Por qué el fútbol sala no es deporte olímpico
Aunque a priori cumple todos los requisitos para formar parte de unos Juegos Olímpicos, el fútbol sala no parece estar en los planes del COI.
La magia de los Juegos Olímpicos es que, por 17 días, no existen los deportes minoritarios. Todos son relevantes. Todos encuentran su público e interés. Todos los que forman parte de la cita olímpica, cabría matizar. Porque lo cierto es que muchas son las disciplinas que se quedan lejos del mayor escaparate del mundo, sin un momento en el que sentirse el centro del universo. Es, por ejemplo, el caso del fútbol sala. Probablemente, una de las ausencias más difíciles de justificar en cuanto a criterios objetivos. También de estrategia.
En los últimos años, los Juegos Olímpicos ha buscado redefinirse como espectáculo y como negocio. La línea de actuación es clara: se busca atraer al público joven. Para ello, desde el COI han potenciado la inclusión de varios deportes que apelen a este segmento de la población, del que habitualmente se dice que tiene poca capacidad de atención. La idea es clara: deportes que consistan en eventos cortos y llenos muchos estímulos. Es la idea que subyace tras las incorporaciones de disciplinas como el skateboarding, el surf, la escalada (dividida en velocidad, boulder y dificultad) o el breaking.
Además, los deportes clásicos también han presentado versiones mini con el objetivo de no quedarse atrás en esta lucha por el público más joven. Así, el voleibol introdujo el voley-playa con gran éxito en Atlanta 96 y, tras él, han ido prácticamente el resto. El baloncesto tiene el 3x3, el rugby el rugby a 7, el ciclismo el BMX… Pero, ¿y el fútbol? La respuesta parece obvia, el fútbol sala ya es una versión de bolsillo del deporte rey con reglamento definido y amplia implantación mundial. Sin embargo, no forma parte de los Juegos Olímpicos.
¿Qué requisitos se necesitan para ser deporte olímpico?
Para responder a la pregunta de por qué el fútbol sala no es deporte olímpico, lo primero que se ha de hacer es descartar la razón habitual por lo que otras disciplinas emergentes, como por ejemplo el pádel, no ha derribado aún la puerta de los aros olímpicos. En resumidas cuentas, la Cara Olímpica impone cuatro requisitos a todo aquel deporte que quiere formar parte de los Juegos.
Requisitos para ser deporte olímpico
- Contar con una Federación Internacional reconocida por el Comité Olímpico y que se ajuste a las exigencias éticas de este.
- Cumplir cn el Código Mundial Antidopaje de la Agencia Mundial Antidopaje.
- Debe ser un deporte que no cuente con propulsión motora, esto es, el deportista no puede estar apoyado por ningún tipo de máquina.
- Para que un deporte sea considerado para los Juegos de verano, debe ser practicado como mínimo en 75 países y 4 continentes en la categoría masculina y 40 países en 3 continentes en la femenina.
Es importante tener en cuenta que el fútbol sala cumple con los cuatro requisitos establecidos por la Carta Olímpica para poder formar parte de unos Juegos Olímpicos. De hecho, así lo ha expresado públicamente en más de una ocasión Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español. "El fútbol sala reúne todos los requisitos para tener la denominación de deporte olímpico, pero no es un tema que podamos resolver nosotros. El camino no va a ser fácil, pero de lo que sí estoy seguro es que si FIFA logra encontrar los argumentos adecuados y llega a un consenso con el Comité Olímpico Internacional, el reconocimiento llegará", dijo el mandamás del olimpismo español en unas declaraciones de 2007 recogidas por la LNFS.
¿Por qué el fútbol sala no es deporte olímpico?
Por ello, el motivo hay que encontrarlo en otro lado. Concretamente, el fútbol sala no es deporte olímpico por una falta de voluntad de una de las dos partes: COI y FIFA (o las dos). Dos instituciones con una histórica mala relación entre ambas, como lo demuestra el hecho de que el torneo olímpico de fútbol sea disputado por selecciones Sub-23 y no con las grandes estrellas del balompié.
El proceso para que un deporte sea olímpico es el siguiente. Una vez que se cumplen los requisitos, se realiza un periodo de valoración en el que se tienen en cuenta diferentes criterios como su popularidad (ya sea en número de practicantes o de seguidores), su historia, su nivel de organización internacional… Todo ello es llevado a una votación en el seno del COI, donde los miembros han de elegir si la nueva disciplina entra o no. Por el momento, dicha situación no se ha dado.
El fútbol sala en la órbita olímpica
Aún así, el futsal sí ha estado en la órbita olímpica. En 2018, el fútbol sala formó parte por primera vez en su historia de los Juegos Olímpicos de la Juventud. Un evento que, en muchas ocasiones, se utiliza como banco de pruebas de cara a potenciales disciplinas que pueden formar parte de los Juegos Olímpicos. Aunque fue un éxito de público, el experimento quedó allí. Aquel año, por ejemplo, también debutó el breaking, cuya gran acogida sí acabó con su inclusión para París 2024.