Una vuelta por la puerta grande para María Conde con una España que pasa a cuartos invicta
La Selección de Miguel Méndez ha firmado un 3/3 en victorias y se clasifica como primera de grupo.
España ya está en cuartos de final de los Juegos de París tras ser primer de grupo al firmar una primera fase (casi) perfecta. La Selección, que durante los partidos ha tenido sus más y sus menos -como esas idas y venidas en los dos últimos duelos que hicieron a sus rivales reengancharse y casi que tensar la cuerda-, se va de Lille invicta, dejando claro su apuesta para, por qué no, aspirar a subirse al podio tras esta victoria ante Serbia (62-70). Y es que si algo ha mostrado el combinado nacional es que más allá de Leo Rodríguez y Megan Gustafson, que se han convertido en las referentes en estos Juegos, España tiene una rotación de bastante calidad. Porque si ante Puerto Rico fue Mariona Ortiz la que tiró del carro, este sábado el nombre propio ha sido el de María Conde. Porque el regreso de la alero tras haberse perdido los dos primeros duelos, ha sido por la puerta grande.
La mejor noticia para España, más allá de que con la victoria se evita así cruzarse con Francia y EE. UU. en la siguiente fase tras ser primera de grupo, ha sido el regreso de la madrileña. Y es que la alero no había podido ser de la partida ni ante China, ni ante Puerto Rico por unas molestias que, a la vista está tras lo de este sábado, ya ha superado. Miguel Méndez la alineó de inicio con el fin de que cogiese rodaje de cara a lo que viene. Pero es que la alero además le dejó claro que podía estar en pista absolutamente todo lo que hiciese falta.
Con buena lectura de juego, llegada rápida en carrera y aprovechando desajustes defensivos de Serbia para encontrar aro, Conde firmó una primera parte descomunal: en sus primeros once minutos anotó 10 puntos (con 5/5 en tiros de dos) y robó una bola. La alero volvió a demostrar esa sobresaliente capacidad para penetrar y cortar hacia adentro que tiene, sabiendo además ganar la posición en la puerta atrás a sus defensoras para anotar con facilidad. Además de estar atenta en defensa para robar balones y armar buenos contraataques para España.
"Me siento muy feliz de poder ayudar al equipo, ha sido complicado estar aquí sin poder jugar dos partidos, pero estoy muy feliz de poder poner de mi parte para seguir avanzando", explicaba Conde, que terminó el duelo como la máxima anotadora de la Selección con 15 puntos, un rebote, una asistencia y tres robos con los que firmó un 13 de valoración.
Y la realidad es que su carta de presentación en estos Juegos ha sido descomunal y una gran noticia para la Selección, que vuelve a demostrar que su plantilla cada vez va a más. Como hoy, junto a Conde, dejaron también claro Queralt Casas, Paula Ginzo, Alba Torrens, Mariona Ortiz o Andrea Vilaró (que nada más saltar a pista en el último cuarto la enchufó de tres), pese a salir desde el banquillo (la segunda unidad de la Selección cerró el partido con 37 puntos).
"Es una victoria muy importante. Decíamos antes de empezar que lo queríamos era conseguir cada victoria y el primer objetivo está cumplido. El último cuarto es verdad que nos han remontado en el marcador porque íbamos con una diferencia abultada, pero una vez más el equipo ha vuelto a reaccionar y aguantado para llevarnos la victoria. El sorteo no está en nuestras manos, creo que lo mejor que podemos seguir haciendo es centrarnos en nuestro trabajo y las cosas que podemos hacer y controlar" aseguraba en los micrófonos de Cope, Alba Torrens, tras el duelo.
Y es que, de este modo, España ha hecho los deberes -aunque tenga pendiente tratar de evitar esas desconexiones en la recta final cuando parecía que ganaba sobradamente que hacen que su rival vuelva a entrar en el partido- para poner rumbo a París en busca de los cuartos de final. Será este domingo cuando se conozca finalmente el rival de la Selección en la siguiente eliminatoria, durante un sorteo que se celebrará 45 minutos después de que finalice el último de los partidos (el Australia-Francia, que se disputa a las 21:00 horas).