RALLY DAKAR 2023

¿Por qué Joan Barreda se queda fuera del equipo oficial de Honda para el Rally Dakar 2023?

La estructura de rallies de la marca japonesa ha decidido optar por una nueva cara en su alineación. Pero, a última hora, Barreda contará con una de sus motos con otros colores.

Joan Barreda y uno de sus mecánicos, en el pasado Dakar 2022. /Monster Energy Honda
Joan Barreda y uno de sus mecánicos, en el pasado Dakar 2022. Monster Energy Honda
Sergio Lillo

Sergio Lillo

La historia de Joan Barreda en el Rally Dakar es la de uno de los pilotos todoterreno más rápidos de todos los tiempos contra el que se aliaron las circunstancias. El español, de 39 años, ha rozado el ansiado trofeo del Touareg en repetidas ocasiones desde que inició su andadura dakariana en 2011, pero por activa o por pasiva este siempre le ha sido esquivo. En el proceso, ha conseguido ser el español que más victorias de etapa ha sumado en moto y ocupar el top 3 general con 29 (frente a las 33 de Cyril Despres y Stéphane Peterhansel). No obstante, su 13º Dakar lo disputará fuera de un equipo oficial. Esta es la intrahistoria.

Para entender la situación hay que rebobinar al 17 de enero de 2022, el día de la última etapa del Rally Dakar 2022. Barreda completó su 12ª edición desde que se estrenase en 2011 al manillar de una Aprilia, y lo hizo igualando su mejor resultado final de siempre: quinto. Pero la dura caída que sufrió en la quinta jornada le provocó una fractura en la clavícula izquierda y le hizo lidiar con ella e intensos dolores hasta el final. Ya en meta, reconoció que se centraría en descansar y recuperarse durante la vuelta a casa para pensar con calma su futuro. La retirada flotaba en el aire. A su regreso, también se le diagnosticó una fractura de la pelvis izquierda, por si fuera poco.

El castellonense, una de las figuras de referencia de la categoría de motos, ha llegado a competir al máximo nivel entre dos generaciones: la de Marc Coma y Cyril Despres en sus inicios, y la de los Sunderland, Price, Benavides o Walkner en estos últimos tiempos. Pero los errores propios y de estrategia de su equipo le han dejado sin la gran recompensa tras más de 10 años de dedicación, caídas, victorias y grandes derrotas. Su contrato con Honda acababa a comienzos de 2022 y él dejó claro que la clave para decidir sus próximos pasos serían las sensaciones y la mentalidad con la que se viese al volver a pilotar una moto. Esto lo hizo el 13 de marzo.

Joan Barreda, en una imagen del Rally Dakar 2022.  Monster Energy Honda Team
Joan Barreda, en una imagen del Rally Dakar 2022. Monster Energy Honda Team

Curiosamente, según ha podido saber Relevo, desde Japón habían insistido a Barreda que disputase el Abu Dhabi Desert Rally (5-10 de marzo), segunda cita del Mundial FIM de Rally Raid, a la vuelta del Dakar. Pero el español aseguró que no estaba del todo recuperado y por su mente no pasaba disputar el campeonato más allá del Dakar. El equipo Monster Energy Honda, estructura oficial de la marca japonesa para el Rally Dakar, decidió cambiar su apuesta.

Ya el 3 de marzo, en la previa de dicha prueba, se dedicó apenas una línea al español: "Joan Barreda no estará en la carrera, ya que continúa su recuperación tras las lesiones sufridas en el Rally Dakar". Pero dos semanas después de la cita, comunicaron al piloto que habían fichado a Adrien Van Beveren, procedente de Yamaha Racing, para ocupar su lugar en el equipo.

El fichaje no se hizo oficial hasta el 3 de junio -días antes de la fecha inicial del Rally de Andalucía, aplazado posteriormente por el riesgo de incendio en la región- y en el comunicado no había ya ni rastro de Joan Barreda. "Estamos muy encantados de hacer este anuncio y ya hemos completado los primeros test juntos. Hay una gran armonía en el equipo y estoy seguro de que Adrien nos ayudará a lograr nuestros objetivos", comentó Ruben Faria, General Manager del equipo aquel día.

