El líder Jorge Martín, un paso por detrás de su rival: "He visto a Bagnaia un pelín más fuerte que en Indonesia"
El líder termina por delante de Bagnaia en el primer día en Japón, aunque el italiano deja mejores sensaciones de cara a la carrera.
Twin Ring Motegi (Japón)-. "Ha sido un día difícil". La cara de Jorge Martín este viernes reflejaba que las sensaciones encontradas en la pista en el primer día del Gran Premio de Japón no había sido las mejores. A diferencia de la semana pasada en Mandalika el líder de MotoGP sí que tuvo que empezar a mover algo su moto, porque en Indonesia le empezó a salir todo tan fácil desde el inicio que no tuvo que tocar nada. "Está claro que cada pista es un mundo, que cada pista necesita unas cosas, y aquí tenemos que ir en otra dirección", nos reconocía. Este jueves su rival, Pecco Bagnaia, declaraba que consideraba que Motegi podía ser un escenario más favorable para sus aspiraciones, y el reloj lo terminó confirmando.
"Creo que hoy ha sido un viernes muy positivo", comenzaba el análisis del italiano. "Hemos empezado muy bien esta mañana, desde que he salido me he sentido muy bien con mi moto y todo lo que hemos hecho ha funcionado, he mejorado mis sensaciones, he mejorado mi frenada, así que tenemos que estar contentos. Esta tarde las condiciones han sido mucho mejores y nos hemos podido centrar incluso más en esa frenada, y pienso que el ritmo ha sido fantástico". Un discurso muy optimista que contrastó con las dudas expresadas por el líder. Y eso que en la clasificación final de tiempos Martín terminó tercero, con Bagnaia en el séptimo puesto.
"Martín ha sufrido un poco en la segunda salida con el blando. Estaba con él en la pista en ese momento y he podido ver que le costaba un poco, pero para mañana y para el domingo seguro que estará listo". Porque si algo han aprendido los dos dominadores de MotoGP es a no fiarse el uno del otro. "Fuerte, la verdad es que le he visto bien", reconocía Martín sobre el rendimiento de su rival. "Pecco ahora mismo es mi rival número uno y siempre va a ser fuerte, eso ya lo tenía claro. Pero le he visto un pelín más fuerte que en Indonesia". Y es que Bagnaia fue muy consistente desde el inicio, con unos tiempos en las tandas más largas sólo al alcance del propio Martín, y de Pedro Acosta.
"Por la tarde las sensaciones han sido un poco peores de lo que me esperaba", continuaba en su análisis el líder. "Con las buenas sensaciones que tuve el año pasado aquí he salido y nada funcionaba, me estaba costando mucho mantener el ritmo. Sí que es verdad que a una vuelta me encuentro bien, pero en cuanto a ritmo tenemos que dar un paso". Esto en un día en el que hubo más variedad en cuanto a las marcas, con el destello de la Aprilia de Maverick Viñales, y con la presencia en medio de tantas Ducati (siete entre los diez más rápidos) de la KTM de Brad Binder, primero, aunque dejando dudas en el paso para la carrera, y, sobre todo, de la de Acosta, que como en Mandalika parece querer entrometerse en el reino de las motos de Bolonia.
"A nivel de sensaciones no estoy nada bien y aun así he conseguido ser rápido. Y no sólo a una vuelta, porque el ritmo tampoco es que fuese malo. Si consigo dar ese pasito podré mejorar el ritmo. Y si no, igualmente este ritmo no es malo para pelear por la victoria, pero las sensaciones no son las mejores", lanzaba como mensaje más positivo el líder de MotoGP, esto antes de una jornada, la del sábado, para la que se prevé una presencia relevante del factor lluvia, que podría cambiar por completo el panorama de la categoría en este momento tan trascendente de la temporada. "En estos momentos pienso que nuestro ritmo es muy bueno, quizás el más fuerte, pero es pronto para decirlo", se atrevía a lanzar Bagnaia.
"Creo que Pedro y Martín están muy muy cerca de mí… no, más bien estamos en el mismo nivel, son los dos más rápidos junto a mí", reculaba a renglón seguido. "Vamos a ver mañana, necesitamos dar un pequeño paso hacia adelante, y ya sabemos qué hacer. Y tenemos que estar preparados por si llueve". Un factor que puede condicionar también lo que pase el domingo, porque si cae mucha agua desaparecerá la goma (de los neumáticos) acumulada estos días en la pista nipona por el paso de las motos, y con esto las sensaciones que el asfalto transmite a los pilotos: un elemento que puede distorsionar la situación actual, que favorece al perseguidor en la general aunque, como siempre en este MotoGP, por un mínimo margen.