planeta en Giannis Antetokounmpo. El griego fue el mejor para los Bucks, pese a fallar 6 tiros libres, con 32 puntos, 14 rebotes, 9 asistencias, a una del triple-doble, y añadiendo 4 tapones. A su lado, Damian Lillard metió 25 y pese a una noche promedio en el tiro (14/45 en el triple), los Bucks se llevan el triunfo. Desde el 11 de noviembre Milwaukee tiene el mejor récord de la NBA y están a 48 minutos de alzar la Copa. 

Dominaron el primer tiempo, tras un inicio igualado, con un parcial de 14-7 para cerrar el segundo cuarto (del 41-39 al 55-46). Intentaron romper el partido de la mano de Lillard y los triples de AJ Green, pero Atlanta no se iba a rendir. Tenían la oportunidad, como Indiana el curso pasado, de dar la sorpresa. Hace justo un año los Bucks caían en la semifinal de Las Vegas a manos de Tyrese Haliburton, y los Hawks querían repetir. 

Apareció tras el descanso Trae Young para darle la vuelta al partido. El base metió 14 puntos en el tercer periodo fallando solo un tiro, tras un precioso gesto técnico además, y sumó tres asistencias para poner a los Hawks por delante tras tres. Intentaba responder Damian Lillard con once de su bolsillo, pero el ataque de Atlanta se volvía orgánico alrededor de su estrella. Del +6 de Milwaukee a los Hawks tener una ventaja de un punto. Y el primer finalista en Las Vegas se decidiría en el último cuarto para alegría de los aficionados y de la propia NBA. El año pasado los tres partidos se decidieron por más de nueve puntos, con los Lakers ganando por 44 su semifinal. Este año el guion es otro. 

Y los guionistas no se olvidaron de que al final el protagonista siempre gana. Giannis era, en este caso, la cara del partido. Y se lo llevó él con un final de partido digno de los jugadores elegidos. En un lado de la pista dominando por tamaño, físico y con un tiro imitando a Dirk Nowitzki para poner a los Bucks siete arriba. Y en defensa, un tapón sideral al alley-oop entre Trae Young y Clint Capela que defenestraba cualquier opción de remontada. Por mucho que Khris Middleton perdiera tres balones casi consecutivos para darles vida extra a los Hawks, Milwaukee no iba a dejar escapar el partido. El broche, como ante Orlando, una canasta de Lillard. 

No sirvieron los 35 puntos de Trae Young, con 10 asistencias y 7 rebotes, o el trabajo de Jalen Johnson, con 15 tantos y 10 rebotes, además de 4 pases de canasta. La defensa de Clint Capela, con 4 tapones, o el trabajo de Dyson Daniels con Lillard. Incluso el banquillo, mejor que el de los Bucks, con De'Andre Hunter (15 puntos), Bogdan Bogdanovic (10) y Onyeka Okongwu (8) combinándose para 33 puntos y siete triples. Insuficiente ante Giannis Antetokounmpo, el protagonista de esta historia. Encontrar a alguien que piedra frenar al griego será un reto, pero tanto Oklahoma como Houston tienen candidatos, eso sí. 

Y los Bucks jugarán por ganar la segunda edición de la Copa NBA. El equipo cuenta con dos amuletos en sus filas. El primero, Taurean Prince, el mejor triplista de esta temporada; el segundo, Darvin Ham, asistente de Doc Rivers. Ambos se llevaron la primera edición con los Lakers el pasado año tras ganar los siete partidos y suman seis este año, a la espera de conseguir su propio doblete personal. El martes se decide la historia.