Macron saca pecho por "la idea loca" de la Ceremonia de Inauguración de los Juegos: "París será un gran teatro"
El presidente de Francia recibe a la prensa internacional en el Palacio del Elíseo.

Este viernes en la Ceremonia de Inauguración de los Juegos "París será un gran teatro". El presidente Emmanuel Macron fue el gran protagonista de la recepción oficial, en el Palacio del Elíseo, de una amplia selección de periodistas de todo el mundo. En el evento celebrado este lunes, en un ambiente multicultural amenizado por música clásica en directo, imperó la cordialidad y la tranquilidad en todo momento.
Macron sacó pecho con una ceremonia de apertura, que parecía "una idea loca" en su concepción, pero que se hará realidad en cuatro días. El presidente de la República francesa destacó la mentalidad "innovadora" de sus compatriotas y el "emprendimiento", conceptos clave en su discurso.
El máximo mandatario del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, hizo de maestro de ceremonias en un breve discurso para presentar a un Macron que enumeró las bondades de Francia. El galo pasó lista, desde los monumentos a la gastronomía, en la que puso especial énfasis con la mejor de sus sonrisas.
Macron, que visitó la Villa Olímpica este lunes, habló de sostenibilidad y del plan futuro de una ciudad que "ha cumplido con sus compromisos". El anfitrión del Palacio del Elíseo agradeció a toda Francia su esfuerzo y se congratuló de la estrecha colaboración con el Comité Olímpico Internacional. El alemán Bach, por su parte, incidió en los Juegos "más inclusivos de la historia", ante una audiencia en la que también estaba Tony Estanguet, presidente del Comité Organizador y expiragüista.
Tras el acto, el cóctel. En una ciudad que respira tenis por los cuatro costados, España tuvo protagonismo en varias conversaciones de la prensa mundial por un motivo: la ilusión que despierta la presencia de Rafa Nadal y Carlos Alcaraz en la Ciudad de la Luz: "Es el evento de los Juegos. Quiero ir a ver esa final de dobles como sea", comentaba Elias Makori, veterano periodista keniano que normalmente se desenvuelve en el atletismo, el deporte rey en su país.
Las primera semana olímpica en la capital francesa se abre en un clima de optimismo con la esperanza de albergar unos Juegos que pasen a la historia. La presencia de numerosos voluntarios llama la atención. "Han previsto muchísimos más de los que se necesitan", confirmaba un grupo de ellos, del colectivo de transportes, a nuestra llegada. "Ahora mismo, para cada petición que entra, hay ocho conductores disponibles".
Son muchas las calles con un carril "Paris 2024" especialmente habilitado para vehículos oficiales de la organización, buses, taxis, Uber y similares. La circulación es más fluida de lo que cabría esperar, incluso en las zonas más céntricas y turísticas, como el Arco del Triunfo. Pero habrá que aguardar unos días, cuando la ciudad esté en ebullición con varias competiciones en paralelo, para sacar conclusiones.
El despliegue de seguridad es inmenso, visible en cada arteria del centro, pero no se percibe nerviosismo, las sonrisas son las grandes protagonistas de momento. En un contexto geopolítico complejo, París espera que el deporte sea el tema central de los Juegos. Ese fue el espíritu del discurso de un Macron que concluyó su intervención agradeciendo a todos los equipos franceses su trabajo y esfuerzo. Y al resto del planeta un deseo: "Que disfrutéis de los Juegos de París y de nuestras ciudades". En cuatro días, se abrirá el telón del teatro.