Un Jon Rahm desconocido se deja casi todas las opciones en el PGA
El de Barrika firma un +6 en la primera jornada y deberá mejorar sus prestaciones en la segunda vuelta para superar el corte.

Con problemas para coger las calles, los greenes y poco fino con el putt. Jon Rahm se mostró irreconocible en la primera jornada del PGA Championship, el segundo major del año tras el Masters, que se llevó el de Barrika de manera brillante hace un mes.
Pero toda la magia que desplegó en el Augusta National no se vio este jueves en un durísimo campo de Oak Hill, donde se vuelve a celebrar el PGA diez años más tarde. Entonces, el corte estuvo en +3. En esta edición podría estar en +5, dado que, en el momento de la conclusión de la primera jornada de Rahm, tan solo doce jugadores se encontraban bajo par.
El golfista español comenzó su recorrido en el hoyo 10. Cogió la calle desde el tee, se plantó en green de segundo golpe y embocó un buen putt para birdie. Los siguientes cinco hoyos se resolvieron con cinco pares para un -1 al término del 15.
One hole. One under. Rahm is off to the races. @JonRahmpga | #PGAChamp pic.twitter.com/xP30mRaDIQ
— PGA Championship (@PGAChampionship) May 18, 2023
Sin embargo, todo se torció en el 16, donde el de Barrika necesitó de dos putts para finalizar el hoyo. A partir de ahí, entró en un bucle del que prácticamente no salió en ningún momento: bogeys en el 17 y 18, además de en los hoyos 2, 3 y 6. En el 7, de nuevo, dos putts, aunque, en esa ocasión, le costó un doble bogey que le situó en un peligroso +7.
Finalmente, Rahm pudo maquillar algo la jornada con un birdie en el 8 y un buen par en el último hoyo. El de Barrika tratará de que el final de la primera vuelta sea un buen presagio para el viernes, cuando saltará a Oak Hill por la tarde (19:58 hora española). Necesitará hacer magia para poder jugar el fin de semana, al que acceden los setenta mejores.
Scheffler no falla
En contraposición, Scottie Scheffler firmó una jornada impoluta: tres birdies y ningún bogey para un total de -3. El estadounidense es el único golfista que opta a arrebatar el número uno del mundo a Jon Rahm este fin de semana. Para ello, a Scheffler le basta con ganar el PGA Championship... o quizá ni eso, teniendo en cuenta la forma en la que el vasco comenzó el segundo major del año.

Fitzpatrick (+6), que compartía partido con Rahm, Justin Thomas (+2) o Rory McIlroy (+1), también terminaron por encima del par del campo, al igual que el donostiarra Adrián Otaegui, que entregó una tarjeta de 75 (+5) golpes, con cinco bogeys.