EUROLIGA | AS MÓNACO 84 - BARÇA 98

La erupción que puede marcar un antes y un después para Darío Brizuela en el Barça

El base-escolta lideró la victoria en Mónaco, firmando su mejor partido en la Euroliga, cuando más necesitado estaba el equipo culé.

Darío Brizuela, durante el partido en Mónaco. /GETTY IMAGES
Darío Brizuela, durante el partido en Mónaco. GETTY IMAGES
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Que Darío Brizuela podía hacer un partido como el de Mónaco era cuestión de tiempo. El de Donosti es de esos jugadores que si entran en erupción son capaces de liderar a su equipo y ver el aro tres veces más grande de lo que realmente es. Así lo ha demostrado en la Salle Gaston Medecin, en el momento más crucial para un Barça que, pese a la victoria (84-98) en Euroliga, sigue en una situación crítica en la Liga Endesa con la Copa pendiendo de un hilo. Y lo cierto es que esto es un respiro para un Joan Peñarroya que está en la cuerda floja y que ahora se aferra a aquellos en los que más confía, entre los que se ha colado, sin ningún tipo de duda, el base-escolta, después de firmar su mejor partido en Euroliga.

Desde el segundo cuarto, Brizuela dio ese paso al frente que tanto necesitaba el equipo culé. El donostiarra no tardó en obligar a Vassilis Spanoulis a pedir su primer tiempo muerto, después de firmar ese 3/3 en triples con el que el Barça puso el +13. Y a partir de ahí, no se vino abajo en ningún momento. Ni siquiera durante los dos minutos de apagón que tuvo el equipo culé justo antes del descanso que permitieron al AS Mónaco acercarse en el marcador.

El exterior cerró el partido como MVP con 27 puntos (4/6 en tiros de dos y 6/8 en triples, siendo el tiro libre 1/3 su peor porcentaje), dos rebotes, dos asistencias y un 25 de valoración. Números que hacen de esta su mejor actuación en la competición continental y que llegaron por algo tan sencillo como haber sabido desde el principio lo que tenía que hacer.

"Veníamos con rabia del último partido, necesitados de ganar también, porque no estamos bien en la tabla tampoco. Desde el principio teníamos claro lo que teníamos que hacer y lo hemos ejecutado bien. Hemos metido un montón de tiros que nos han ayudado y dado confianza y ahí ha estado la clave", explicaba tras el duelo en declaraciones a los medios del Barça.

Y es que aunque hasta ahora pareciese que su rol era de jugador de rotación, el haber estado "preparado" para asumir el papel que le pedía su técnico ha hecho que se reivindique por completo en un puesto que, precisamente, está muy disputado y principalmente ocupado por la estrella del equipo: Kevin Punter. Aunque para el donostiarra no hay rivalidad como tal entre él y su compañero.

"Yo siempre estoy preparado para lo que me pida Joan. Hoy me ha pedido compartir el puesto de base con Kevin (Punter) un rato y sí que es verdad que nos sentimos muy cómodos jugando los dos juntos porque somos dos amenazas. Hoy entraban los tiros, he intentado ser más agresivo de lo normal y ha salido bien, pero hemos jugado todos muy bien y me ha permitido jugar uno contra uno con los rivales. Lo admiro mucho, aunque podamos ser rivales en la posición de escolta, intento aprender mucho de él porque es de los mejores escoltas de Europa. Se ha alegrado por mí porque me respeta y sabe que trabajo mucho. Muy feliz porque me quiera tanto.", explicó.

Ahora, el base-escolta, que se ha reivindicado por completo sobre el parqué, debe mantener el tono ante la necesidad que tiene el Barça en estas posiciones y la obligación de ganar este fin de semana en Gran Canaria. Los culés no tienen margen de error en la Liga Endesa si quieren estar en la Copa... y su entrenador tampoco, porque su continuidad depende justo de ello. Y si la Mamba Vasca logra extender su buen hacer en las próximas jornadas, puede pasar de ser un jugador de segunda o tercera unidad (es el décimo en minutos o, lo que es lo mismo, el cuarto menos usado -quitando a Raul Neto, que ya no está, y el canterano Dame Sarr- por Peñarroya), a tener un papel más relevante en el esquema culé.

"Es un partido fundamental, no tenemos más margen de error. Lo hemos hablado nada más entrar en el vestuario entre nosotros y luego ha entrado Joan y ha dicho lo mismo, que hay que crecer desde el partido de hoy. Sabemos lo que hay que hacer para ganar y hoy lo hemos hecho todo perfecto y tiene que ser un continuo. No puede ser que fallemos en los básicos. Hay que seguir en esta línea", dijo.