Du Plessis recoge la antorcha de Adesanya tras someterle en el UFC 305

"It"s time", gritó Bruce Buffer para presentar el combate estelar del UFC 305. Las 14.200 personas que abarrotaron el RAC Arena de Perth le siguieron. Visitar Australia siempre es un éxito. La cartelera comenzó a las 6:30 de la mañana hora local y el evento culminó a las 13:00, pero poco le importó a la gente. Estaban ante una noche que podía ser histórica y se entregaron. Lo fue. Sobre el octágono asistieron a un paso de antorcha. Israel Adesanya fue sometido por Dricus Du Plessis en el cuarto asalto y después de ser entrevistados ambos, el neozelandés (de origen nigeriano) alzó la mano de su rival. El peso medio tiene un nuevo rey sólido e Izzy avisó: "Tengo 35 años, algunos me queréis ver caer… pero eso no sucederá. Volveré".

La victoria de Du Plessis supone mucho para la UFC, pero sobre todo para él. Ganó el título en enero a Strikland y no pierde desde septiembre de 2019 (diez peleas). Su récord le abala, sin embargo, ganar al dominador de la división en los últimos años le hace entrar en una nueva dimensión. Con 30 años su estatus crece mucho. Sube por registro y también por aura. En Perth disfrutamos de una pelea de muchos quilates en la que demostró que si ve sangre no tiene piedad.

Adesanya comenzó marcando el ritmo con el jab. Tenía mayor alcance y quiso sacarle provecho. El neozelandés siempre daba la sensación de ataque. Llevó a cabo lo que siempre recomienda Sergio Maravilla Martínez a los púgiles jóvenes. El amago no permite descansar al rival. Se llevó el primer round, aunque en golpes conectados Du Plessis tuvo mayor tino. En el segundo acto todo cambió. Du Plessis llevó la pelea al suelo y se mostró muy superior. Puso en aprietos a Izzy, pero el local logró zafarse de todos los intentos de sumisión. El pleito se acaba de igualar.

El tercer asalto fue de un nivel superior. Ambos se mostraron vulnerables. La sensación era que cualquier de ellos podía caer con un golpe. Entraron en una especie de ruleta rusa, aunque ninguno encontró la bala cuando apretó el gatillo. Adesanya volvió a ser mejor, pero de manera ajustada. Las cartulinas podrían ser una lotería. No se llegó al final porque en el cuarto acto todo cambió. Adesanya siguió igual con los amagos. Conectó y fue el round en el que se le vio más cómodo. Du Plessis lanzaba volados con fuerza y uno pareció hacerle daño. En un momento dado, Izzy dio la espalda en la pelea. El campeón olió sangre y se fue a por él. Lo llevó al suelo, le golpeó y le acabó finalizando con un mataletón.

"He cometido un error tonto en el suelo. Volveré", apuntó Adesanya nada más terminar. Du Plessis, nuevo rey sin discusión de la división, alabó el trabajo de Izzy. Su futuro parece estar, según apuntó Dana White en la previa, en Strickland. El próximo paso del excampeón es más complejo. Lleva doce combates consecutivos peleando por título (once en el medio y otro en el semipesado), pero sólo ha ganado uno de los últimos cuatro y ahora es momento de replantear el camino. En el futuro podría vislumbrarse una revancha, pero necesita pasos entre medias. Él reconoció, con una cariñosa charla, al nuevo rey y todos los fans, también. Empieza la era de Dricus Du Plessis.