NATACIÓN

La adolescencia desconocida de Eladio Carrión antes de la fama: "Si tenía que hacer un entreno de los de vomitar, lo hacía"

Ahora es una estrella total del reggaeton, pero Eladio dejó la natación a punto de clasificarse para los JJ.OO. de Río 2016.

La adolescencia desconocida de Eladio Carrión antes de la fama: «Si tenía que hacer un entreno de los de vomitar, lo hacía»
Elia Montoya

Elia Montoya

"Si lo puedes soñar, lo puedes hacer. Tú lo puede' lograr, solo tiene' que creer". Estas frases que bien podrían estar sacadas de cualquier libro motivacional son realmente dos versos de una canción de rap de uno de los artistas que más triunfan a nivel global actualmente: Eladio Carrión. Con un videoclip en el que aparece Xander Zayas, uno de los boxeadores más importantes de Puerto Rico, explica la dura rutina de un deportista profesional de una manera humana y directa como si conociese a la perfección cómo es vivir así. Y la verdad es que podría decirse que es algo casi autobiográfico.

El nombre del artista aparece en lo más alto de las listas de éxitos internacionales, pero lo que muy poca gente conoce es que fue deportista profesional e incluso llegó a competir en un Campeonato del Mundo. Incluso se quedó a muy poco de obtener plaza olímpica.

La música latina siempre ha sido su sueño, pero durante su infancia y adolescencia tenía una pasión que le ocupaba mucho más tiempo y esfuerzo: la natación. Eladio comenzó desde bien pequeño en las piscinas, pero no fue hasta 2006 cuando se cruzó con la que se podría considerar su 'hada madrina'. Lourdes Vega, entrenadora del Club Equipo de Natación de Humacao donde el artista estuvo durante toda su etapa deportiva, cuenta a Relevo cómo supo que Eladio tenía talento y mucho futuro desde la primera vez que le vio nadar.

Talento innato para el agua

No podía desaprovechar la oportunidad de impulsar la carrera del por aquel entonces niño, así que no dudó en ofrecerle ser su entrenadora. Incluso le hizo cambiar de estilo al que debía especializarse: pasó de ser nadador de espalda a 'pechista' (nadador de braza en Latinoamérica). "En ese año me convertí en su entrenadora oficial y comenzamos a trabajar con metas, lo que es bien fácil con Eladio".

Pero los comienzos no fueron tan sencillos como parecen. En Puerto Rico existe la tradición de que los padres escogen tres deportes para que sus hijos practiquen de pequeños. El padre de Eladio quería que fuese 'pelotero' (jugador de béisbol) y le llevó al club de natación de su ciudad solamente para que él aprendiera a nadar. Pero según comenzó a dar clases, ya se vio que tenía talento innato.

Al poco tiempo ya se había convertido en uno de los nadadores jóvenes más rápidos de todo el país. La clave fue la constante disciplina y las ansias de mejorar. Como cuenta Lourdes, "Eladio es una persona que no necesita coger mucho impulso y pensar varias veces las cosas, cuando él dice que quiere algo lo va a alcanzar: él es así, lo que diga que va a hacer, lo logra".

Dicho y hecho: en el próximo campeonato en el que compitió, sin ser para nada favorito, ganó la medalla de oro en los 200 metros braza (su mejor prueba) y plata en el 50 y 100 braza. Consiguió estar dentro de la selección y le llevaron a los Juegos del Caribe y Centroamérica por edades. Con 15 años logró ser el nadador de braza número uno del país. En 2011 en Guadalajara se convirtió en el primer nadador de la historia de Puerta Rico en llegar a una final de unos Juegos Panamericanos. "Cuando él se pone algo en la mente, sigue y sigue hasta que lo consigue", afirma Lourdes.

Eladio Carrión con su entrenadora Lourdes Vega en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011.  CEDIDA
Eladio Carrión con su entrenadora Lourdes Vega en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011. CEDIDA

Pero para valorar la importancia y dificultad de lo que consiguió durante sus años de nadador, es importante decir que de todos los récords que batió todavía conserva uno más de 10 años después de que lo asentase. Es el 200 metros braza en piscina corta (2:10.10), su especialidad, en los Mundiales de Estambul 2012. Se clasificó directamente para el Campeonato del Mundo de Natación de Barcelona 2013.

Solo tenía en mente trabajar y hacer lo que tuviese que hacer para llegar a su máximo objetivo. "Cuando pude meterle al gimnasio lo hice; si tenía que hacer un entrenamiento de esos que cansan tanto que te dan ganas casi de vomitar, él lo hacía". Los entrenamientos eran muy duros, dos veces al día, incluso de madrugada o los sábados… Él sabía que iba a llegar. Y cuando lo logró, solo le quedaba disfrutar de todo ese esfuerzo que hizo.

Compromiso y apoyo incluso siendo una estrella

Como bien destaca Lourdes, no mucha gente valora lo que un deportista de alto nivel sacrifica en su día a día, porque al fin y al cabo la gente te ve o subido a un podio tras ganar o hundido en la derrota. Pero las intrahistorias de cómo se forjaron, todos los obstáculos que han tenido que superar, son lo que demuestran cómo son realmente como personas más allá de su profesión.

