WIMBLEDON

El teléfono móvil de Alcaraz es el quebradero de cabeza de Ferrero antes de la final ante Djokovic

El técnico le ha aconsejado "desconexión" en las horas previas al partido.

Carlos Alcaraz y Juan Carlos Ferrero en Wimbledon./GETTY
Carlos Alcaraz y Juan Carlos Ferrero en Wimbledon. GETTY
José M. Amorós

José M. Amorós

Londres.- Es difícil no ver a un joven de 20 años sin estar pegado al móvil todo el día. Estar delante de las pantallas se ha convertido en un habitual en la nueva sociedad interconectada. Imagínense si es un chaval que desbloquea su pantalla y todas las redes sociales hablan de él. Esa es la realidad que está viviendo Carlos Alcaraz desde su salto a la élite y más en las horas previas a una final tan mediática como la de Wimbledon.

Ese es motivo suficiente para que se haya convertido en una de las grandes preocupaciones de Juan Carlos Ferrero y todo su equipo. "No sé si al final lo conseguiremos, porque es un poco batalla perdida", desvela el entrenador de Carlos Alcaraz en un encuentro con la prensa española, que cuenta cómo le recomendó que desconectara ya anoche después de la clasificación para la final: "Le aconsejé que estuviese más aislado del teléfono, de todo lo que se dice del partido y de todo lo que le llega".

Un paso adelante del técnico valenciano para intentar extinguir los nervios y la presión que puedan llegar desde fuera y que terminaron provocando calambres en la semifinal de Wimbledon contra el mismo rival: "Ha sido iniciativa nuestra". Aunque reconoce que el escenario, para cualquier tenista, ya provoca nervios de por sí y será una realidad a afrontar: "Hay que plantear el partido desde la posible tensión y nerviosismo... no se sale a una final de Wimbledon súper relajado y tranquilo".

"Estas cosas no acaban de ayudar"

Juan Carlos Ferrero Entrenador de Carlos Alcaraz

Las opiniones, datos, estadísticas y favoritismos, que son habituales en las redes sociales cada día, también llegan a 'Carlitos' y le pueden desviar la atención: "Que si este es muy bueno o que él es muy bueno, o todo este tipo de informaciones que se dan en el día previo a la final... o que si gana el primer juego no sé qué... que si gana el primer set no sé cuanto. Todas esas cosas, indirectamente, no acaban de ayudar". Por ello, Ferrero prefiere la desconexión.

Como ya hicieron en algunas horas de los días libres que ha disfrutado durante el torneo, la jornada previa a la final estará lo más alejada posible del tenis y una preparación concienzuda de la final. En un día de viento en Londres, Alcaraz ha preferido no entrenar: "¿El motivo? Desconexión y recuperar físicamente. Con rachas de 40km/h, salir ahí y tocar la bola medio regular... Lo hacemos para resetear y refrescar un poquito en torneos que al final se hacen muy largos". Algo que también reconocía Alcaraz tras el partido.

En definitiva, unas dinámicas que buscan "un aprendizaje de la semifinal de Roland Garros", como reconocen las personas cercanas al murciano. Que Wimbledon sea en hierba, donde Alcaraz lleva apenas 21 partidos disputados en toda su vida, puede ser otra ventaja, como reconoce Ferrero: "Aquí el favoritismo lo tiene más Djokovic y eso puede ayudar a Carlos a estar más tranquilo". La clave será no tener miedo y eso le transmite su técnico en un mensaje directo: "Djokovic es un jugador con dos brazos y dos piernas, igual que nosotros".