JUEGOS PARALÍMPICOS

Loida Zabala y la aceptación de un cáncer incurable: "Llegar viva a París ya es una medalla suficiente"

La cacereña disputará sus quintos Juegos después de recibir el peor de los diagnósticos. Con Relevo repasa aquellos duros meses hasta su clasificación y cómo el deporte y su manera de ver la vida han sido fundamentales para seguir hacia delante.

Loida Zabala./RELEVO / Álex Corral
Loida Zabala. RELEVO / Álex Corral
Andrea Robles
Álex Corral

Andrea Robles y Álex Corral

Loida Zabala (Losar de la Vera, Cáceres, 1987) ha sido la gran referencia del powerlifting español en los últimos años. Cuando tenía once años le diagnosticaron una mielitis transversa, una inflamación en la médula espinal que le afectó a las piernas. En la silla sintió la libertad que sentía arrebatada en el hospital. Y se hizo fuerte, tan fuerte como para convertirse de manera consecutiva en 19 veces campeona de España.

Y también tan fuerte como para mostrar su alegría y su dolor, sin censuras, en sus redes sociales. En noviembre las noticias que publicó fueron desoladoras: le diagnosticaron un cáncer de pulmón en estadio 4. Por un momento tuvo la sensación de haber vivido ya sus últimos Juegos. Pero, en medio de la tragedia, ha sabido escribir las siguientes páginas de su vida y llegará a sus quintos, a París 2024. Ha sido fundamental el apoyo de su madre, Pilar, pilar también de su vida, y el deporte, "su salvavidas". Precisamente, a través de la Fundación Loida Zabala anima desde hace años a que más personas se sumen a ese deporte que le sirve de faro entre la amenaza de la oscuridad que la acecha.

"La vida es maravillosa y hay que aprovecharla al máximo". No suelta esa bandera en toda la conversación con Relevo. Sus palabras servirán de guía a quien necesite luz para seguir hacia delante. Porque Loida Zabala es eso, luz.

¿Por qué el powerlifting?

El deporte de fuerza para mí es vital, pienso que es un deporte que incluso las personas que hacen otro tipo de deportes tipo atletismo, natación y demás, necesitan la fuerza y a mí este deporte, tanto el powerflifting sin discapacidad, que también compito ahí, como el de silla de ruedas, es algo que me apasiona tanto porque me hace sentir libre, fuerte e independiente.

¿Y cómo ha sido esa experiencia de competir con gente sin discapacidad?

Ha sido muy gratificante, de hecho fui a una Copa de Europa en la que yo iba con fiebre porque después de los Juegos de Río me tuvieron que operar por una bajada de defensas, y al final decidí ir con 39 de fiebre y la gané. Yo no me esperaba eso, pero a veces la vida es así, a veces consigues cosas con las que ni siquiera sueñas.

Loida Zabala, durante un entrenamiento.
Loida Zabala, durante un entrenamiento.

Entiendo que el deporte te ha aportado un sinfín de cosas.

El deporte para mí es como un salvavidas, sin duda, me ha salvado de muchas situaciones en las que he tocado fondo a nivel emocional y ha hecho que yo me pueda volver a levantar y que continúe con mi vida. La primera fue a unos meses de los Juegos de Londres 2021. Estaba superilusionada y mi pareja de ese momento me maltrató, me lesionó el brazo derecho… Ahí todo mi mundo se me vino abajo. Lo primero que hice obviamente fue denunciar. Estuve muy mal, no quería ni siquiera comer y no entendía por qué tenía como un vacío emocional importante, pero mi familia me apoyó. Al final recuperé el brazo y fui a los Juegos, que fueron un chute de energía increíble y me hicieron salir de esa situación.

Ahora, en noviembre me detectaron un cáncer en estadio 4, ya incurable, y en ese momento lo primero que pensé fue que esa noticia podía llevarme a ese pozo emocional y hacerme tocar fondo. Ahí me acordé de los Juegos de Londres, centrarme en ellos me funcionó para seguir adelante, así que me centré en los de París y en ningún momento he tocado fondo. De hecho tomé con mucha ilusión el tratamiento para poder al menos mantener el cáncer a raya lo máximo posible. Sin el deporte no hubiera salido de esa situación tan complicada a nivel emocional.

"Mi pareja me maltrató y me han detectado un cáncer en estadio 4. El deporte ha sido mi salvavidas"

Loida Zabala Haltera
Loida Zabala habla de cómo el deporte la ha ayudadon ante los maltratos y su enfermedad . RELEVO / Álex Corral

Hay una cosa que me gusta mucho de ti y es esa capacidad que tienes para mostrarte, para «decir mira me está pasando esto y lo cuento».

