TENIS

"El pobre hámster tiene que trabajar más por el mismo dinero": las razones del último lío del tenis

El cambio de Madrid y Roma a torneos de dos semanas genera críticas entre los tenistas. "El 90% de las jugadoras no estamos de acuerdo", dice Ons Jabeur.

La Caja Mágica durante la final del Mutua Madrid Open. /Angel Martinez/MMO
La Caja Mágica durante la final del Mutua Madrid Open. Angel Martinez/MMO
Nacho Encabo

Nacho Encabo

En las entrañas de Caja Mágica, Daria Kasatkina celebraba su victoria en tercera ronda en el Mutua Madrid Open con una reflexión curiosa. "Es duro porque somos como un hámster en una rueda. Esto no para, no tenemos tiempo para parar, es la historia de nunca acabar. Y todos los años es la misma historia, cada semana".

Le había gustado lo del símil del hámster porque unos días después lo volvió a usar cuando le preguntaron por la ampliación de los Masters de Madrid y Roma a dos semanas. "Afecta al pago del hámster. El pobre hámster tiene que trabajar más por el mismo dinero. Pobre hámster".

El calendario tenístico siempre ha sido un punto de fricción entre jugadores y organizadores, pero la decisión del circuito de convertir Madrid y Roma en "mini Grand Slam" no ha sentado del todo bien dentro de los vestuarios. Es cierto que los torneos pagan más dinero, que hay plazas para más jugadores (de 56 a 96) y que con ese formato los tenistas tienen un día de descanso entre partido y partido. Sin embargo, los grandes jugadores ven más desventajas que otra cosa.

"No te ayudan con los hoteles, sino al contrario. ¿Dónde cuesta una habitación 280 euros la noche?"

Daria Kasatkina Número 9 del ranking WTA

"Llevo muchos años escuchando a jugadores decir que la temporada es muy larga. Y esto precisamente no lo acorta", señalaba el ex número uno del mundo Andy Murray. Desde este 2023, un cabeza de serie necesita sumar seis victorias para ganar en Madrid o Roma, mientras que los que arrancan en primera ronda tienen un partido más, siete, los mismos que en un Grand Slam. Antes sólo se necesitaban cinco.

Además, la exigencia antes era mucho menor. Madrid se disputaba durante una semana, acababa un domingo y el lunes siguiente empezaba Roma. Eran dos semanas a full. "Ahora eso son cuatro semanas", incide Murray.

Andy Murray, en el torneo de Roma.  EFE/EPA/ETTORE FERRARI
Andy Murray, en el torneo de Roma. EFE/EPA/ETTORE FERRARI

La lucha de la ATP y l aWTA con los Grand Slam

Detrás del movimiento de la ATP y la WTA de ampliar Madrid y Roma y ponerlos al nivel de Indian Wells y Miami -los otros Masters de dos semanas desde hace décadas- está la pelea que tienen esos dos organismos con los Grand Slam.

Australia, Roland Garros, Wimbledon y US Open, los cuatro grandes, son la joya de la corona del tenis, pero escapan al control de ATP y WTA. Cada uno de ellos es organizado por la federación nacional de cada país y tienen unos prize money altísimos. Según datos que maneja la ATP, los Grand Slam aglutinan el 85% de los beneficios totales del deporte. Si el tenis fuera una tarta, casi toda se la comen los grandes.

El resto, el 15%, es para la ATP y la WTA. Así que la única forma que tienen para achicar esa brecha es ir mejorando su producto más destacado: los Masters 1000. La ampliación a dos semanas gusta, y mucho, a los jugadores de bajo ranking, porque les da la oportunidad de jugar los torneos más importantes y porque acceden a cheques más jugosos. En Madrid, por ejemplo, se plantaron en semifinales el número 65 y el 121 del ranking, algo impensable en un Masters 1000 de una semana. Pero a los top no les convence.

El problema para los no europeos

"No soy muy fan de ellos, la verdad. Preferiría que los torneos se hubiesen mantenido igual", decía la tunecina Ons Jabeur, "El 90% de las jugadoras no están de acuerdo con este cambio. Nosotras intentamos hacer que nuestro deporte sea mejor, y esto no ayuda en nada".

Si eres un top y pierdes pronto en Madrid, tienes que estar casi dos semanas sin poder jugar. Y si encima no eres europeo, te tendrás que rascar el bolsillo. "Un jugador como Schwartzman o Fritz.... Si pierden pronto en Madrid no pueden jugar un Challenger en la segunda semana (hay una norma que se lo impide). Y no pueden volver a Argentina o Estados Unidos, así que se tienen que pagar dos semanas a ellos y a sus equipos en Europa", razonó Casper Ruud, finalista de Roland Garros y el US Open en 2022.

En ese sentido, Kasatkina abre el debate sobre el precio de los hoteles oficiales. Los premios se han mejorado, sí, pero el alojamiento es carísimo. "No te ayudan con los hoteles, sino al contrario. A ver qué hace IMG con las tarifas de los hoteles en Miami y aquí en Madrid. ¿Dónde cuesta un NH 280 euros la noche?", se preguntaba. El debate está servido.