NCAA

Great Osobor, el tudelano que domina desde Washington en la NCAA y ya es el rey del rebote

El ala-pívot, que tiene el contrato lucrativo más alto de la liga universitaria, ha firmado su mejor partido al otro lado del charco.

Great Osobor, en un partido con los Huskies./AFP
Great Osobor, en un partido con los Huskies. AFP
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Cuando uno piensa en los españoles de la NCAA, los primeros nombres que se vienen a la cabeza seguramente sean el de Aday Mara, Baba Miller o Conrad Martínez. Sin embargo, la realidad es que hay otro que sobresale respecto al resto. El rey del rebote universitario (lidera el ranking esta temporada con 13), quien esta temporada se ha convertido en el mejor pagado de la competición (dos millones de dólares) y que la pasada madrugada ha firmado su mejor partido en la liga universitaria con Washington con un doble-doble… Aunque siga queriendo aspirar todavía a más. Se trata de Great Osobor (Tudela, 2002), un ala-pívot que se erige como la gran estrella de los Huskies de la capital estadounidense y del que, eso sí, su entrenador espera "todavía más".

La realidad es que el nombre de Great Osobor comenzó a sonar con fuerza, sobre todo la pasada temporada, cuando logró ganar el premio a jugador del año en la Mountain West con Utah State. Tras su gran año, este navarro de 2,03 metros con doble nacionalidad (española e inglesa) cambió de universidad el pasado verano para enrolarse en los Huskies de la Universidad de Washington. Y ahí su popularidad se disparó tras firmar el que se ha convertido en el contrato más lucrativo de la historia de la NCAA. Dos millones de dólares, la cifra pública más alta entre los jugadores universitarios, gracias a los acuerdos NIL (nombre, imagen y likeness -semejanza-). Y lo cierto es que no tardó en justificarlo.

En el primer partido de la temporada, Osobor logró 15 puntos, 17 rebotes, 6 robos, 3 asistencias y 2 tampones en los 38 minutos que estuvo en pista. Números que le hicieron convertirse en el primer jugador de dicha Universidad en firmar al menos 10 puntos, 10 rebotes y 4 robos en tres lustros. Pero es que, además, ese 15-17-6 era algo que no se veía en la División I de la NCAA desde el año 2008, cuando lo logró Blake Griffin, tal y como publicó el tuitero experto en la competición universitaria Bryan García. Si bien, tres partidos después -en el cuarto de la presente temporada- ha logrado hacer su mejor marca en el baloncesto universitario.

La pasada madrugada, en el duelo ante los UMass, en la que los Huskies se llevaron el triunfo 74-69, el tudelano firmó otro doble-doble con 23 puntos, 18 rebotes, 3 robos, 2 asistencias y un tapón. Una marca descomunal que, por contra, no es suficiente ni para él ni para su entrenador. ¿El motivo? Que puede llegar a hacer mucho más.

"Él sabe que puede estar mejor en defensa. Todavía no está en forma, tiene que mejorar ese aspecto", arrancó diciendo su head coach, Danny Sprinkle. Y es que para el técnico, en vez de los números que firmó "podía haber hecho 35 puntos y 25 rebotes". "Si quiere ser nuestra referencia tiene que ser nuestra referencia. Le estamos metiendo muchísimos balones y, si hubiese metido las bandejas, hubiese acabado en 35 puntos, así como los tiros libres", explicó el técnico. Y la realidad es que si uno mira sus estadísticas comprueba que hizo un 8 de 21 en tiros de campo, 0 de 1 en triples y 7 de 12 en tiros libres en los 35 minutos que estuvo sobre el parqué.

"No tengo quejas sobre su esfuerzo, ha estado muy bien, pero sí que al final le han quitado un par de rebotes que les han dado segundas oportunidades o algunos palmeos. Eso no puede pasar si eres el líder y le necesitamos mejor en los últimos 5 minutos de los partidos. Sé que me estoy quejando y sus números son buenos, pero él es mucho mejor de lo que ha jugador en los cuatro partidos, puede dar mucho más. Nunca lo vi fallar tantos tiros cerca del aro. No sé si es por su concentración o qué, pero tiene que hacerlo bien y él lo sabe", mantuvo Sprinkle. Y lo cierto es que el propio ala-pívot está convencido de que su técnico lleva razón.

De momento, Osobor está totalmente centrado con mejorar al otro lado del charco. Pero la realidad es que sus actuaciones están logrando que su nombre se encuentre en el radar de la Selección… española, porque aunque tenga doble nacionalidad sí que ha confesado públicamente que le gustaría defender la elástica de España. Aunque, eso sí, de momento tendrá que esperar para ello y cumplir así lo que él mismo consideró como uno de sus sueños. "Sería un sueño jugar con la selección española. Estoy en una posición en la que me gustaría jugar con España. Mi jugador favorito era Pau Gasol. Su juego era fácil pero muy eficiente, y es lo que yo estoy intentando hacer", dijo en una entrevista emitida en Radio Osasuna. Y la verdad es que el camino que lleva puede hacer que lo cumpla.