Pienso que es importante que las personas que estamos expuestas mostremos que somos humanos, que somos de carne y hueso. Yo he vivido muchas cosas y no me considero ni una heroína ni me considero una persona fuerte a nivel emocional, me considero una persona normal porque todos tenemos esa fuerza interior y pienso que el poder mostrarlo a los demás quizás pueda hacer que alguien se dé cuenta de que tiene esa fuerza para poder sacarlo y para poder sobrellevar cualquier situación que pueda estar viviendo.

Has llegado a romper en lágrimas, eres muy generosa exponiendo lo que sientes. No sé si la gente te escribe para darte las gracias.

Nunca he tenido problemas para expresar mis sentimientos y mis emociones, tanto las positivas como las negativas, porque pienso que todas las emociones son superimportantes, eso es algo que aprendí en interpretación.

Y gracias a tu parte de actriz puedes mostrarte como eres y enseñar que aceptas lo que te está sucediendo, ¿no?

El deporte me ha hecho tan fría emocionalmente que no me permitía algunos tipos de emociones. La tristeza, la incertidumbre, la frustración son cosas que no sentía, porque al final te haces muy frío siendo deportista y te centras en el objetivo y no te paras a pensar qué tal estás, pierdes esa humanidad. Cuando empecé a estudiar interpretación me di cuenta de todo lo que me faltaba como persona humana y eso me mostró realmente que esas son emociones que hay que descongelar porque realmente necesitamos desahogar esas emociones y que no pasa nada. Porque si un día estás mal o tienes un mal entrenamiento o te han dado una mala noticia, no pasa nada si ese día estás mal, hay que desahogar esas emociones y al día siguiente levantarte y continuar.

Volviendo a tus mensajes en las redes sociales, recuerdo ese que empezaba por «mi vida ha dado un cambio de 360 giros». ¿Cómo te sientes hoy después de todo esto que has vivido en el último año?

Dspués de ese diagnóstico del cáncer, te diría a día de hoy que no cambiaría nada lo que he vivido y que volvería a coger esa experiencia si me dieran la oportunidad, porque a mí eso me ha hecho ser más fuerte a nivel emocional y a valorar cada minuto. Saber que te quedan unos años de vida al final lo que hace es que disfrutes el momento como si fuera el último, y que cada oportunidad que te llega o que cada sueño que tenías por cumplir en un futuro, lo primero que te dices es "no, hazlo hoy, porque quizá no hay un mañana".

"Hazlo hoy, porque quizá no hay un mañana"

Loida Zabala Haltera
Loida Zabala: «No cambiaría nada de lo que he vivido» RELEVO / Álex Corral

¿Y sabes cómo va a ir desarrollándose?

Mi tipo de cáncer al ser ya un estadio 4 con metástasis, al no tener cura, estadísticamente sí que hay unos años establecidos de cuánto me queda. Es algo que no he dicho públicamente todavía, porque al final tengo familiares que no son capaces de aceptar eso. Yo lo tengo superaceptado, superasumido y a mí no me afecta a nivel negativo, porque yo tengo claro que quiero ir a los Juegos de París, pase lo que pase… Y cuando terminen, no sé si mi cáncer me dejará vivir hasta Los Ángeles 2028, pero lo que sí que tengo claro es que voy a empezar a trabajar en ellos desde que acaben los de París 2024.

"No sé si mi cáncer me dejará vivir hasta Los Ángeles 2028, pero voy a empezar a trabajar en ello cuando acaben los Juegos de París"

Loida Zabala Haltera

Yo ahora te veo totalmente recompuesta, pero me imagino ese momento en el que te dan el diagnóstico debía ser brutal.

Fue un shock porque es la noticia que nunca te esperas que te van a dar a ti, y más siendo una persona que no soy fumadora, si yo no he fumado y tengo cáncer de pulmón metastásico, imagínate una persona que fuma, las posibilidades que tiene de tenerlo. Me impactó mucho, lo primero que hice fue decírselo a mi madre, esa noticia para ella sí que fue dura, es algo que le cuesta aceptar, le duele mucho… Y sí que me alegro de que mi abuela no haya vivido eso. Y, bueno, es algo que ya no depende de nosotros, yo estaré ahí para mi familia el tiempo que necesiten y si en algún momento aceptan mi final, ahí estaré para apoyarles hasta el último momento. Pero quiero decir mi vida ha sido increíble y pienso que deberían quedarse con eso, con lo maravillosa vida que he tenido, al final he vivido bastantes años y he sido feliz.

