Ocho meses de inhabilitación para Agustín Martín, presidente de la Federación Española de Voleibol

El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) inhabilita durante ocho meses al presidente del voleibol español, Agustín Martín Santos, por cuatro infracciones "muy graves" relacionadas con los acuerdos alcanzadas en cuatro de las asambleas generales celebradas bajo su mandado entre 2021 y 2024.

Tan sólo cinco días después de las tropelías publicadas por Relevo sobre el presidente del voleibol español, Agustín Martín, el Consejo Superior de Deportes (CSD) con José Manuel Rodríguez Uribes a la cabeza, movió ficha. Elevó al TAD una petición razonada con hasta 19 presuntas infracciones mediante la que solicitaba la apertura del expediente sancionador por el "incumplimiento de los acuerdos de la Asamblea General, así como de los reglamentos electorales y demás disposiciones estatutarias o reglamentarias". Lo hizo tras recibir un escrito presentado por los presidentes de federaciones territoriales que adjuntó a la petición como prueba definitiva.

La inhabilitación de ocho meses llega por cuatro infracciones muy graves con una pauta común: "la falta de sometimiento a debate y votación de los acuerdos descritos" en cuatro de las asambleas generales celebradas por la RFEVB (Real Federación Española de Voleibol), con Agustín Martín como presidente. Concretamente la del 23 de mayo y 19 de diciembre de 2021, la del 18 de diciembre de 2022 y un año después, el 17 de diciembre de 2023.

La resolución del TAD, definitiva y ante la que no cabe la posibilidad de recurso salvo por la vía contencioso-administrativa -es decir, la justicia ordinaria- impide a Agustín Martín cargo alguno en cualquier federación deportiva. Tampoco podrá presentarse de nuevo como candidato a la RFEVB -salvo que recurra y solicite la "cautelarísima o la cautelar" al Juzgado Central de lo Contencionso-Administrativo de Madrid-, cuyos comicios para elegir a los miembros de la Asamblea se celebran el próximo 24 de septiembre y las elecciones a presidente dos meses después, el 24 de noviembre.

Tras 24 años de mandato, el salmantino ha sido protagonista de numerosos escándalos que han manchado al voleibol español, tal y como informó Relevo el pasado mes de mayo. En su más que cuestionable currículum figura el trato a favor hacia la Federación de Castilla y León, donde cobraba un segundo sueldo; el reparto de forma arbitraria de subvenciones tras frecuentes cambios de criterio; el intento de manipulación del censo de cara a las elecciones de este año; o la "creación" de un equipo fantasma, el CD Apostolado.

A pesar de que en esta ocasión el CSD reaccionó con bastante celeridad, la resolución final del TAD, al igual que la propuesta que realizó en la apertura del expediente sancionador del pasado 16 de julio, es bastante generosa para tratarse de cuatro sanciones "muy graves" repetidas en el tiempo "por la falta de debate y votación" en las asambleas de la RFEVB. Más si se compara con la sanción del Pedro Rocha, presidente de la RFEF, por el despido del entonces secretario general, Andreu Camps, por el que el TAD le impuso dos años de inhabilitación.

Ante esta inhabilitación, la RFEVB ha emitido un comunicado en el que informan de que Agustín Martín Santos considera "injusta" la resolución y ha recurrido ante el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo. "Espero que todo se solucione y que la justicia ordinaria ponga las cosas en su sitio, corrigiendo esta injusta decisión del TAD" ha expresado Agustín Martín.