Los pensamientos que invadieron a Rublev después de su derrota en Wimbledon: "Mi cabeza me estaba matando. Empecé a tener un poco de bipolaridad"
El tenista ruso, que debuta este martes en el Open de Asutralia, ha hablado de sus problemas de depresión en una entrevista en The Guardian.

Este lunes, 13 de enero, es el Día Mundial contra la depresión. Una enfermedad que no entiende de clases sociales, en la actualidad son muchos los deportistas los que se atreven a compartir sus vivencias con el fin de poder ayudar a aquellos que se están luchando contra este duro escenario. El último en hacerlo ha sido Andrey Rublev. En una entrevista en The Guardian, el tenista recuerda los duros pensamientos que aparecieron en su cabeza tras su derrota en Wimbledon el pasado año en primera ronda. "No veía la razón de vivir la vida".
"Todavía no estoy en un lugar donde me gustaría estar, pero, finalmente, tengo una base. Tengo algo sobre lo que apoyarme porque, hace medio año, llegué al peor momento de mi vida en términos de cómo me sentía conmigo mismo", explicaba el jugador ruso durante su conversación con el medio británico.
Ese punto donde tocó fondo ocurrió tras el pasado Wimbledon. En primera ronda, Rublev cayó ante Francisco Comesaña, que entonces ocupaba el puesto número 122 del mundo y nunca había ganado un partido en el circuito ATP. "Ese fue el peor momento que he afrontado sobre mí mismo. No se trataba del tenis. Tenía que ver conmigo mismo, como que después de ese momento no veía la razón de vivir la vida. ¿Para qué? Esto suena un poco dramático, pero los pensamientos dentro de mi cabeza me estaban matando, creando mucha ansiedad, y no podía soportarlo más. Empecé a tener un poco de bipolaridad. No sé si se puede decir así. Ahora me siento mejor. Puedo ver las cosas que estaban sucediendo", explicaba el tenista de 27 años.
"Desde Wimbledon algunas cosas cambiaron", apunta. "Estaba tomando pastillas antidepresivas y no me ayudaban en absoluto. Al final dije: 'No quiero tomar nada más'. Dejé todas las pastillas y Marat Safin (extenista ruso) me ayudó mucho. Me hizo darme cuenta de muchas cosas y luego comencé a trabajar con un psicólogo. He aprendido mucho sobre mí mismo y, aunque no me siento feliz ni en el lugar en el que me gustaría estar, ya no siento esa ansiedad y ese estrés tan loco de no saber qué hacer con mi vida".
«¿Cambiaría mi vida ganar un Grand Slam? Seguro que no»
Antes de Wimbledon, Rublev tocó el cielo tras proclamarse campeón del Mutua Madrid Open. Un torneo al que ya llegó envuelto en problemas de salud mental y de garganta, la victoria le supuso un soplo de aire fresco. "Madrid me salvó. Si no ganaba, habría quedado fuera del top 20. Madrid me mantuvo entre los 10 primeros. Me puse muy enfermo (de la garganta) y esa enfermedad me hizo dejar de pensar en otras cosas. Puse toda mi energía en jugar y, al dejar de pensar en otras cosas, me sentí muy aliviado. Jugué mucho, mucho mejor que cuando estaba sano".
Único jugador que el pasado año derrotó a Jannik Sinner y a Carlos Alcaraz, Rublev ya no se obsesiona con la posibilidad de poder conquistar un Grand Slam. "No voy a mentir y decir que no quiero ganar uno. Este es el sueño y haré todo lo posible para intentar hacerlo realidad. Pero, si gano un Grand Slam, ¿cambiaría mi vida o me compensaría? Seguro que no. No me hará más o menos feliz. Antes sentía que cambiaría mi vida, pero no la cambiará en absoluto", señaló.
🤯 Apparemment, Rublev n'a pas réussi à gérer sainement la course au Masters!
— Benoit Maylin (@BenoitMaylin) October 29, 2024
Demandez à son genou.
Le Russe, qui a mené 5/2 au 1er set, puis 4/2 au 2e, s'incline 7/6 7/6 c. Cerundolo.
Si De Minaur arrive en 1/4, l'Australien lui prend la 8e place. pic.twitter.com/6P62s3TXPz
De carácter temperamental, hace unos meses su imagen dándose raquetazos a su rodilla durante un partido ante Francisco Cerundolo en el Masters de París dieron la vuelta al mundo. Cada golpe fue asestado con tanta fuerza que incluso le empezó a sangrar la rodilla. "Al principio, cuando lo veía, por supuesto, que me sentía mal, avergonzado, porque no soy ese tipo de persona. No es agradable verlo. Ahora, que me conozco más a mí mismo, me siento más tranquilo. Estoy en un lugar mucho mejor. Cuando veo esos videos es como si estuviera en una vida anterior. Ya no soy yo".
«Puedes tenerlo todo en la vida, pero...»
A pocos días de debutar en el Open de Australia, el número 9 del ranking ATP y que ha llegado a cuartos de final en tres de los últimos cuatro años en Melbourne, se muestra con muchas ganas de afrontar esta nueva temporada. "Estoy muy entusiasmado con la temporada porque me siento mucho mejor que hace medio año. Estoy emocionado por lo que puede traer".
"Puedes tenerlo todo en la vida, una familia sana, todas las cosas materiales, la relación más sana, pero si hay algo que ocurre dentro de ti que no quieres ver, nunca serás feliz. Si lo encuentras y lo aceptas, te sentirás cada vez mejor". Él lo hizo y hoy es el claro ejemplo de que se puede.