La intrahistoria de la victoria de Marta García en la San Silvestre Vallecana: de un contenedor en Sudáfrica a un baile a ritmo de Emilia
La castellanoleonesa consigue la primera victoria femenina española en 16 años y logra la mejor marca histórica de una atleta nacional en la meta del Estadio de Vallecas.
Suena 'Alegría', la canción de Emilia Mernes, Anitta y Tiago PZK, y Marta García (León, 1998) baila en la habitación de su hotel a falta de cuatro horas para el pistoletazo de salida de la San Silvestre Vallecana en el gran arco preparado en la Calle Concha Espina. "¡Temazo!", dice mientras empieza a tararear los primeros sones que salen del ordenador a la vez que prepara sus ya tradicionales trenzas de la suerte en su pelo. A unas horas de cumplir sus 27 años el día 1 de enero, este es su último día de competición de un año en el que se ha convertido en una de las grandes sensaciones del atletismo español con la medalla de bronce en el Europeo de Roma.
"El mejor año deportivo de mi vida, pero creo que también mi mejor año personal; y tocaba terminarlo de una manera especial y, la verdad, solo tengo ganas de disfrutarlo", expresa sin saber lo que le iba a venir un rato después al colocarse en la línea de salida al lado de toda una flamante plusmarquista mundial de maratón, Ruth Chepngetich, quién rompió todos los registros convirtiéndose en la primera mujer en bajar de 2:10. En el álbum de su 2024, hasta cuatro récords de España [2000, 3000 y 5000 en pista corta más el de 5000 al aire libre].
En los pies, Marta se coloca las LightSpray sin cordones de On Running, la marca que la fichó hace dos años y medio para ser una de sus joyas de futuro y que no tardó en llevársela a entrenar a su sede de Saint Moritz (Suiza) junto a, entre otros, Moha Attaoui. "Es difícil ponérselas, pero luego hacen ¡cloc! ...y el pie al vacío", cuenta sobre sus 'armas' en uno de sus populares vídeos en su cuenta oficial de Instagram.
A los alrededores del Bernabéu llega con otra San Silvestre conquistada bajo el brazo, la de su León natal que ganó el pasado día 29, y tras una concentración preparando los grandes objetivos de 2025 en Dullstrom (Sudáfrica) entre finales de noviembre y principios de diciembre. Allí, entre puestas de sol de ensueño y largas rectas ideales para entrenar la técnica, ha empezado a poner la maquinaria a punto bajo las directrices del científico deportivo Thomas Dreissigacker. Y, además, contando con un 'lujo' que confirma que forma parte de uno de los proyectos más potentes a nivel mundial. El OAC, el On Running Athletics Club, ha llevado hasta el sur de África un gran contenedor serigrafiado, similar a las instalaciones portátiles de los grandes equipos ciclistas, para hacer las funciones de un gimnasio con todas las comodidades. En las paredes hay fotos de todos los miembros del equipo y la de Marta, claro, está encima del megáfono como la DJ oficial del grupo.
Parece que la primera parte de la pretemporada ha funcionado y, si no, que se lo digan a la mediática Chepngetich que muchos creía que podía asaltar el récord absoluto de la 'Sansil' en su 60 aniversario y vio cómo un torbellino la alcanzaba a la altura de la estación de Atocha, en el ecuador del recorrido, y la machacaba con un ataque de los que solo tienen las milleras de excepción. Lo había avisado justo antes de salir: "Estoy nerviosa, pero vamos a intentar correr rápido, eso sí". Y lo hizo, y volando entró en Vallecas ante las caras de asombro de la gente que no se creía que estaba viendo a una española como primera mujer de la prueba internacional.
"Empezaban a picar las piernas y he atravesado un pequeño momento de crisis"
Y eso que confesó, nada más cruzar victoriosa la meta, que había sufrido en el suplicio que se convierte para los atletas la empinada cuesta de Avenida de la Albufera. "Era dura, empezaban a picar las piernas y, aunque iba la primera, he atravesado un pequeño momento de crisis", decía en los micrófonos de Telemadrid. Pero, quizás, volvieron a la cabeza las palabras que su novio le responde cuando dice que está cansada y que desveló a Relevo en la zona mixta del Stadio Olimpico tras subir al podio continental de los 5.000 metros: "Siempre me dice que todas sufren igual que yo". Aquel 7 de junio también contó que "iba muerta, pero le echó cojones".
Tras sus 31:19 y un triunfo de prestigio que entra la historia, Marta García se enamoró de la carrera, y todo el ambiente que la envuelve, tanto que promete guardarse la Nochevieja, la noche previa de su cumpleaños, para volver a estar en Madrid en 2025.