JUEGOS PARALÍMPICOS
68 años tiene 'la abuela' de París 2024: "Es diferente ahora que en la época de nuestras madres"
La esgrimista canadiense Sylvie Morel es la competidora con mayor edad de los Juegos Paralímpicos.
"Nunca pierdo. O gano o aprendo". Esa es una de las frases favoritas de la canadiense Sylvie Morel, que, a sus 68 años, ha disfrutado en el Grand Palais de París de la experiencia de disputar sus cuartos Juegos Paralímpicos, en los que por su edad fue la más veterana de las competidoras en la ciudad francesa.
Sylvie Morel (Pincourt, Quebec, 1956) ha competido en cuatro Juegos Paralímpicos desde su debut en Sídney 2000. Entre medias Londres 2012, Tokio 2020 y París 2024, dónde ha disputado un único combate, el que perdió frente a la ucraniana Natalia Morkvych, de 32 años, lo que supone una diferencia con ella de 36.
"Me enfrenté a la campeona ucraniana y básicamente me dio una lección. Aun así fue muy amable al permitirme que hiciera un punto", bromea tras competir la canadiense, que desvela la receta para, con los años que tiene, seguir en la élite de la esgrima.
"Trato de mantenerme en forma. Es diferente ahora que en la época de nuestras madres. Recuerdo a mi madre a los sesenta años. No se parecía en nada a mí", confiesa.
La relación de Sylvie Morel con el deporte paralímpico comenzó a raíz de un accidente automovilístico en 1993 que la hizo perder una pierna. De un día para otro su vida cambió y tuvo que adaptarse.
"Cuando te despiertas un día y te falta una pierna, no puedes sentirte igual que el día anterior. El deporte me ayudó a recuperar el sentido de mi valor porque me di cuenta de que no importaba si tenía una pierna o no, sino si pensaba intentarlo", apunta.
Su fisioterapeuta la introdujo en los deportes en silla de ruedas. Jugó al baloncesto en silla de ruedas antes de pasarse a la esgrima, deporte en enlque ha desarrollado una carrera longeva por "motivación, ambición y también ego".
Ahora, a sus 68 años, las cosas son distintas. Planea retirarse de la esgrima en silla de ruedas después de competir en los Juegos Paralímpicos de París. Anteriormente, se tomó un descanso del deporte entre 2016 y 2019 después de no clasificarse para los Juegos de Río de Janeiro 2016.
"Estos serán mis últimos Juegos Paralímpicos como atleta, ha sido un camino largo y arduo, lleno de sorpresas, tanto positivas como negativas. He superado todos mis sueños y expectativas al ir a mis cuartos Juegos Paralímpicos y estoy absolutamente asombrada de haber llegado tan lejos. A mi edad, rara vez ves a atletas de élite compitiendo con otros atletas cuarenta años más jóvenes que ellos", declara.
"El deporte siempre fue mi salida a las situaciones difíciles de mi vida. Nunca fui extremadamente talentosa en el deporte, pero nunca tuve miedo del trabajo duro para hacer de tu vida lo que quieres que sea. Estoy agradecida de haber hecho realidad mis sueños y esperanzas", confiesa.
Morel, que dirigió una escuela de esgrima en silla de ruedas durante quince años y actualmente entrena atletas, planea una segunda vida lejos de la competición. O una tercera si se cuenta, como ella, la que tenía antes de perder una pierna.
Siete años más que la española Mari Carmen Paredes
Mari Carmen Paredes, maratoniana de 61 años, es la deportista española con discapacidad de más edad en París 2024 y afrontará su tercera experiencia paralímpica junto a su guía y marido, Lorenzo Sánchez, de 65 años.