Ruptura con el equipo y planes fuera de la competición

Los meses pasaron y ni Barreda, ni Honda pronunciaron palabra al respecto del estado de su relación. Pero desde el equipo se aseguró a Relevo en múltiples ocasiones que sus pilotos oficiales eran los tres que habían competido en el Abu Dhabi Desert Challenge de principios de año (Ricky Brabec, Pablo Quintanillla y Nacho Cornejo) además del recién llegado Van Beveren.

Barreda siguió entrenando con motos Honda en diferentes circuitos de motocross y manteniendo su forma física. Pero todo parecía encaminado a que el piloto dejaría atrás su vida deportiva sobre dos ruedas y el anuncio de su fichaje como parte de un nuevo proyecto empresarial del circuito de motocross RedSand MX Park (que planea construir un trazado en Torreblanca) el pasado 7 de octubre pareció corroborarlo.

Joan Barreda posa con su nueva moto antes del Dakar 2023.
Joan Barreda posa con su nueva moto antes del Dakar 2023.

"Mi punto de vista es que Joan lleva muchos años compitiendo con Honda, desde el segundo año del proyecto de rallies de la marca, si no me equivoco. Lo intentó, lo intentó y lo intentó, pero nunca lo ganó. Y en el equipo solo tenemos capacidad logística para cuatro pilotos y Japón ha entendido... ha querido darle una oportunidad a otro piloto y ponerle en la plaza de Joan", aseguró a mediados de diciembre Ruben Faria, General Manager de Monstery Energy Honda Team, a Relevo.

"Si me preguntas si Joan podría tener hueco en el equipo oficial, la respuesta es sí. Claro que podría, hasta que demostrase que no tiene opciones, o que no sabe navegar, pero infelizmente no podemos contar con cinco motos oficiales esta vez. Solo sé que va con una moto nuestra, sé que está entrenando para el Dakar y que está inscrito, y que es el número 5".

La preparación exprés de su 'last dance'

Pero a finales de octubre, Barreda recibió una nueva llamada desde Japón: había una moto disponible para el Dakar, si quería utilizarla. Ante el buen estado de forma física en el que se encontraba y tras consultarlo con su entorno y patrocinadores, el castellonense cogió el toro por los cuernos para preparar su particular Last Dance.

Así, se trasladó dos semanas a California para sumar kilómetros en el desierto a principios de noviembre, antes de recluirse otras tres semanas y media en Marruecos y atravesar sus dunas. A través de libros de ruta complejos ha entrenado la navegación, algo que no había vuelto a experimentar desde el pasado enero y que es determinante en una disciplina como los rallies. La sorpresa saltó cuando el pasado 1 de diciembre el Rally Dakar comunicó sus listas de inscritos provisionales. Allí aparecía Joan Barreda con el dorsal #5, pero en la casilla Equipo se podía leer: Monster Energy JB Team.

Honda, y en especial Shuhei Nakamoto, vicepresidente de Honda Racing Corporation, ha cuidado y valorado especialmente a Barreda, desde que en 2014 contó con él para potenciar el regreso de la marca, un año antes, al mítico rally. La nueva apuesta por el español, de casi 40 años, a pesar del punto de vista del General Manager del equipo oficial, es la última demostración. Su moto lucirá una "M" verde que ocupará mayor espacio incluso que el que tiene la marca en la propia estructura oficial de Honda. Además, el castellonense dispondrá de una CRF450 Rally como la de los cuatro pilotos oficiales.

Su carpa estará al lado de la del equipo oficial y compartirá caravana con el chileno Pablo Quintanilla, con quien ya hizo buenas migas en 2022. El castellonense disputará su 13ª edición sin haber competido en una sola carrera desde el Dakar de 2022, por lo que su rendimiento será una auténtica incógnita, sobre todo ante rivales que llevan desde marzo enfrentándose a los desiertos de medio mundo en el renovado Mundial FIM de Rally Raid. Pero, visto su historial, nadie le debería dar por amortizado, aún tiene una última bala en la recámara.