Jon Rahm usa a una leyenda NBA para explicar su colapso en el PGA: "¿Estoy un poco avergonzado por cómo he terminado? Sí, pero no es el fin del mundo"
El español asegura que se puso un poco nervioso durante su duelo final contra Scottie Scheffler.

Hubo un momento el domingo por la noche en el que media España soñó que era posible. Igual que el día anterior ocurrió con Melody durante su actuación en Eurovisión, el domingo muchos se ilusionaron al ver a Jon Rahm con posibilidades reales de levantar su primer PGA. Lo tuvo en su mano y durante varios hoyos fue capaz de poner a Scottie Scheffler, número 1 del mundo, contra las cuerdas.
El de Barrika comenzó la ronda fina a cinco golpes del estadounidense y la terminó a ocho golpes del campeón el domingo en el Quail Hollow Club. Sin embargo la tarjeta final no refleja la realidad de un torneo que se le escapó entre los dedos al vizcaíno. Rahm fue la sombra de Scheffler y amenazó con robarle una victoria inesperada al anotar tres birdies en un tramo de cuatro hoyos alrededor para empatar temporalmente con Scheffler en el liderato.
Sin embargo, el buen momento del español no tuvo continuidad y se encontró con su peor versión en la conocida como 'Milla Verde' del recorrido. Un mal momento que se tradujo en cinco golpes en los difíciles tres últimos hoyos, incluyendo un golpe de salida al agua en el 17 que le dejó sin opciones finales de conquistar su tercer major tras el US Open de 2021 y el Masters de Augusta de 2023.
Rahm no puso paños calientes al resultado final del torneo y aseguró que los nervios le jugaron una mala pasada en esos tres hoyos en los que se le escapó el triunfo final. Algo que, como él mismo dijo luego en rueda de prensa, no le había pasado hasta ahora cuando se había visto en esta situación.
"Creo que es la primera vez que estoy en esta posición, de estar cerca de ganar un major y no lo he logrado", apuntaba el de Barrika con media sonrisa en la boca. Una mueca que no escondía su descontento por no conseguir el triunfo final, pero que dejaba entrever cierta satisfacción por lo realizado en la última jornada, cuando llegó a empatar con Scheffler y a poner en duda su triunfo. "Las únicas veces que he llegado con posibilidades a la jornada del domingo he sido capaz de cerrarlo, pero esta vez ha sido una situación diferente".
A pesar de no conseguir la victoria en la jornada final Rahm quiso relativizar con ello, sabiendo que lo más importante le espera al llegar a casa. "Afortunadamente voy a volver a casa, quizás con tiempo suficiente para acostar a los niños. No lo sé. Pero al final del día haga lo que haga en el día, gane o pierda, a ellos les da igual. Y eso siempre es una buena perspectiva".
El golfista español quiso quitar hierro al resultado deportivo y lo hizo usando a una leyenda de la NBA como Charles Barkley como ejemplo. "Siempre me gusta recordar algo que Barkley les dice a los jugadores de baloncesto todo el tiempo. Yo juego al golf como forma de vida y es algo increíble. ¿Estoy ahora mismo un poco avergonzado por cómo he terminado hoy? Sí, pero sólo necesito superarlo. No es el fin del mundo. No soy un doctor o personal de emergencia, alguien que si tiene un mal día suceden cosas reales. Pasaré página y es algo más positivo que negativo todo lo que ha pasado esta semana".