Jason Jackson y Patchy Mix rompen los pronósticos en Bellator 301

El futuro de Bellator MMA está en duda. Este viernes se disputó, en Chicago, Bellator 301. Será el último evento de la empresa en 2023 y todo apunta a que con él también finaliza una época. Hay muchos interrogantes de cara a 2024. Se lleva meses hablando de una posible venta y los trabajadores de la empresa (no luchadores) están empezando buscar opciones. La única certeza es que el show fue el que finalizó el contrato con CBS. Por el momento no noticias al respeto. Toca esperar, por lo que la sensación es que al menos Bellator MMA cómo lo conocemos hasta ahora llega a su fin.

Para la despedida, al menos del año, Bellator quiso contar con dos títulos. Querían hacer una gran fiesta y lo fue, porque además hubo dos sorpresas. Yaroslav Amosov llegaba al combate estelar como claro favorito y con el número uno del libra por libra en la cabeza. Jason Jackson es buen luchador, pero parecía lejos del ucraniano. De nuevo la imprevisibilidad del deporte volvió a aparecer. El estadounidense, de 33 años, acabó la noche como campeón del peso welter.

Jackson, claro underdog en las apuestas, se defendió de 13 intentos de derribo de Amosov. El ucraniano no pudo desarrollar su táctica y se llevó un castigo muy alto. No fue capaz de variar el plan cuando claramente no funcionaba. El estadounidense le estaba recibiendo con golpes muy claros cada vez que quería llevar la pelea al piso. Así, poco a poco, fue haciendo mella en el campeón y en el tercer asalto, con una gran derecha, le hizo tambalearse. Jackson vio sangre y no paró hasta que el árbitro intervino.

El duelo coestelar también se planteaba igualado, pero Sergio Pettis era el favorito. Desde su llegada de UFC había dominado, hasta este viernes. Patchy Mix venía de ganar el torneo del gallo, lo que le otorgó el cinturón interino de la división y un millón de dólares. Aún así, tenía hambre para alcanzar la gloria deportiva. Mix dominó la pelea en el suelo en el primer round, pero no pudo intentar la sumisión. Con un gran movimiento cuando estaban en pie lo consiguió en el segundo asalto. La acción se fue a ras de suelo con el campeón interino con un mataleón cerrado. Era cuestión de segundos y a Pettis no le quedó otra que abandonar.