Jon Rahm sueña con el oro en los JJOO tras un mal año en el LIV Golf y gracias a dos hoyos mágicos

Cuando Jon Rahm hace las cosas que tiene que hacer, sin necesidad de florituras, pero sobre todo sin cometer errores, es prácticamente imbatible. Es cierto que en el golf hay numerosos jugadores con capacidad de hacer lo mismo, pero si algo tiene el de Barrika es regularidad y constancia. Justo dos armas que está exhibiendo en París, en el torneo de los JJOO que se está disputando en Le Golf National.

A falta de una jornada para el final, Rahm es líder, junto al imparable Schauffele, con una tarjeta de -14. Y no llegó hasta ahí gracias un día prodigioso, sino en base a tres días sobresalientes en los que bajó del par de manera sostenida. No es el único que está en disposición de ganar, pero sí el más regular.

Este viernes volvió a dar una exhibición de tee a green. Prácticamente, ningún jugador es capaz de coger calles a su nivel, con un porcentaje elevadísimo de aciertos. Y si el vasco coloca bien la pelota, sus opciones de birdies aumentan. Consiguió cuatro en sus primeros nueve hoyos, fallandosolo el par en el ocho, que se le ha atragantado todos y cada uno de los días. Su talón de Aquiles.

Pero Rahm tiene otras banderas en las que saca sus armas. Concretamente, dos. En el tercero del campo parisino, el último campeón en el LIV Golf, donde no está teniendo un gran año, ha firmado eagle, birdie y birdie hasta el momento. Nadie le tose ahí. Tampoco muchos pueden igualar su rendimiento en el 14, donde también ha hecho eagle, birdie y birdie en los tres primeros días de competición.

No aflojó en las cinco horas que estuvo sobre el césped. Como un martillo pilón, Rahm tuvo muchas opciones de birdie, la única manera de optar a la victoria. Además, hoy sí que estuvo fino en el green y solo la mala suerte impidió que su resultado final fuese todavía mejor. Eso sí, sus rivales también juegan y varios le amenazarán este domingo. Aunque no lo hará David Puig, que por ahora marcha 23º.

Empatado con él está Xander Schauffele y por detrás aparecen Tommy Fleetwood (-13), Scottie Scheffler (-10), Rory McIlroy (-10) o Ludvid Aberg (-9). Todos ellos, y alguno más, tiene opción de medalla, pero la confianza de Rahm es altísima y todavía mantiene la cuenta pendiente que arrastra desde Tokio.