Ya sea por superar el estigma de la edad como el plusmarquista chino Wang Shun o las tragedias familiares de Kaylee McKeown, la mejor espaldista de la historia. O en el caso de Eladio, las pobres condiciones e instalaciones en los que debía entrenar en su país. Hasta él y sus compañeros de club se quedaron sin lugar para entrenar a meses antes del Mundial porque les echaron de la piscina de la Universidad de Humacao. El propio Eladio apareció en el periódico local denunciando esa situación porque no podía entender cómo con el gran rendimiento de su equipo podían estar sin medios para practicar su deporte.

"Eladio era la figura principal porque dejaba en evidencia que íbamos a preparar unos Juegos y no teníamos dónde entrenar. Él sabe todavía que estas luchas continúan y siempre estuvo ahí para ayudar y aún lo va a estar". Su entrenadora destaca que lo mejor de Eladio era su compromiso con su gente y su deporte por encima de todo.En un país como Puerto Rico en el que los deportes acuáticos nunca han sido grandes potencias, la mayoría de nadadores se debían costear casi todo y no tenían ayudas de ningún tipo, menos todavía económicas.

Por ello, Lourdes confiesa que Eladio, aunque hayan pasado los años, sigue vinculado de alguna manera al mundo del deporte. Uno de los ejemplos que más destaca es cuando hace relativamente poco tiempo el cantante se encontró en un aeropuerto con algunos nadadores de su país que iban en camino a una competición internacional y les dio dinero en mano. Él sabía lo que era estar en esa posición, el sacrificio de las familias y de los propios nadadores para poder pagarse sus viajes para competir.

El salto a la fama y orgullo por su país

La imagen del reggeatonero/trapero borde y alejado de la realidad al que solo le preocupa la fama y el dinero nunca se ha asociado a Eladio. O por lo menos la gente que le conoce de verdad, sobre todo en los peores momentos, sabe que no se corresponde a él. Esta es una de las razones por las que su entorno estaba tan escéptico cuando Eladio les dio de repente la 'gran' noticia: que dejaba su pasión de la natación por su otro gran sueño de ser cantante. La famosa frase de 'Madre quiero ser artista' se hizo realidad.

Al principio, sobre todo a su entrenadora, le chocó mucho que 'echase por tierra' todo lo que había trabajado para llegar a unos hipotéticos Juegos Olímpicos por la ilusión de ser artista. Pero no era realmente una idea loca. Desde bien pequeño se ha subido a tarimas a cantar lo que se le ocurriese sin ningún tipo de vergüenza. Se le veía contento encima de un escenario, como cuando nadaba una carrera importante. 

Además, en sus últimas competiciones nacionales cada vez había más fans que paraban a Eladio en restaurantes o piscinas como si fuese una superestrella, porque publicaba versiones o sus propias canciones en la aplicación Vine. "Venía gente de repente a nuestras mesas en el comedor de una competición y yo me asustaba hasta que me di cuenta que buscaban a Eladio para que les diese un autógrafo o una foto". En ese momento yo fui consciente de que lo íbamos a perder", confiesa Lourdes.

Aún así, su entorno pensaba que estaba a punto de dar un salto a ciegas. Podría perder un futuro como deportista profesional por comenzar en la música sin ningún tipo de seguro, en una industria en la que jugar con las jóvenes promesas es una posibilidad muy alta. Además, ya era mayor de edad y se encontraba estudiando en la universidad, así que la probabilidad de dejarla para dedicarse exclusivamente a componer y actuar era muy alta y arriesgada. Pero como bien dice Lourdes, la historia le dio la razón.

"Yo en el fondo sabía que también iba a encontrar un hueco en la música porque Eladio consigue lo que desea con su esfuerzo y constancia. Y así fue. A veces debería de aprender de él y arriesgarme más en la vida". La sinceridad de su entrenadora demuestra la confianza y cercanía que tenía con Eladio, a pesar de haber perdido un pupilo posiblemente olímpico.

¿Qué le deparará el futuro al artista? Pues es muy difícil saberlo, pero una cosa tiene clara el propio Eladio: va a representar a todo Puerto Rico de una manera u otra. A través de sus logros deportivos o musicales, el orgullo por su país siempre le ha guiado en todos sus proyectos profesionales. Es por ello que en una reciente conversación con su ya ex-entrenadora le confesó que tenía una idea de ser el futuro Presidente del Comité Olímpico de Puerto Rico, para ayudar de una manera más directa a los nadadores igual que le hubiese gustado que le ayudasen a él.

De momento, continúa lanzando álbumes de éxito internacional, colaborando con artistas tan reconocidos como Bad Bunny, Bizarrap o 50 Cent e incluso cantándole a Ibai o Mbappé con una canción que se titula como el futbolista francés. Como bien dice Lourdes Vega: "si a la natación hasta cierto punto le tocaba perder un buen atleta, con tal de que él lograra su sueño y sea el embajador de Puerto Rico que es ahora, pues me alegro".