Para llegar a París 2024 ha sido fundamental el tratamiento que has recibido. Cuéntame en qué ha consistido.

Hay un tratamiento específico en pastillas, cuatro por la mañana y cuatro por la noche. Puede hacer efecto dos, tres años, y después el cáncer empieza a evolucionar y hay que buscar otro tratamiento. En mi estado busco un tratamiento que me dé la mejor vida posible. Me siento muy afortunada de haber encontrado un equipo médico tan bueno en el hospital Ramón y Cajal de Madrid y mi oncóloga Maru Olmedo, que es una maravilla, es como parte de mi familia. Me ha ayudado mucho porque ella quiere que viva lo máximo posible, obviamente, pero también quiere que cumpla mis sueños. Entonces, si hay que modificar el tratamiento para que yo baje de peso de cara a París, ella me ayuda a conseguirlo, y pienso que un oncólogo o una oncóloga tiene que tener eso, tiene que dar importancia a los sueños del paciente, porque gracias a eso al final el paciente se va a sentir bien a nivel emocional y pienso que las emociones tienen mucho que ver en la recuperación o en empeorar en una enfermedad tan grave. No es lo mismo estar generando constantemente oxitocina, dopamina, endorfinas y demás, a estar estresado y estar constantemente generando ese malestar.

Claro, porque no sé si en algún momento te planteaste que tenías que parar definitivamente, justo cuando tenías que buscar la clasificación para los Juegos.

Tuve que parar de entrenar en noviembre y diciembre, porque si no iba a morir. Cuando me dieron la noticia en diciembre de que no tenía ningún tumor en la cabeza fue como algo muy impactante porque claro, dos meses antes te dicen que tienes nueve tumores que no puedes entrenar, no puedes conducir, no puedes hacer nada y luego a los dos meses te dicen, bueno ya puedes volver a tu vida y es como "¿qué?" y ahí sí que lloré de felicidad.

Después llegaron un par de metástasis más. ¿Cómo fue encajar otro golpe?

Cuando me dijeron hace pocos meses que había vuelto la metástasis en el cerebro, que eran como residuos tumorales que estaban empezando a sangrar, yo lo primero que tuve fue miedo por el hecho de si tenía que volver a tomar corticoides, porque a mí me impiden bajar de peso y si no entraba en esa categoría no podía ir a los Juegos. Al final me hicieron la radiocirugía, y yo, superfeliz de vivir en un momento en el que hay tantos avances .

Hay una cosa que no quiero que se nos pase, estabas hablando del Ramón y Cajal y también de que de niña pasaste tiempo en un hospital público. ¿Estamos olvidando el valor de la Sanidad Pública?

Gracias a la Sanidad Pública estoy viva a día de hoy y desafortunadamente con la Sanidad Privada me podían haber detectado el cáncer de pulmón hace dos años, porque ya lo tenía y como me hacían solo placa en vez de hacerme un TAC, me decían que tenía pulmonía y no era así, era cáncer. Si yo hubiera sido consciente de esto hubiera ido a urgencias en la pública porque allí cualquier cosa que te pase te hacen un TAC y gracias a eso se pueden detectar muchos cánceres. Se debería invertir mucho más en Sanidad, y también invertir en la mental, porque no es normal que una persona tenga depresión y te den cita para tres meses, porque la salud mental es de lo más importante que hay.

Loida Zabala: «Gracias a la Sanidad Pública estoy viva a día de hoy» RELEVO / Álex Corral

Volviste a demostrar tu resiliencia y un par de días después de finalizar el tratamiento batiste el récord de España de la categoría -61 levantando 76 kilos. ¿Cómo fue ese momento? ¿Lo esperabas?

En enero pasé de levantar 101 a levantar 40 y fue un duro golpe porque, claro, mi rendimiento había bajado por completo. El hecho de haber subido a un podio en febrero, de levantar el doble de lo que levantaba en enero, me llenó de emoción, porque era algo imposible de que pasase.

Y después llegó ese día que tú tenías marcado en el calendario, que podía ser el mejor o el peor momento de tu vida, porque que era el día que sabías si te clasificabas para los Juegos.

Estuve semanas sintiendo mucha incertidumbre. En la última competición ni siquiera pude competir y hubo muchos cambios de categoría de otras deportistas, me quitaron esa posición que me daba esa plaza directa y mis sueños se alejaban. Y para mí era tan importante ir a los Juegos de París a nivel emocional, que tenía miedo de que me dijeran que no iba y hundirme. Y cuando me llamó la Federación Española fue un momento superespecial y es que me vuelvo a emocionar…

Para mí fue muy importante porque eso me demostró a mí misma que los sueños se pueden cumplir a pesar de todo.

