Los Bucks dejan la crisis en el pasado con un Antetokounmpo MVP y frenando los 50 de LaMelo Ball

Si alguna vez hubo una crisis en Milwaukee, ese tiempo es pasado. El equipo que arrancó el año con un balance de 2-8 y llegó a estar 4-9 apenas hace una semana, está ya quinto en el Este. A solo un triunfo de tener un 50% de victorias, a partido y medio del factor pista y por delante de Miami, Indiana o los problemáticos Sixers, con el segundo peor récord de la NBA. Porque con Giannis Antetokounmpo, todo es más fácil. Y con el griego a este nivel, ganar era una cuestión de tiempo.

Ante los Hornets, un partido que se recordará por los 50 puntos de LaMelo Ball, Giannis acabó con 32 tantos y 11 rebotes, 6 asistencias y 2 tapones, y lo hace a un nivel sideral. En la lista, por debajo de Nikola Jokic, en los favoritos al MVP su nombre no puede estar muy abajo. Y su mayor virtud, números y dominio al margen, es la capacidad de haber resucitado a un equipo que hace una semana daba sensación de muerto. Gary Trent ha vuelto a ser un tirador fiable, Taurean Prince es capaz de hacer de todo, Brook Lopez vuelve a ser el epicentro de un sistema defensivo que todavía está arrancando. Y tiene a Damian Lillard a su lado, con 31 puntos y para muchos, el mejor segundo espada de toda la NBA. Los números lo respaldan.

Aunque el gran cambio, y aquí el mérito recae sobre Doc Rivers, es el uso de los jóvenes, o de algunos al menos. Ryan Rollins fue titular en ausencia de Lillard y sobre todo la implementación de Andre Jackson Jr. y AJ Green en la rotación. El tirador se ha convertido en un seguro de vida para Milwaukee, y 79 de sus 85 tiros a canasta han sido triples con un 48% de acierto. Jackson es el que aporta la defensa, que sigue siendo el principal debe de Lillard. Una versión mejorada de Pat Beverley, con mucha más energía. Que les ha permitido ganar seis de los últimos siete, y con la única derrota llegando en un gravísimo error arbitral, casualmente ante los Hornets. En esos siete son la séptima mejor defensa, noveno ataque y quinto diferencial

Para Charlotte, LaMelo metió 50 aunque se buscó 38 tiros de campo, con un interesante 6/17 en el triple, además de 10 asistencias. Es la cuadragésima vez en la historia de la NBA que un jugador firma 50+10, y la suya es la cuarta de peor porcentaje de tiro. Por eso, en parte, fue a las manos de Brandon Miller el tiro para ponerse a solo dos puntos el último minuto. Autor de 32 puntos, con 11 rebotes, el jugador de segundo año sigue a un nivel de forma altísimo, tras los Bucks abrir una ventaja de 20 puntos (110-90) en el último cuarto. Los tiros libres de Prince y Giannis, y los triples fallados por LaMelo y Miller eran la gota definitiva para sellar el triunfo de los Bucks.