El Real Madrid agranda su leyenda con una Undécima a la heroica

El Real Madrid vuelve a reinar en Europa. Y lo hizo de la mano de dos héroes clásicos, como si de la antigua Grecia se tratara, como son Sergio Rodríguez y Sergio Llull. Los Sergios, que tantas tardes de gloria han dado al madridismo agrandaron su leyenda y fueron decisivos para que el Madrid diera la vuelta al marcador -una vez más- y se impusiera al Olympiacos por 78-79 para levantar la undécima al cielo de Kaunas. Una ciudad que entra directa al panteón madridista.

'El Chacho' (15 puntos y 9 asistencias) agitó la varita en los minutos finales y cuando todo el mundo veía ya la victoria en el bolsillo heleno, él puso templanza y sobre todo magia para mantener al equipo a flote con triples, pases y penetraciones que desquiciaron a los griegos. Pero faltaba algo más para que el Real Madrid de baloncesto redondeara la gesta.

Y eso llegó de la mano de Sergio Llull. Un jugador que no necesita reivindicarse, pero que por si las moscas lo hizo en el mejor escenario posible. Sin incidencia ofensiva en sus primeros minutos, Chus Mateo se la jugó con el balear en los instantes finales a pesar de tener a Musa en el banquillo. ¿Y qué pasó? Que el de Mahón volvió a ser El increíble y anotó su única canasta del partido a falta de cuatro segundos para dar la victoria a los suyos.

El tanque de talento del Chacho no se vacía nunca. El mago de Tenerife volvió a demostrar que la leyenda que le acompañaba como un jugador sin sangre en los momentos decisivos es eso, un mito que no se ajusta a la realidad. El base ha llegado al tramo decisivo de la temporada con un objetivo claro: ganar, ganar y volver a ganar que diría Luis Aragonés. Y con él en cancha es más fácil para el Madrid. Lo dijo Mateo en la previa, que cuando el insular está en plan torero es imparable y ante el Olympiacos lo volvió a demostrar. Sobre todo en el segundo cuarto, tirando de sangre fría y oficio para mantener al Madrid con la ventana del partido abierta. No renovarle sería un error que este equipo no se puede permitir. Sobre todo si el insular está a este nivel.

Se menciona a Tavares como candidato a MVP. El nombre del Chacho también está en la ecuación, pero Mario Hezonja también debería ser candidato al premio final. Su Final Four ha sido una de las claves de este Real Madrid. En el primer partido su defensa sobre Mirotic marcó el camino de la victoria madridista. Y en la final ante Olympiacos fue el encargado de mantener al equipo en el partido cuando los griegos estaban 12 arriba. Lo hizo con 10 puntos en un segundo cuarto en el que el Madrid se desató con seis triples en 10 minutos. Super Mario sacó sus poderes a tiempo.

Sasha Vezenkov demostró que el MVP de la temporada está más que justificado. El búlgaro es una máquina de anotar y ante el Madrid volvió a ser el mejor de su equipo con 20 puntos de todas las facturas. La defensa del Madrid no supo cómo frenar al ex del Barça que asumió el protagonismo ofensivo con tiros difíciles en muchos casos. De esos que decantan la balanza en un partido como este. No me extraña que la NBA no le quite el ojo de encima, aunque siendo rey en Europa no parece que vaya a hacer las maletas.

La defensa del Madrid fue el clavo al que se agarró el equipo en la semifinal ante el Barcelona. Sin embargo ante Olympiacos el equipo blanco pecó por momentos de no saber cómo frenar a los tiradores griegos. Especialmente cuando el equipo se colocaba en una zona a la que le faltaba movimiento para llegar a las esquinas, dejando muchas veces a los lanzadores rivales tirar sin oposición. Y claro, ni Canaan ni Mckissic ni Papanikolau son buenos objetivos para dejarles tirar solos. Por ahí se pudo escapar la victoria del equipo blanco.

No fue excusa ni para el Real Madrid ni para Olympiacos, pero durante muchos momentos sus decisiones sacaron de sus casillas a los jugadores, a los que les costó entender el criterio a la hora de señalar según qué faltas. Los nervios le jugaron malas pasadas a la hora de pedir esas explicaciones a Chus Mateo y a Causeur que vieron sendas técnicas que pudieron costarle todavía más caras al Real Madrid. La presión del público griego tampoco ayudó para tranquilizar los ánimos y que los colegiados tuvieran la mente fría a la hora de señalar ciertas acciones.

El Madrid ha contado con sus tres veteranos para sacar las castañas del fuego en los peores momentos de la temporada. Tres jugadores con experiencia sobrada para no arrugarse bajo ninguna circunstancia. Pero si los blancos cuentan con Rudy-Chacho-Llull, el Olympiacos contó con el buen partido de otros dos hombres que se las han visto ya de todos los colores en esto del baloncesto. El primero es Sloukas, metrónomo del equipo, que dio pausa a los suyos cuando se perdían en protestas y caían en los nervios provocados por su propio público. El segundo es Papanikolau, un todoterreno que fue clave en el buen comienzo de partido de los griegos con dos triples y con una defensa de manual.