La clasificación no fue posible, pero el IPC Powerlifting te invitó tras una petición del Comité Paralímpico. ¿Tuvieron en cuenta tu situación?

Si no hubiera tenido cáncer, hubiera podido trabajar hasta el final para conservar esa clasificación que tenía ya, pero el cáncer me quitó esa oportunidad de poder luchar hasta el final. Dicen que el que siembra quizás en algún momento recoge. Y bueno, había tenido malas noticias durante todo el año y yo pienso que ya me merecía algo bueno.

Loida Zabala: «Ya me merecía algo bueno»RELEVO / Álex Corral

¿Qué esperas de París?

De París lo que espero es disfrutar al máximo. Es la primera vez que voy a los Juegos y que no sueño con una medalla, porque para mí la medalla ya la he conseguido con el hecho de ir, con el hecho de haber sobrevivido a tantos casos en los que me he tenido que ingresar, porque casi muero. Llegar viva para mí ya es una medalla suficiente.

Para los siguientes Juegos voy a luchar al máximo para poder llegar en el mejor estado de forma que el cáncer me permita. Pero para París es eso, disfrutar, porque la medalla para mí ya la he conseguido. Y son los primeros Juegos en los que voy a poder vivirlo con mi familia y eso lo hace más especial todavía.

Loida Zabala: «Llegar viva para mí ya es una medalla suficiente» RELEVO / Álex Corral

"La medalla ya la he conseguido con el hecho de ir a París, porque casi muero"

Loida Zabala Haltera

En todo este camino… ¿Quién te está acompañando?

Yo diría que mi mejor apoyo es mi madre, porque es que ella es como el pilar, que además se llama Pilar, es el pilar importante en mi vida. Mi hermano ha tenido también mucho que ver porque él siempre ha estado ahí, junto con su chica, y yo pienso que son las personas más importantes. Obviamente, están mis tías y demás, que también han estado ahí siempre al pie del cañón, pero mi madre es la pieza fundamental en mi vida y toda mi vida realmente ha ido en torno a ella.

Loida Zabala es 19 veces campeona de España de powerlifting.  HOY
Loida Zabala es 19 veces campeona de España de powerlifting. HOY

En tu página web tienes un audio increíble contándole a aquella niña de once años cómo iba a ser su vida, le decías que no se preocupara. ¿Lo escuchamos?

Suena la voz de Loida en el móvil, es esa grabación que hizo hace unos años. La haltera lo escucha con atención:

"Hace 19 años que desperté y no podía caminar con normalidad. Me encantaría volver al pasado y hablar con aquella niña de 11 años para decirla 'Hola, soy tú en el futuro'. No te esfuerces en caminar, en dos días ya no podrás. Por eso me ves sentada aquí. Tienes una inflamación medular y pasarás los meses más largos de tu vida. Sabrás lo que es realmente el dolor físico hasta el punto de gritar como nunca.

Pero tranquila, la morfina te quitará ese dolor en cuestión de segundos. A cambio, amarás la vida de verdad. Ahora, cuando salgas del tercer hospital por el que pases, mirarás por la ventanilla del coche y entenderás el verdadero significado de ser libre.

Quizás en ese momento no seas consciente, pero empieza una nueva vida para ti. Caerás tantas veces que evolucionarás a pasos agigantados hasta el punto de quererte como nunca antes lo habías hecho. Y te convertirás en alguien invencible, porque siempre tendrás en la mente algún sueño por cumplir.

Sí, sé que suena raro, pero soñarás mucho con los ojos abiertos. Y no solo eso, sino que con cada uno pensarás, puedo conseguirlo. Así que aguanta estos meses como una guerrera, Loida, aunque sé que lo harás. Dile a mamá que no se preocupe por ti y que coma, porque no vas a morir. Háblale de lo que vivirás en tu futuro, porque, querida Loida del pasado, tu vida va a ser increíble".

Loida Zabala tras escuchar una grabación en la que se dirigía a su yo de 11 años. RELEVO / Álex Corral

¿Qué le dirías a la Loida de ahora desde el futuro?

Antes de ir a mis primeros Juegos, los de Pekín 2008, una persona que entendía mucho de este deporte me dijo que nunca iría a unos Juegos Paralímpicos. Y saber que voy a mis quintos Juegos es una muestra a mí misma de que algo de lo que me convencieron de que nunca pasaría, podía pasar hasta por cinco veces. Y por seis, no lo sabemos…