Una moto 'revolucionaria' complica la tarea a Pol Espargaró en su regreso: "El objetivo de KTM es ser campeones con cualquier piloto"
El catalán tuvo que terminar antes de tiempo la primera jornada de entrenamientos por un problema mecánico.
Red Bull Ring (Austria)-. De las 20 carreras que forman la temporada 2024 -tras la cancelación de Argentina, India y Kazajistán-, probablemente la más importante para KTM sea la de este fin de semana en Spielberg, su circuito de casa y el de su principal patrocinador. Y como en todas las ocasiones especiales tocaba ponerse de gala. Precisamente en su fin de semana más especial, los de Mattighofen cuentan con un invitado especial, el hombre que hizo debutar hace ya algunos años una inexperta KTM y que en la actualidad trabaja codo con codo con el equipo de pruebas para seguir desarrollando una RC16 que, por el momento, se encuentra lejos de sus objetivos, Pol Espargaró.
Todo ese trabajo pudo verse de manera tangible en la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Austria donde en la primera sesión terminó tercero, muy cerca de las dos Ducati de Morbidelli y Martín; y por la tarde, tuvo que dar por finalizada la sesión antes de lo previsto por un problema mecánico. "Hemos tenido demasiada mala suerte, porque estos problemas no nos han pasado en los test durante más de 300 vueltas, y han pasado aquí los dos de golpe y nos han inhibido las dos motos. Primero, en el primer 'run', y luego, en el segundo", confesaba Polyccio en el particular encuentro con la prensa tras la jornada.
Aunque lo más llamativo de la primera aparición del menor de los Espargaró fue una nueva KTM con algunos apéndices 'revolucionarios', un primer paso que parece haber dado muy buenas sensaciones a pesar de que la mala suerte se acabó apoderando del invitado especial de este GP. "Tienen una influencia en la rueda trasera, en todos los ámbitos de la curva, en frenada, aceleración, tracción. Sé que otras fábricas lo han estado probando y no les ha funcionado, pero a nosotros sí. Lo probamos con gomas medias y también para un time attack y fuimos muy rápidos, por eso creemos conveniente usarlas", explicaba.
Unas mejoras muy necesarias
Además de un escape nuevo bastante peculiar. "Cuando pruebas muchos motores, que es lo que estás haciendo con Dani (Pedrosa), no da tiempo a ajustar absolutamente todo. Hay escapes que son más básicos, que se pueden acoplar en cualquier motor, pero la mejora no es idílica, y el que estamos usando ahora da más potencia. Creo que podemos ser más rápidos que en el test y está adaptado al freno motor, la aceleración, es mucho más limpio y funciona mejor para este tipo de motor".
Precisamente por este motivo, el catalán terminó muy decepcionado al tener que terminar antes de lo previsto la jornada y tener que jugarse mañana una de las dos cartas para pasar a la Q2 con dos de sus compañeros de marca, Acosta y Miller. "Forma parte del proceso. Es una moto muy nueva y tienen que suceder estas cosas para que los ingenieros rectifiquen a tiempo, antes de que, en caso de que se escoja este prototipo para 2025, surjan en esas motos. De aquí a 2025 hay tiempo para solucionar esos problemas", reconocía.
Lo que es seguro es que, pese a un primer intento algo fallido, KTM está trabajando a destajo para tratar de salir del pequeño pozo de resultados en el que se encuentran metidos y poder luchar el próximo curso por el título junto a su principal joya, Pedro Acosta. "Todo lo que se hace en el 'test team' es para intentar que la situación se revierta. El objetivo de KTM es ser campeones del mundo con cualquier piloto. En este caso, el más joven que tenemos y con más talento es Pedro, y tenemos también un piloto experimentado como Brad, capaz de ser campeón del mundo si las cosas funcionan. La información que llegó del test fuimos muy, muy rápidos, y por la mañana íbamos bien. Confío en que esta moto pueda ir muy bien", concluía.