Coco Gauff, la reivindicativa heredera de las Williams moldeada por un español

Es la nueva estrella del tenis femenino. Y más aún tras levantar su primer Grand Slam. Coco Gauff ya venía avisando de su intención de recoger el testigo de Serena Williams, con la que siempre la han comparado, y ahora ya tiene el relevo en su mano. Y los números lo demuestran tras haberse clasificado para la final del US Open y convertirse en la jugadora más joven en lograrlo desde que la menor de las Williams lo hiciera en 2001 y posteriormente tumbar a Sabalenka.

Su precocidad le ha llevado a ser la tercera jugadora más joven en alcanzar dos finales de Grand Slam tras llegar también a la de Roland Garros en 2022. Sólo Martina Hingis y Maria Sharapova lo consiguieron por debajo de los 19 años, 5 meses y 21 días que hoy lucen en el carnet de la estadounidense. Una jugadora moldeada a la imagen y semejanza de las Williams y que ya ha comenzado a dar sus frutos.

Sin la severidad de Richard Williams, Corey Gauff, base de la Universidad de Georgia State, fue poco a poco diseñando el futuro de su hija. Primero probaron suerte en el baloncesto, el atletismo o la gimnasia. Pero fue el tenis lo que terminó por cautivar a una niños de apenas 8 años. El exjugador de los Panthers trazó un plan a 10 años vista para llegar a la élite. Y la hoja de ruta se ha cumplido paso por paso.

Gauff debutó como profesional con sólo 15 años y poco a poco fue quemando etapas. Sin embargo, la joven perla estadounidense no terminaba de explotar. La presión de quien llevaba el peso de las Williams sobre sus espaldas parecía poder con ella. Poco a poco la tenista de Georgia se fue quitando peso de la mochila. Empezó a no decir a todo que sí y a no exigirse tanto como para no disfrutar de su vida.

Para ello ha sido necesario el trabajo físico, pero sobre todo el mental para aprender a manejar la presión. Especialmente en los Grand Slam. "Son tan intensos que siempre quieres ganar y ahora he aprendido a lidiar con eso. Creo que esa es una parte importante de la vida y del aprendizaje y cuanto más estoy en esa posición, más aprendo cómo manejar la presión", aseguraba la estadounidense tras su victoria en cuartos ante Ostapenko.

"Me ha ayudado el poner mi vida en perspectiva. Pensaba en negativo. ¿Por qué tanta presión? ¿Por qué es tan difícil? Y entonces me di cuenta de que de una manera es presión, pero por otra no. Hay gente que lo pasa mal para alimentar a sus familias, gente que no sabe cuándo va a llegar su próxima comida. Eso es presión real. Eso es la vida y yo estoy en una posición privilegiada. Así que he decidido divertirme y disfrutar", afirmaba Gauff a la hora de explicar cómo ha conseguido superar la presión de los resultados.

Para asentar los pies en tierra firme, la flamante ganadora del US Open siempre recurre al recuerdo de su abuela Yvonne Lee, una pionera en la lucha por los derechos civiles que fue una de las primeras mujeres negras en matricularse en un colegio de blancos en Florida. Un ejemplo que Gauff tiene siempre muy presente y que la ha ayudado a construir una personalidad que no se esconde a la hora de posicionarse en la lucha por la igualdad. Lo hizo durante la pandemia, siendo una de las voces del movimiento Black Lives Matter. Y lo ha vuelto a hacer tras las semifinales del US Open al hablar de los incidentes que obligaron a detener su partido durante más de 45 minutos por una protesta en contra del cambio climático.

"Creo en el cambio climático. No sé exactamente por qué estaban protestando, pero 100% creo que podemos hacer las cosas mejor. ¿Preferiría que no hubiera sido durante mi partido? 100%. Pero es lo que es y momentos así definen la historia. No me he enfadado con los manifestantes y siempre he defendido que tienes que defender en lo que crees. Se hizo además de forma pacífica. Si es lo que sentían que tenían que hacer para que se escuchen sus voces, no me puedo enfadar", aseguraba tras las semifinales la tenista estadounidense, que trabaja ahora bajo las órdenes del español Pere Riba.

El preparador catalán lleva dos meses trabajando como nuevo entrenador de Gauff. El extenista -ganó siete títulos ATP Challenger y seis dobles- decidió colgar la raqueta para entrenar a jóvenes talentos y tras terminar su relación con la tenista china Qiwen Zheng, el pasado mes de junio se unió al equipo de trabajo de la estadounidense en una relación que no ha tardado en dar sus frutos.

"Le doy las gracias especialmente a Pere y Brad Gilbert, que han empezado a trabajar conmigo. Aprecio todo lo que habéis hecho en mi juego y en mi mentalidad, que no es la más fácil todo el tiempo, pero vosotros me aguantáis", aseguraba tras su victoria en Cincinnati, que anticipaba lo que más tarde ha llegado en el US Open.